La sonda InSight, activa en Marte desde 2018 y dotada con un potente sismómetro, ha permitido a la NASA detectar nuevos cráteres de impacto sobre la superficie del Planeta Rojo tras registrar las vibraciones de cuatro eventos de caídas de meteoritos a lo largo de los dos últimos años.
Cuatro rocas espaciales impactaron contra Marte en 2020 y 2021, según reveló el análisis de las ondas sísmicas y acústicas y a una distancia que osciló entre los 85 y 290 kilómetros de la posición de la sonda, en una región marciana llamada Elysium Planitia. Según detalla el artículo publicado en Nature Geoscience, es la primera vez que se usa esta tecnología para identificar impactos meteóricos en otro planeta.
El primer meteorito entró en la atmósfera de Marte el 5 de septiembre de 2021 y explotó, dividiéndose en tres fragmentos que dejaron cada uno un cráter. El Orbitador de Reconocimiento de Marte de la NASA sobrevoló el lugar de impacto estimado para confirmar la ubicación. Con su cámara de contraste en blanco y negro, se pudo tener constancia de tres puntos oscuros en la superficie.
Tras localizarlos, se recurrió a la cámara en alta resolución del Experimento HiRISE, para obtener un primer plano en color de los cráteres. Este mismo procedimiento se siguió para confirmar los otros tres impactos: en el 27 de mayo de 2020; en el 18 de febrero de 2021; y en el 31 de agosto de 2021.
El Planeta Rojo está cerca del cinturón principal de asteroides del Sistema Solar, que le somete a un continuo bombardeo de rocas. A esto se suma una atmósfera relativamente tenue que les permite atravesarla sin desintegrarse. El sismómetro de InSight ha detectado más de 1.300 sismos, y cree que muchos de ellos podrían ser otros impactos oscurecidos por el ruido del viento o por los cambios estacionales en la atmósfera.
La mayor parte de los terremotos en Marte son causados por rocas subterráneas que se agrietan por el calor y la presión. Una caída de un meteorito provoca una señal del orden de una magnitud 2. Pero las señales sísmicas de terremotos más grandes, como el evento de magnitud 5 que ocurrió en mayo de 2022, también pueden revelar detalles sobre el manto y el núcleo del planeta.
[Este es el sonido del viento en Marte, el InSight lo ha captado]
Los científicos también pueden precisar la edad de la superficie de un planeta enumerando sus cráteres de impacto. A más cráteres, mayor antigüedad. Los datos de InSight combinados con las imágenes orbitales permitirán reconstruir la trayectoria de un meteoroide y el tamaño de su onda de choque. Y la frecuencia de impactos actual permitirá estimar a los científicos la cantidad de impactos producidos en los albores del Sistema Solar.
Según los ingenieros de la NASA, InSight terminará sucumbiendo a la acumulación de polvo sobre sus paneles solares y se apagará en algún momento entre octubre de este año y enero del año que viene. Mientras tanto, su detallado instrumental podrá proporcionar información no solo sobre la cantidad de meteoritos que caen en Marte, sino sobre la potencia de su impacto y la inclinación del suelo producida por la fuerza de la explosión resultante.