Adiós al calor. Después del día del Pilar, se espera que el anticiclón de bloqueo se retire hacia latitudes más altas, lo que supone un importante cambio de tiempo para España. Según explica Francisco Martin, experto de Meteored, pronto las borrascas atlánticas se adentrarán por el norte de España y por latitudes más bajas.
Así, las últimas interaccionarán con otras bajas de tipo tropical y subtropical, lo que permitirían generar "ríos atmosféricos de humedad". Con este cambio de patrón atmosférico, se espera un giro radical del tiempo a uno más otoñal y con precipitaciones asociadas a estas borrascas atlánticas que entrarían por el oeste.
Son regiones relativamente estrechas en la atmósfera responsables de la mayor parte del transporte horizontal de vapor de agua fuera de los trópicos. Se trata de lenguas o "cintas transportadoras" de humedad muy concentradas que suelen ir desde los trópicos a latitudes medias, dejando episodios de precipitaciones abundantes.
Estos ríos atmosféricos se pueden presentar de diversas formas, tamaños e impactos. Estos últimos suelen ser variados: pueden generar periodos de precipitaciones abundantes con inundaciones al contener mayores cantidades de vapor de agua, además de vientos más fuertes asociados a los episodios de inestabilidad.
A partir del 13 de octubre, el anticiclón de bloqueo se desplazará hacia el norte. Así las temperaturas se irán normalizando y las precipitaciones atlánticas llegarán a afectarnos, con posibilidad de que sean cuantiosas en algunas regiones.
Una vez pasado el puente, se espera que se afiance el cambio de patrón atmosférico: el bloqueo anticiclónico se situaría sobre Escandinavia y un pasillo de borrascas afectará a España con precipitaciones.
Las señales de anomalías positivas sobre gran parte de la Península se deben a las precipitaciones frontales y tormentosas asociadas a las borrascas atlánticas que entrarán en forma de "tren de borrascas".