La borrasca Claudio ha sido nombrada por el servicio meteorológico de Francia, en donde impactará con vientos de más de 100 kilómetros por hora en su vertiente atlántica. Sin embargo, también dejará a su paso frío, viento y lluvias fuertes en el tercio noroeste peninsular de España, según ha informado la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET).
"El paso de Claudio será rápido", explica el portavoz de la AEMET, Rubén del Campo, con lluvias fuertes en el sur de Galicia, Sanabria (Zamora), el norte de Extremadura y también en Pirineos. La borrasca provocará rachas muy fuertes de viento -más de 80 o 90 kilómetros por hora- en la cordillera cantábrica, y mal estado de la mar, con olas de más de 4 metros de altura en el cantábrico y en el litoral de Galicia.
No obstante, este martes, día de Todos los Santos, se retomará el tiempo estable "con matices" hasta el jueves, cuando llegará un nuevo sistema frontal que dejará lluvias en amplias zonas del país. Más allá, el portavoz espera un fin de semana "tranquilo" y con temperaturas que volverán a subir tras el bajón, prolongado un ambiente "extraordinariamente cálido" para la época como ha ocurrido este octubre.
El 1 de noviembre habrá cielos "enmarañados", pero no se prevén lluvias, salvo quizá alguna gota en el Pirineo, en el litoral catalán, norte de la Comunidad Valenciana. También, en palabras de Del Campo, "cuatro gotas" en puntos dispersos de la Comunidad de Madrid, en Castilla-La Mancha por la mañana. Los cielos se irán despejando a medida que avance el día. Habrá niebla en zonas del interior, sobre todo cerca de los valles de los ríos, y el viento soplará aún con fuerza en la costa gallega.
Las temperaturas descenderán de forma generalizada y ya se esperan algunas heladas en zonas de montaña, pero de nuevo se superarán los 25 grados de máxima en regiones mediterráneas y en buena parte de Andalucía. En la meseta norte y zona centro, las máximas estarán entre 15 y 20ºC; en el Cantábrico entre 18 y 20ºC; y por encima de 20ºC se situarán en amplias zonas de la mitad sur.
El miércoles, según el portavoz, se espera algo de inestabilidad en el área Mediterránea con posibles tormentas en puntos de la Comunidad Valenciana y en Baleares. Volverá a llover en Galicia, mientras en el resto del país se repetirán las brumas y los bancos de niebla y nubes bajas por la mañana, pero sin lluvias. Las temperaturas subirán en general aunque bajarán en el Mediterráneo y se registrarán heladas nocturnas en zonas altas de montaña.
En cuanto al jueves, Del Campo advierte que será un día "un poquito más complicado" porque el paso de un sistema frontal provocará un aumento de la nubosidad. Las lluvias irán de oeste a este de la Península y cubrirán gran parte del territorio peninsular e incluso Baleares. Las más fuertes y persistentes se esperan en Galicia, sobre todo en el oeste de la comunidad y llegará la nieve por encima de unos 1.600 a 1.800 metros en la cordillera Cantábrica y en los Pirineos.
Las temperaturas bajarán ese día en una jornada de lluvia y viento fuerte de componente norte. También en Baleares el ambiente será más fresco. Del Campo destaca que el resultado es que el jueves será un día "plenamente otoñal", aunque será una situación "pasajera" porque en cuanto pase el frente los cielos se volverán a despejar.
Respecto a Canarias, la mayor parte de la semana predominarán los cielos poco nubosos aunque con presencia de calima, que empeorará la calidad del aire. Las temperaturas no experimentarán grandes cambios se mantendrán de manuales agradables que en costas oscilarán entre los 20 o 22ºC de mínima y los 26 a 28ºC de máxima.