- Total: 7 h
- Comensales: 2
El próximo 24 de diciembre, en muchas casas se cenará cordero asado. Es una tradición navideña muy arraigada en España y razones no le faltan para serlo. Un buen asado de cordero es una auténtica delicia. Cuando la carne queda tierna y jugosa y la piel queda tostada y crujiente uno querría que no se acabase nunca la comida.
Lo bueno es que, aunque se acabe, siempre se puede volver a cocinar y con estos consejos que te vamos a dar no vas a tener que esperar a que te invite tu madre la próxima Nochebuena, sino que tú mismo podrás cocinarlo tanto para ti como para tus invitados porque te vamos a aclarar todas las dudas sobre cómo asar cordero al horno para que consigas cordero asado al horno perfecto.
¿Cuánto tiempo se cocina el cordero? ¿A qué temperatura hay que precalentar el horno para asar cordero? ¿Cómo lo colocamos en la bandeja? ¿Hay que echar agua o aceite en el horno? Todas estas y muchas otras dudas son las que nos suelen rondar la cabeza, y aquí las contestamos todas para que consigas cocinar un cordero al horno perfecto de la forma más fácil posible.
Cuánto tiempo hay que asar el cordero en el horno
Tómate tu tiempo, sobre todo si quieres asar un cordero de cierto tamaño. Así que cuenta con ir preparando el horno al menos unas tres horas antes de que tengas que servirlo en la mesa. Eso en el caso de que vayas con prisas, porque si te puedes permitir dejarlo unas seis horas en el horno, el resultado será un espectáculo.
A partir de ahí, el proceso es el siguiente: precalentar el horno a una temperatura entre 110 y 180 ºC, en función del tiempo del que dispongas. Con la receta más rápida, a 180 ºC, necesitarás 45 minutos de cocción del cordero con la carne hacia arriba, 45 minutos con la piel hacia arriba y 15 minutos finales a 200 ºC para acabar de tostar bien la piel y así conseguir un acabado crujiente perfecto.
Un pequeño truco si necesitamos ir con algo más de margen de tiempo es empezar cuatro horas antes y dejar el tostado para el final, justo antes de servirlo. Para eso, sacamos el cordero del horno a falta del tostado final y lo reservamos. Mantenemos el horno encendido a 180 ºC -podemos aprovechar para cocinar otro plato- y media hora antes de servir el cordero, subimos el horno a 200 ºC y metemos el cordero con la piel hacia arriba y lo dejamos durante unos 15-20 minutos hasta que se tueste la piel.
Pierna, paletilla o costillar
Si no somos muchos en casa y cocinar medio cordero se nos hace mucho, una duda común a la hora de elegir qué parte del cordero cocinar es si debemos optar por la pierna, la paletilla o el costillar.
La verdad es que depende de los gustos del consumidor. La paletilla es más tierna que la pierna y algo más pequeña, de manera que una paletilla de lechal suele servirse como ración para una persona. El costillar es la parte más jugosa porque es la más grasa.
Aunque el precio es algo más caro, el cordero lechal tiene un sabor más suave y delicado que el de los corderos de mayor tamaño como los recentales o los pascuales. A la hora de cocinarlos la diferencia entre ellos va a ser el tiempo de cocción necesario en el horno. Los más pequeños, los lechales, tendrán suficiente con unos 45 minutos por cada lado a 180 ºC más el tostado final a 200 ºC. Los recentales necesitarán unos diez minutos más por cada lado, antes del tostado y los corderos pascuales unos 20 minutos más por cada lado antes del tostado.
Las distintas piezas también requieren distintos tiempos, así pues, si ordenamos las piezas de menor a mayor tiempo de cocción nos quedarían así: costillar de lechal, paletilla de lechal, pierna de lechal/costillas de cordero recental, paletilla de cordero recental y pierna de cordero recental.
Por eso, las primeras veces es importante estar pendientes y así de paso le vamos pillando el punto a la receta en nuestro horno. Tranquilo, es más fácil de lo que piensas, solo necesitas hacerte con un termómetro de asados y comprobar que el centro de la pieza no esté por debajo de los 55 ºC -si te gusta la carne poco hecha- ni por encima de los 71 ºC, si te gusta la carne hecha pero no quieres que se te quede reseco.
