Si hablamos de crema de cacahuete en general, o de Capitán Maní en particular, es inevitable que nos vengan a la cabeza referencias de la cultura americana, dado que es uno de los tentempiés más famosos y consumidos en Norteamérica. La mantequilla o crema de cacahuete nunca falta en el cine a la hora de preparar un sándwich ya sea dulce o salado.
Aunque menos arraigado en nuestro imaginario colectivo, la crema y el aceite de cacahuete también son vastamente utilizados en la gastronomía asiática, pues muchas de las grandes salsas de las distintas cocinas asiáticas la incluyen entre sus ingredientes.
Y es que a la crema de cacahuete no le faltan razones, ya sea por su sabor o por sus múltiples propiedades, para ser la clave del éxito de un gran número de platos. Aquí, en España, las dos variedades disponibles de Capitán Maní (suave o crujiente) llevan más de 20 años cosechando éxitos. Su versatilidad en usos culinarios y aporte energético la ha posicionado en la lista de las más vendidas del país.
Capitán Maní, la auténtica crema de cacahuete americana
Capitán Maní se elabora al más puro estilo americano a través de la recolección del cacahuete en las plantaciones del estado de Georgia y pasa por un minucioso proceso de tostado, molido y envasado, siguiendo los patrones y recetas tradicionales vigentes durante décadas en el sur y sureste de Estados Unidos.
En el desayuno, a la hora del almuerzo, como aperitivo, en la merienda o a modo de snack antes y después de practicar deporte… En todo momento, la crema de cacahuete es ideal como un sencillo tentempié y también como ingrediente de multitud de recetas mediterráneas, asiáticas y, por supuesto, en repostería, dado que aporta un sabor singular y cremosidad.
Saúl Craviotto, embajador de la marca en España
Gracias a su alta concentración de cacahuete (90%), es una fuente natural de energía y grasas saludables, que nos ayudan a reducir el colesterol y a prevenir enfermedades cardiovasculares, además de proteínas; minerales (calcio, yodo, zinc, hierro, potasio, magnesio, fósforo) y vitaminas liposolubles (A, B1, B2, B5, B9, B12, C, D, K), esenciales para el correcto desarrollo del sistema nervioso.
Su gran valor energético la convierte en el alimento ideal para los pequeños de la casa y adolescentes en fase de desarrollo, así como para aquellos que quieren aumentar masa muscular, deportistas que necesiten realizar una dieta hipercalórica o recuperarse de una buena sesión de entreno. Lo confirma el piragüista español, bicampeón olímpico, tricampeón mundial y campeón europeo, Saúl Craviotto, quien se ha convertido en embajador de Capitán Maní. “Sin duda, es mi gran aliado antes y después del entreno. Sin olvidar que es el ingrediente perfecto para mis recetas”, asegura.
Así, Craviotto incluye en su rutina alimentaria ambas variedades, suave y crujiente, y también como el toque especial en sus recetas aprendidas y perfeccionadas en el concurso MasterChef Celebrity, del que se alzó ganador en la última edición.
Eso sí, a pesar de que estamos hablando de grasas buenas, se trata de un alimento que las posee en gran cantidad, por lo que el abuso del mismo puede conllevar un aumento de peso si no se realiza ninguna actividad física.