Todos los expertos concuerdan en que es fundamental llevar una alimentación completa y equilibrada para permanecer sanos. Y es que a veces, la mejor defensa para nuestro organismo es comer bien y estar descansados. Ambos son pilares fundamentales de nuestro bienestar.
Para llevar a cabo una buena alimentación es básico empezar a hacer las cosas bien desde el primer momento del día. Por ello, es clave saber qué tenemos que desayunar y qué no. Un desayuno adecuado nos proporciona la energía que necesitamos para afrontar bien nuestro día.
Aunque no sea la comida más importante del día, un dicho coloquial, pero que no es del todo cierto, sí que tenemos que tener cuidado a la hora de estructurar qué alimentos tomamos. Y es que muchas personas en España consumen un producto que no deberían incluir en según que forma en su dieta.
Hay muchas personas que comienzan el día tomando algo de fruta o algún producto de bollería. O incluso unas galletas o unos churros. Sin embargo, uno de los desayunos más frecuentes en España es tomar un café con unas tostadas. Algo que se repite de manera habitual, pero que muchas veces se hace de forma poco adecuada.
Lo que muchas personas no saben es que con este desayuno no le están dando al cuerpo los nutrientes que necesita para empezar el día con energías. De esta manera, se exponen a una serie de riesgos en su salud que pueden derivar en déficit de ciertos componentes necesarios e incluso en enfermedades. Y es que tomar unas simples tostadas puede no ser una buena idea.
¿Por qué no tomar tostadas en el desayuno?
A la hora de alimentarnos y cuidarnos, lo mejor es hacer caso a los expertos. Son ellos quienes nos pueden dar consejos básicos y fundamentales para no cometer fallos que a la larga se convierten en problemas graves. Sobre uno de ellos habla la especialista Estíbaliz García, la cual publica a través de sus redes sociales diferentes consejos.
Uno de los últimos y que más virales se ha hecho va en contra de un desayuno muy típico y muy español: las tostadas con aceite y tomate o mantequilla y mermelada. Esta nutricionista se muestra contraria a empezar el día simplemente con esta ingesta, ya que no nos proporcionará el aporte energético que realmente necesitamos y tampoco nos saciará.
Así que si tu desayuno se basa en unas simples tostadas, Estíbaliz García recomienda "mejor no desayunar nada". Ya que comiendo sólo estos estaremos "cansados y hambrientos" en muy poco tiempo, habiendo ingerido una serie de alimentos que no nos aportan casi ningún beneficio.
Aunque suene tajante, lo que conseguimos si tomamos estas tostadas es todo lo contrario a lo que queremos: nos quitará nuestra energía. El problema de tomar las tostadas de esta manera es que no se incorpora suficiente proteína y grasa. Por ello, si somos aficionados incondicionales de las tostadas, estamos obligados a incluir algo más en ellas para suplir estas carencias.
Una buena opción es "desayunar unas tostadas con aguacate y un par de huevos, o añadir jamón ibérico a tu tostada con aceite". Con una comida de este tipo, le daremos a nuestro cuerpo hidratos de carbono, proteínas y grasas saludables. Esta nutricionista se sorprende de que muchas personas no sepan el tremendo error que cometen con este desayuno tan español.
Una situación muy parecida a la que viven las personas que toman un zumo al comenzar el día para después pasar una mañana sedentaria. Con estos preparados, aunque pensemos que son muy sanos, lo que conseguimos es darle al cuerpo un aporte de fructosa sin aportar fibra. De esta forma, nos sentiremos cansados y hambrientos en muy poco tiempo.
Sin embargo, hacer un desayuno saludable no es tan complicado. Simplemente basta con incluir una serie de elementos fundamentales para ir aportando al cuerpo lo que necesita. Como si se tratara de ir tachando casillas de beneficios y necesidades de nuestro organismo.
Un desayuno saludable
- Hidratos de carbono de absorción lenta (pan, avena...).
- Fibra, vitaminas y minerales (fruta).
- Proteínas de calidad (leche, yogur, jamón, huevos...).
- Grasas saludables (aceita de oliva, frutos secos, aguacate...).