El frío se resiste, pero al fin va calando en buena parte de España ahora que hemos estrenado el horario de invierno. Un tiempo en el que las ensaladas dejan de apetecernos tanto y la mejor opción pasa por un plato de cuchara que nos caliente el cuerpo pero que siga siendo ligero. Las cremas de verduras son una opción inmejorable: están llenas de nutrientes, pueden servir de plato único o de entrante, hay una gran variedad de elaboraciones en el supermercado y no suponen un gran desembolso a pesar de los actuales precios.
Que las cremas elaboradas sean también saludables, como ha constatado la OCU, es una ventaja a la hora de ahorrarnos tiempo sin cargos de conciencia. Mercadona lo sabe, de ahí que sus opciones sean variadas; pero, sin duda, una de las más apreciadas es la nueva Crema de Espárragos de Hacendado. Se trata de uno de los clásicos purés de verduras que tan bien nos sientan, elaborado a base de espárragos verdes ―porque hay vida más allá de la calabaza― y que puede consumirse en frío o en caliente, tras el paso por el microondas o en una cazuela a fuego lento.
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La crema de espárragos de Mercadona se presenta en una tarrina de plástico, con 350 gramos de producto en su interior, que se comercializa en las tiendas de la cadena de supermercados a 1,70 euros. Entre sus ingredientes figura el agua, la patata, un 23% de espárragos, jugo de soja (agua, semilla de soja y sal), aceite de oliva, puerro, sal y aromas. Además, especifican que puede contener trazas de cereales con gluten, frutos con cáscara, leche, apio y huevo, pero no tiene ni conservantes ni colorantes. Es necesario conservarla en frío y consumir en 24 horas una vez abierta.
En la información nutricional de esta crema Hacendado se enumera su valor por 100 gramos, algo menos de un tercio de producto. En su valor figuran 47 calorías; 1,9 gramos de grasas totales con 0,3 gramos de grasas saturadas; 6,2 gramos de hidratos de carbono siendo azúcares 0,5 gramos; 0,8 gramos de fibra alimentaria; y 0,9 gramos de proteína. Además, contiene 0,69 gramos de sal, lo que supone un total de 2,4 gramos de sal por tarrina. Se trata de una única pega que podemos ponerle si tenemos en cuenta que la Organización Mundial de la Salud (OMS) cifra en 5 gramos el máximo recomendado de sal al día.
Propiedades y beneficios de los espárragos
Si nos fijamos en el ingrediente principal de la crema, los espárragos, consultamos a la Fundación Española de Nutrición (FEN) para destacar algunas de las cualidades de estos tallos jóvenes de la esparraguera, un cultivo que se cree que procede de las riberas del Tigris y el Éufrates en el actual Irak. Se pueden comer blancos o verdes, según la forma de cultivarse, puesto que al cubrirse de tierra no les da la luz y no cogerán color, mientras que si se dejan crecer al natural, dándoles el sol, tendrán sus características tonalidad verdosa.
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Aunque su temporada estaba fijada de abril a mayo, su cultivo en invernadero ha conseguido producirlos durante todo el año. Los espárragos tienen pocas calorías, un bajo contenido energético, pero mucha agua. Contiene inulina y es fuente de las vitaminas C y E. Los verdes son más ricos en minerales que los blancos, además de presentar betacarotenos (provitamina A) y luteína (carotenoide), ambos compuestos antioxidantes. También nos aportan lignanos, una clase de fitoestrógenos, y flavonoides.
En base a este variado perfil nutricional, los espárragos aportan beneficios diversos como la eliminación de líquidos por su cualidad diurética, además de servir para regular el tránsito intestinal por su fibra y su alto contenido en agua. Es antioxidante, así que combate los efectos provocados por los radicales libres en las células, y cuida el sistema óseo. Asimismo, es un alimento que favorece al sistema inmunitario y es práctico para prevenir los resfriados tan propios en estas épocas, así como otras enfermedades virales o bacterianas.
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Por último, no está de más explicar por qué cada vez que comemos espárragos o elaboraciones secundarias, como es el caso de esta crema de Hacendado, cambia por completo el olor de nuestra orina volviéndose más fuerte. Los culpables no son otros que dos compuestos: el aminoácido asparagina y el azufre que integra algunas moléculas de esta verdura. A medida que vamos haciendo la digestión y se descomponen, estos compuestos volátiles se liberan a través de la micción bastante rápido.
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