La temperatura del horno
El cordero se asa con el horno a 110-180 ºC y en el tramo final se sube a 200 ºC para tostar la piel.
Es muy importante precalentar correctamente el horno. Para ello lo encenderemos a la temperatura elegida al menos una hora antes de meter el cordero. El horno te avisará de que está listo antes, pero no metas aún el cordero dentro porque en realidad la única zona del horno a esta temperatura es la que está cerca del sensor, así que déjalo un buen rato a esa temperatura para que el calor se reparta de la forma más homogénea posible y garanticemos que está todo el horno a la misma temperatura.
Cómo colocar el cordero en el horno
El cordero lo colocamos sobre una rejilla, que a su vez colocaremos sobre una bandeja en la que pondremos un poco de agua y en la que se irán recogiendo los jugos que vaya soltando el cordero. Para evitar que el cordero al horno se cueza tendremos que asegurarnos de que el cordero no toca el agua.
Otra duda que surge a menudo es si debemos colocar la carne hacia arriba o hacia abajo, y la respuesta es muy fácil: primero la carne hacia arriba y luego la piel hacia arriba. Es pura cuestión de lógica, pues primero queremos cocinar la carne para que quede tierna y jugosa, y después será el momento de ponerlo con la piel hacia arriba para tostarla y conseguir que el cordero quede crujiente.
Receta de cordero al horno paso a paso
Ingredientes
- Paletilla de cordero, 1 ud Agua, 2 vasos Vinagre de vino, 1 cucharada Sal, c/s
- Agua, 2 vasos
- Vinagre de vino, 1 cucharada
- Sal, c/s
- Mantequilla, 20 g
- Patatas pequeñas, 6 ud
- Mantequilla, 25 g
- Orégano, 1 cucharadita
Paso 1
Asar cordero a 110 ºC
Paso 2
Asar patatas a 200 ºC
Paso 3
Servir todo junto regado con la salsa del cordero
Paso 1
Damos unos cortes al cordero para que luego sea más sencillo trincharlo en la mesa. Si no estamos habituados a cocinar este tipo de piezas es posible que tampoco tengamos un cuchillo o macheta adecuados y, en ese caso, es mejor pedirle a nuestro carnicero de confianza que le de él los cortes.
Paso 2
Colocamos el cordero en una bandeja de horno que tenga algo de profundidad, pues también colocaremos ahí las patatas al final Regamos el cordero con el vinagre.
Paso 3
Untamos el cordero con un poco de mantequilla en pomada, esto hará que al terminar la cocción tenga un bonito color dorado y la piel mucho más crujiente. Añadimos el agua en la bandeja.
Paso 4
Tapamos la bandeja con papel de aluminio y lo dejamos cocinando en el horno precalentado a 110 ºC durante 6 horas. Si vamos con prisa podríamos dejarlo unas 4 horas a 140 ºC. Cuando esté listo, lo sacamos y lo reservamos.
Paso 5
Mientras tanto, preparamos las patatas. Las cocemos en agua sin pelar durante 10 minutos y después las cortamos por la mitad a lo largo. Las situamos bocarriba en una bandeja y ponemos daditos de mantequilla encima.
Paso 6
Condimentamos con sal y con orégano y, cuando esté libre el horno, horneamos a 200 ºC hasta que estén doradas.
Paso 7
Introducimos de nuevo el cordero en el horno a 220 ºC para darle un dorado final de unos 15 minutos o hasta que lo veamos ya crujiente y dorado.
Paso 8
Colocamos las patatas en la misma fuente con el jugo del cordero y servimos todo junto.
También te puede interesar
- Receta de tiramisú fácil para los que nunca han hecho tiramisú
- Gambas al ajillo en microondas en menos de 10 minutos
- Cómo cocinar pulpo
- Gambas en salsa de whisky
- Consomé de Navidad con ñoquis
- Salpicón de marisco
- Pastel de gambas y puerro
- Ensaladilla rusa de erizos
- Hojaldre de lubina y crema de gambas
- Salmón ahumado casero fácil
- Pollo relleno de carne y ciruelas