Los polifenoles son una categoría de sustancias químicas que se encuentran de forma natural en las plantas. Existe una gran variedad -más de 500 tipos diferentes-y se sabe que pueden proteger a los constituyentes celulares contra el daño oxidativo que producen los radicales libres como consecuencia de la oxigenación de las células.
Estos antioxidantes, por tanto, limitan el riesgo de sufrir diversas enfermedades degenerativas asociadas con la oxidación y retrasan el envejecimiento biológico. Además, como antiinflamatorios naturales, los polifenoles ayudan a reducir la inflamación crónica, un factor de riesgo de enfermedad cardíaca.
Como repasábamos en este artículos, los diferentes tipos de polifenoles se agrupan en cuatro grupos principales, cada uno de los cuales puede encontrarse en diferentes alimentos:
· Los flavonoides son los más numerosos y suponen alrededor del 60% de todos los polifenoles. Pueden encontrarse en alimentos como manzanas, cebollas, chocolate negro y col lombarda.
· Los ácidos fenólicos representan alrededor del 30% de todos los polifenoles. Se encuentran principalmente en frutas, verduras, cereales integrales y semillas.
· Las amidas polifenólicas, que se pueden encontrar en alimentos como los pimientos picantes y la avena.
Otros polifenoles menos frecuentes se encuentran en el vino tinto, en bayas, en cúrcuma, en semillas de lino y de sésamo y en los cereales integrales.
Las ventajas de los polifenoles
Una dieta rica en polifenoles mejora el perfil glucémico de las personas mayores con riesgo cardiovascular, según ha revelado un estudio de la Unidad de Nutrición Humana del Institut d'Investigació Sanitària Pere Virgili de la Universitat Rovira i Virgili (URV-IISPV) de Tarragona.
En un comunicado este martes, la URV ha explicado que el estudio, publicado en la revista científica Antioxidants, ha analizado datos de cerca de 6.000 personas de edad avanzada con sobrepeso y obesidad, y con un elevado riesgo de enfermedades cardiovasculares.
Al inicio y después de un año de seguimiento, se calculó, a partir de cuestionarios sobre su dieta, su ingesta de polifenoles, unos compuestos naturales que se encuentran en dietas basadas en el consumo de cereales integrales, frutas, verduras, legumbres y frutos secos, así como grasas saludables como el aceite de oliva.
Los resultados pusieron de manifiesto que las personas que consumían más alimentos ricos en polifenoles, especialmente algunas clases concretas de estos compuestos como las flavonas, los flavonoles y los lignanos, tenían unos niveles de glucosa más bajos.
Asimismo, al analizar de forma separada el consumo de polifenoles entre personas sanas y personas con diabetes o prediabetes, se observó que el grupo que salió más beneficiado del consumo de estos compuestos fue el de los prediabéticos, que presentaron unos niveles de glucosa más reducidos.
Los resultados contribuyen así a la evidencia de que los compuestos polifenólicos tienen un "papel importante" en la prevención y mejora de enfermedades crónicas como la diabetes.