Cuando yo era muy pequeña, pensaba que los ricos y los famosos no cocinaban nunca. En los cuentos que leía y en las películas que me dejaban ver, no había princesas cocineras ni ricos que se hiciesen ellos solos el desayuno. Qué mal, la verdad, porque es un pensamiento realmente injusto. 

Afortunadamente yo no podía estar más equivocada y, en pleno siglo XXI, internet mediante, hemos podido ver en acción culinaria a no pocas celebridades que aprovechan sus redes sociales para compartir con sus seguidores su talento delante de los fogones. El último famoso que se ha hecho viral en su cocina ha sido Brooklyn Beckham. El hijo mayor de David y Victoria Beckham ha encandilado a sus más de 16 millones en Instagram al publicar la receta de una tortilla francesa.

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Algunos pensarán que qué puede tener una tortilla francesa para que tanta gente se haya fijado en ella. Muchos creerán que es por un carísimo ingrediente que utiliza para darle el toque final, pero lo cierto es que el vídeo de la tortilla francesa del joven Beckham resulta hipnótico porque con una naturalidad pasmosa, hablando a cámara se hace la tortilla francesa perfecta que ya quisieran servir muchos bares. Tengo que admitir que quizá sea el vídeo más didáctico que he visto en redes sobre cómo hacer una tortilla francesa perfecta.

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La tortilla de Brooklyn Beckham recuerda bastante a la que hace unos meses nos dejó boquiabiertos cuando se la vimos hacer a Sidney, el personaje interpretado por Ayo Edebiri en la aclamadísima serie The Bear. En aquella ocasión, la sous chef del restaurante ficticio más famoso de Chicago preparaba una tortilla rellena de queso Boursin que terminaba desmigando por encima unas patatas fritas onduladas con sabor a cebolla y crema agria.

De una manera más sencilla, el primogénito de la ex Spice Girl, hace una tortilla con el mismo aspecto suave y sedoso en un vídeo de unos pocos segundos. En una sartén antiadherente, utilizando una buena cantidad de mantequilla - explica que es lo lógico si se va a hacer una tortilla francesa, porque en Francia adoran la mantequilla- y cuajando los huevos muy despacio consigue una tortilla de aspecto impecable a la que da su toque personal poniendo encima una generosa cucharada de caviar y un poco de cebollino fresco picado.

¿Qué es el caviar Ossetra y por qué usa una cuchara de plástico para servirlo?

Aunque la elaboración de la tortilla sola ya es impecable y no necesitaría nada más para alegrarnos la cena más de un día, el joven, después de sazonar la tortilla con sal y pimienta, la corona con un caviar que, según podemos ver en el envase, se trata de caviar Ossetra Malossol. Esto aportará mucho sabor umami marino al plato.

Ossetra hace referencia a la especie de esturión de la que se ha obtenido el caviar y Malossol al tipo de conservación del mismo. El caviar Ossetra, también escrito como Osetra u Oscietra, es el segundo en el ranking de los más populares por detrás del caviar Beluga. Las huevas del Ossetra son de tamaño ligeramente inferior a las de Beluga y su precio es más económico, aunque sigue siendo un producto de altísima calidad. En COCINILLAS hemos consultado el precio del que usa Brooklyn Beckham en la receta y cuesta 185 € la lata de 125 g. La misma lata de caviar Beluga tiene un precio de 390 €.

El término Malossol o Maolossol, hace referencia a la técnica de conservación tradicional rusa que emplea la mínima sal posible para mantener el sabor lo más puro posible. La otra alternativa es el caviar salado, con una mayor vida útil y más fácil de conservar. El caviar, en general, es un alimento muy delicado que siempre se debe consumir en el momento una vez que se ha abierto el envase y debe estar refrigerado en todo momento, incluso en la mesa. 

A la hora de servir el caviar, a muchos les habrá llamado la atención que utilice una cuchara de plástico para servirlo. Aunque puede parece un gesto un tanto snob, nada más lejos de la realidad. El caviar nunca debe servirse con cubiertos metálicos, pues el contacto con el metal altera el pH y cambia (para mal) su sabor. Es por eso que en el servicio del caviar se disponen siempre pequeñas cucharitas de plástico, nácar o cerámica.

Cómo darle sabor umami a una tortilla francesa sin tener que gastar 100 euros en caviar

No sé vosotros, pero a mí lo de abrirme latas de caviar para darle saborcillo a una tortilla francesa en un día tonto entre semana se me va por mucho del presupuesto. Pero sabiendo que el objetivo es darle un punto marino y muy umami, yo a la próxima tortilla francesa que me haga le pienso poner un poco de furikake, que es un condimento típico japonés hecho a base de algas y muchísimo más barato. Se encuentra fácil en tiendas de productos asiáticos o por internet, dura meses y se puede usar para un montón de cosas. Aunque esto ya, si eso, lo vemos otro día.

Añadir umami, también era el objetivo de Sidney al añadir unas patatas con sabor a cebolla y crema agria. Las patatas fritas saborizadas suelen contener una buena cantidad de glutamato monosódico, un potenciador de sabor rico en umami.

Un umami más castizo podríamos conseguirlo coronando nuestra tortilla con unas migas de mojama de atún o un poco de hueva de maruca rallada. O incluso con unas migas de jamón ibérico.

Paso 1

El primer paso es batir muy bien los huevos en un bol con ayuda de un tenedor y sin añadir sal ni ningún tipo de condimento.

Paso 2

Lo siguiente que haremos es poner a calentar una sartén antiadherente de unos 26 centímetros de diámetro. Si tu sartén es más pequeña, usa menos huevos. 

Paso 3

Derretimos 2 dados de mantequilla en la sartén a fuego medio y añadimos los huevos batidos. Bajamos el fuego y vamos removiendo el huevo con suavidad, sin rascar el fondo de la sartén para no hacer unos huevos revueltos y, con mucha paciencia, estaremos removiendo a fuego mínimo -el vídeo es maravilloso porque está hecho en una cocina de gas y en todo momento se ve la intensidad de la llama- hasta que el huevo se haya espesado y se haya convertido en una crema.

Paso 4

Cuando el huevo ya no esté líquido y con el fuego prácticamente apagado -si es una cocina vitrocerámica, podemos apagarlo del todo-, plegamos la tortilla sobre sí misma y la volcamos en un plato.

Paso 5

Inmediatamente, pasamos un dado de mantequilla fría por la superficie. Esto, aparte de un sabor increíble, le dará un aspecto brillante. Ahora es el momento de sazonar la tortilla, así que la salpimentamos al gusto.

Paso 6

Para darle el toque umami de lujo, ahora habría que ponerle una cucharada muy generosa de un caviar de calidad y terminar el plato con unos tallos de cebollino fresco picado.