El sudor de las axilas y el olor que desprenden es algo que preocupa a muchos hombres. Tanto que la mayoría trata de ocultar su olor corporal bajo capas de perfumes o desodorantes cuyos anuncios publicitarios prometen éxito inmediato a la hora de buscar pareja. Sin embargo, puede que la solución para muchos de estos hombres no esté en el armario del baño, sino en su nevera. Un reciente estudio, publicado en la revista Evolution and Human Behavior, ha determinado que una dieta rica en frutas y verduras está asociada con un olor de axilas más atractivo para las mujeres.
Para llegar a esta conclusión, los investigadores realizaron varias medidas sobre la cantidad de frutas y verduras en la dieta de una serie de voluntarios, que también ofrecieron muestras del sudor de sus axilas. Después, un grupo de mujeres realizó una evaluación de las muestras. La conclusión es que "un color de piel más amarillo, indicativo de una mayor consumo de frutas y hortalizas, esta asociado con una valoración más positiva del olor corporal masculino por parte de las mujeres", según ha explicado a EL ESPAÑOL la principal autora del estudio, la investigadora de la Universidad Macquarie (Australia), Andrea Zúñiga.
El color de la piel
El consumo de frutas y verduras ha demostrado tener varios efectos beneficiosos, pero uno relativamente importante es la presencia de carotenoides, unos pigmentos orgánicos que se encuentran fundamentalmente en este tipo de alimentos. Los seres humanos, junto con la mayoría de animales, son incapaces de sintetizar carotenoides, con lo que tienen que ingerirlos a través de la dieta.
Una de las particularidades de estos compuestos es que dan un color amarillento o anaranjado a nuestra piel, con lo que, según explica Zúñiga, "las medidas de la amarillez de la piel pueden funcionar como un marcador indicativo del consumo de frutas y verduras". Así que los investigadores utilizaron un espectrofotómetro con el que midieron el grado de amarillez de las palmas de las manos de los participantes en el estudio.
Además de esta medida indirecta, también se obtuvo información de la dieta de cada uno de los 43 voluntarios mediante un cuestionario y, por último, se obtuvieron muestras de sudor de sus axilas.
Por otro lado, el jurado encargado de evaluar las muestras estaba formado por nueve mujeres no fumadoras de entre 18 y 30 años, que debían catalogar cada una de las muestras y calificarlas a través de dos cuestionarios dados por los investigadores.
Los resultados indicaron que los hombres que tenían una dieta rica en verduras y frutas, así como una cantidad razonable de grasas, carnes y huevos, desprendían mejor olor corporal que aquellos que consumían una gran cantidad de hidratos de carbono. La evaluación mostró que las dietas bajas en carbohidratos simples producen un sudor "floral, afrutado, dulce y medicinal", mientras que una mayor ingesta de hidratos de carbono de los "malos" daba como resultado un olor corporal menos agradable.
La importancia del olor corporal
El experimento realizado por Zúñiga y sus colegas de laboratorio puede parecer una excentricidad científica, pero lo cierto es que diversas investigaciones han demostrado que el olor corporal puede proporcionar información útil a la hora de elegir pareja, ya que, por un lado, puede ofrecer información sobre posible consanguinidad y, por otro, puede ofrecer pistas sobre su estado de salud.
El motivo de elección de las axilas es obvio, son una de las zonas del cuerpo humano que poseen mas cantidad de glándulas sudoríparas y que generan más sudor. Estudios anteriores han mostrado que el olor depende en cierta medida de unos organismos llamados antígenos leucocitarios humanos (HLA, por su siglas en inglés), que tienen la función de diferenciar lo propio de lo ajeno. Por lo general, la gente prefiere los olores de sudor que provienen de un tipo de HLA diferente a uno mismo, lo que podría interpretarse como un mecanismo olfativo para evitar la endogamia.
Por otro lado, sabemos que varias especies de animales se valen de su olfato para evitar posibles compañeros que estén enfermos. En seres humanos, sabemos que el olor del sudor puede alterarse cuando tenemos ciertas patologías y algunos experimentos han mostrado que los humanos tenemos la capacidad de detectar las señales olfativas debidas a una infección por patógenos.
Por último, estudios anteriores han mostrado que la dieta es otro factor que influye tanto en la salud como en el olor corporal de las personas. En un estudio realizado en 2006 los investigadores ya analizaron cómo el consumo de carne podía alterar el olor corporal. En aquel experimento, los participantes se sometieron a una dieta rica en carne durante dos semanas, para posteriormente realzar una nueva dieta más rica en huevos, queso, soja, frutas y verduras. El resultado, las mujeres juzgaron como mucho más agradable el olor corporal de los hombres cuando seguían una dieta con menos ingesta de carne.
Las mujeres tiene mejor olfato
Por último, cabe preguntarse por qué los investigadores decidieron realizar el experimento con el sudor de los hombres y siendo evaluado por mujeres. Los autores del estudio destacan cuatro factores fundamentales para defender esta decisión. En primer lugar, los investigadores entienden que al ser mayor la implicación de las mujeres en la reproducción, éstas son especialmente sensibles a las señales relacionadas con la salud en parejas potenciales.
En segundo lugar, estudios anteriores han mostrado como las mujeres suelen destacar el olor como un aspecto más importante a la hora de valorar el atractivo de un hombre. Por último, los investigadores señalan dos condiciones fisiológicas: por un lado los hombres tienen las glándulas sudoríparas de las axilas más grandes que las mujeres y su sudor es más intenso y, por otro, señalan el hecho de que las mujeres tienen, en general, mejor olfato que los hombres.