La Agencia Española del Medicamento (Aemps) ha anunciado la retirada de varios lotes de un popular medicamento para la osteoporosis. Se trata de varias presentaciones del ácido alendrónico-colecalciferol fabricado por el laboratorio Stada.

Tal y como ha detallado el organismo, la alerta ha saltado debido a un "resultado fuera de especificaciones en el ensayo de valoración de colecalciferol", sin entrar en más detalles. Como medida cautelar, se ha determinado la retirada del mercado de todas las unidades de los lotes afectados.

Las Aemps pide a quienes posean alguno de los lotes afectados que los devuelvan a través de los cauces habituales e insta a las Comunidades Autónomas que hagan un seguimiento de la retirada.

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Se han identificado dos lotes afectados de 70 miligramos de ácido alendrónico y 2.800 UI de colecaldiferol, ambos de cuatro comprimidos: el número 10483, con fecha de caducidad 31/01/2023; y el número 10996, con fecha de caducidad 31/03/2023.

Asimismo, se avisa de otro lote afectado de 70 miligramos de ácido alendrónico y 5.600 UI de colecalciferol, también de cuatro comprimidos, con número 10895 y fecha de caducidad 28/02/2023.

Vitamina D y calcio

Los comprimidos de este medicamento contienen dos principios activos. Por un lado, el colecalciferol, comúnmente conocido como vitamina D3 y el componente que ha provocado la retirada del medicamento. 

Este fármaco lo que propicia es la absorción digestiva del calcio contenido en la dieta y participa en la formación y restauración ósea. Hay que recordar que la vitamina D es fundamental para los huesos, en tanto en cuanto, es necesaria para la absorción de calcio. De hecho, la falta de este nutriente puede ser uno de los detonantes de la osteoporosis.

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Mientras, el alendronato previene la pérdida de densidad ósea, además de favorecer el endurecimiento del hueso.

Un problema creciente

Según el informe de la Fundación Internacional de Osteoporosis, 2.945.000 personas padecen esta enfermedad en España. Su característica principal es que provoca una disminución de la densidad de los huesos, a causa de la pérdida del tejido óseo normal. Esto tiene como resultado una reducción de la resistencia del hueso frente a los traumatismos o la carga de peso, con la consiguiente aparición de fracturas.

El problema no es baladí, ya que las fracturas de cadera y columna en adultos mayores son una causa importante de morbilidad y mortalidad. De hecho, el CEO de la Fundación Internacional de la Osteoporosis, avisaba en una entrevista con EL ESPAÑOL que las fracturas crecerán en España entre un 30% hasta 2034.

Las mujeres son las que deben prestar más atención a este problema, pues se estima que afecta al 22,6% de ellas, frente al 6,8% de hombres, en población de más de 50 años. Un problema añadido es que se piensa que es una enfermedad infradiagnosticada. Se estima que, en la actualidad, más de un millón de mujeres no saben que padecen la enfermedad, por lo que no pueden acceder a un tratamiento que evite daños mayores.