El cebollino, científicamente conocido como Allium schoenoprasum L., es una planta que gusta a los amantes de la cocina y la jardinería por igual. También se le conoce como ciboulette o cebollín, y pertenece a la familia de las amarilidáceas, caracterizadas por ser plantas herbáceas perennes con bulbos, rizomas o raíces fibrosas.
Con sus hojas huecas y finas, esta hierba posee un vibrante color verdoso y puede alcanzar una altura de aproximadamente 25 centímetros. Pero lo que más destaca son sus llamativas flores violetas. Agrupadas en inflorescencias densas con forma de cabezuelas redondas de hasta cinco centímetros de ancho, añaden un toque de elegancia a cualquier jardín. Una de sus características más notables es su resistencia al frío, prosperando en entornos como Canadá y Siberia.
Es la única especie del género Allium que se considera originaria tanto del viejo como del nuevo continente. Desde tiempos antiguos en China, ha sido cultivado no solo por su uso culinario, sino también con propósitos medicinales, como remedio para hemorragias o antídoto de venenos. Con el tiempo, su popularidad ha trascendido fronteras, extendiéndose a países de América y Europa. Su cultivo en los huertos de España es cada vez más popular.
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Versátil y suave
A pesar de la conexión con el ajo y la cebolla, su sabor es más delicado. En la cocina, las hojas, que parecen tallos huecos, son las protagonistas. Consumido mayormente en su forma cruda, el cebollino es un excelente condimento para ensaladas, sopas, tortillas, pescados y más. Destaca su uso en salsas, vinagretas y platos que incorporan patatas o huevo. Una deliciosa muestra de su versatilidad es el carpaccio de salmón con chips de verduras, donde el cebollino añade su distintivo toque de frescura.
Según los datos que constan en la Base de Datos Española de Composición de Alimentos, por cada 100 g de cebollino crudo obtendremos 25 kilocalorías, 3 g de proteína, 2,3 g de fibra dietética, 1,9 g de carbohidratos y una muy importante cantidad de agua. A ello se le unen un buen número de vitaminas A, B y C, y minerales como calcio, potasio, magnesio y fósforo.
Esta composición, permite que le otorguemos a este alimento algunas propiedades y beneficios, que te señalamos a continuación.
Propiedades antimicrobianas
El cebollino exhibe propiedades antimicrobianas notables, siendo antiviral, antibacteriano y antifúngico. Estas características lo convierten en un defensor contra infecciones virales estacionales y microorganismos dañinos. Un estudio incluso destaca su actividad antibacteriana contra patógenos transmitidos por alimentos. Las infusiones de cebollino se utilizan eficazmente como remedio contra infecciones por levaduras y virus.
Potencial anticancerígeno
Rico en luteína, zeaxantina y alicina, el cebollino muestra prometedores beneficios anticancerígenos. Estos antioxidantes flavonoides combaten eficazmente el cáncer de boca y pulmón, mientras que la alicina reduce la probabilidad de cáncer de mama. Además, la fibra densa en el cebollino contribuye a combatir el cáncer de colon, y estudios sugieren su capacidad para prevenir el cáncer de próstata al estimular la síntesis de glutatión en el cuerpo.
Tratamiento para cálculos renales
Algunas investigaciones indican que el cebollino, tanto fresco como en infusión, puede disolver cristales de oxalato de calcio, conocidos como cálculos renales. Además, el compuesto orgánico llamado acetato de etilo presente en el cebollino posee propiedades antiinflamatorias y trata los cálculos renales de calcio.
Mejora la salud cardíaca
La alicina, componente principal del cebollino, reduce los niveles de colesterol malo y la presión arterial al estimular la liberación de óxido nítrico en el torrente sanguíneo. Además, el quercetín presente en el cebollino previene la formación de placas arteriales y reduce el riesgo de accidentes cerebrovasculares.
Aliado de los diabéticos
Los flavonoides en el cebollino ayudan a combatir los efectos secundarios asociados con el azúcar en sangre elevada, proporcionando propiedades antidiabéticas. Con un índice glucémico bajo y bajos niveles de carbohidratos, el cebollino parece ser beneficioso para los pacientes diabéticos sin elevar los niveles de azúcar en sangre.
Beneficioso durante el embarazo
Consumir cebollino durante el embarazo aporta beneficios potenciales, ya que es seguro y rico en folato, esencial para prevenir defectos congénitos del cerebro y la médula espinal. Además, su contenido de vitamina C contribuye al desarrollo de la inmunidad durante el embarazo.
Mejora la calidad del sueño
El cebollino, con su contenido de colina, favorece un sueño reparador. También contiene ácido fólico, que estimula la producción de serotonina y dopamina, hormonas asociadas con mejorar el estado de ánimo.