Si hay un plato de Indonesia que en Europa está popularizado, ese es el Nasi Goreng. En realidad nasi goreng significa literalmente arroz frito, pero el plato es conocido como una receta elaborada con uno de los sabores más característicos de Asia. Como os podéis imaginar la variedad de formas de preparar el Nasi Goreng es enorme, pero hoy os vamos a enseñar una que no os dejará indiferentes.

Eso si, os recuerdo, como con todas las recetas asiáticas en las que metemos chile, cada uno que eche a su gusto, ya que el picante es algo muy personal, y para los que no les guste puede destrozar por completo un plato. Las cantidades que indico en esta receta son para los que les guste bastante picante y aguanten bien, así que básate en eso.

Preparación del Nasi Goreng

Lo primero que tenemos que hacer es cortar las chalotas (o si no tenemos la cebolla) en cuadraditos pequeños y freirlos hasta que queden bien doraditos. De hecho lo suyo es dejarlos crujientes. Una vez estén listos los sacamos y los dejamos con papel de cocina para quitar el aceite sobrante.

Calentamos 3 cucharadas de aceite de oliva (aunque lo ideal es de cacahuete) y echamos una cucharada de jengibre, una de cilantro bien picado, el chile en rodajas y una cucharadita de pimentón dulce. Tenemos que removerlo rápido y tenerlo menos de un minuto, para que no se queme. En seguida añadimos una zanhoria rallada en trozos grandes y seguimos moviendo, que vaya mezclándose todo.

Ahora echamos una cucharada de salsa de soja y una de kétchup (este es el truco) y removemos todo bien. Añadimos el arroz ya cocido y subimos el fuego para que este se fría. Podemos por ejemplo añadir unas gambas o pollo frito, le da un toque extra para completar este plato, aunque a mi me encanta solo.

Cuando veamos que todo se ha mezclado bien y el arroz se ha frito ligreramente estará listo.

Tiempo: 15 minutos

Dificultad: 3/5

Digestión: 2/5

Precio: 3€