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La tortilla de patata recién hecha es uno de los mejores inventos de la historia de la humanidad, lo de con cebolla o sin cebolla ya es cuestión de cada uno, pero es casi magia que, con tan pocos ingredientes y de manera tan sencilla, se pueda hacer algo tan rico y que guste a tanta gente.
Pero si se da el caso de que sobre tortilla de patata y, consecuentemente, se enfríe, entonces la cosa cambia. Hay personas a las que no les importa que la tortilla esté fría, incluso hay quienes la prefieren así (recuérdense las fiambreras metálicas rojas y azules con filetes empanados y una tortilla encima que llevaba tu madre o tu abuela para pasar el día en la playa o en el campo). Pero a otras, la tortilla fría nos deja ídem. Y recalentar la tortilla tendría que estar contemplado como delito, que la tortilla en el microondas se reseca y no mola nada.
Para esta situación, si no te gusta la tortilla rellena, la solución es hacer algo que antes se hacía bastante en las casas y es guisar la tortilla o más bien calentarla dentro de una salsa para que no se reseque y quede bien sabrosa. Es un método que cada vez está más en desuso en muchos lugares, aunque en León, la tortilla guisada sigue siendo uno de los platos más típicos de su gastronomía.
[Tortilla rellena, receta fácil paso a paso]
La receta de salsa que propone el chef vasco, que utiliza en una tortilla de patata con cebolleta y pimiento, puede hacerse para guisar una tortilla entera que hagamos a propósito para hacer una tortilla guisada o para guisar trozos de tortilla de patata que nos hayan sobrado y no queramos comer fríos, es supersencilla y se prepara en pocos minutos.
Ingredientes (para una tortilla de tamaño mediano)
- Tortilla de patata fría, 3 o4 raciones
- Aceite de oliva virgen extra, 2 cucharadas
- Ajo, 1 diente
- Caldo de pollo, 400 ml
- Pimiento rojo, 1 ud
- Harina de trigo, 1 cucharada
- Cebolla, 1 ud
- Salsa de tomate, 2 cucharadas
- Pimentón, 1 cucharada
- Sal
Paso 1
Sofreír el ajo
Paso 2
Añadir la harina y cocinarla un par de minutos
Paso 3
Echar el vino, el caldo y el azafrán. Cocinar la salsa.
Paso 4
Echar la tortilla y guisarla durante dos o tres minutos
Paso 5
Servir con la salsa y los tomates cherry aliñados
Paso 1
En una cazuela baja o en una sartén amplia y honda, ponemos a calentar dos cucharadas de aceite de oliva virgen extra con el ajo finamente picado. Lo rehogamos a fuego lento hasta que el ajo empiece a 'bailar' y a desprender sus aromas.
Paso 2
Antes de que el ajo coja color, añadimos la cebolla y los pimientos y rehogamos todo junto hasta que la cebolla esté transparente.
Paso 3
A continuación, echamos la harina y el pimentón, damos unas vueltas y añadimos la salsa de tomate y el caldo, mezclamos todo bien, y dejamos cocinar a fuego lento durante 10 minutos hasta que empiece a espesar.
Paso 4
Cuando la salsa haya espesado un poco, introducimos la tortilla o los trozos que tengamos y los cocinamos durante unos cinco minutos a fuego moderado hasta que la tortilla esté caliente.
Paso 5
Servimos la tortilla inmediatamente salseándola por encima y la acompañamos con un buen trozo de pan.