La enfermedad que padece Castilla y León desde hace muchos años sigue presente. La despoblación desangra a la Comunidad que ha visto cómo en los seis primeros meses de este año 2021 ha perdido 7.119 habitantes, o lo que es lo mismo, ahora hay censados en 2.379.530 a 1 de julio, según los datos facilitados por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Ni la llegada de extranjeros, principal flotador al que se agarra la Comunidad, ha servido en esta ocasión para maquillar unas cifras que reflejan el elevado número de personas fallecidas por la pandemia Covid y las pocas ganas de tener hijos que existe entre las parejas castellanas y leonesas. La tormenta perfecta para una región que acusa cada año la marcha de jóvenes y el fallecimiento de mayores.
Los datos del INE son la prueba del algodón y delatan que los 2.379.530 actuales son la cifra más baja en los últimos 25 años. Una caída que se va notando cada año. Por ejemplo, en julio de 2019, antes de la pandemia, había 2.402.729. En 2016 se contabilizaron 2.444.061, mientras que la caída en una década es del 6,4%, ya que en 2011 Castilla y León tenía 2.541.364 habitantes. La cifra más elevada, y desde ahí comenzó la caída libre, fue en 2009 con 2.563.521 censados. El último dato que tiene registrado el INE es de 1996, hace 25 años, y en ese momento se contabilizaron 2.508.496 habitantes.
Como curiosidad, en una década, Castilla y León ha perdido casi 162.000 habitantes, el equivalente, en estos momentos, a a toda la provincia de Palencia (157.701), Ávila (159.413) o Segovia (153.909). Y por supuesto, el doble que Soria. El único dato que aumenta es el de población extranjera.
Este nuevo descenso en lo que va de año supone un 0,3% menos. Ahora bien, un refrán castellano muy castizo dice que “mal de todos, consuelo de tontos”, y a esto es a lo que nos podemos agarrar, que no somos los que más caemos de toda España. Ha sido Aragón, con un -1,33%, la que más ha caído, con Asturias (-0,39%), y País Vasco (-0,38%) los que también han perdido más población que Castilla y León. En el otro extremo, los mayores incrementos de población se dieron en Región de Murcia (0,20%), Canarias (0,09%) y la Comunidad Valenciana (0,08%).
Por provincias
Solo Ávila se salva de este retroceso en la Comunidad. La provincia abulense ha sumado un 0,4%, con 559 habitantes más, que le llevan hasta una población de 159.413. Mientras que la mayor sangría se produce en Zamora y Palencia, ambas con un 0,5%. En Zamora el descenso ha sido de 796 personas, lo que deja la población total en 168.661, mientras que en Palencia llegó a las 848 personas, para fijar en 157.701.
Sin embargo, ha sido la provincia de León la que sigue acusando el paso de los años y la huida de personas. En esta ocasión lidera este ranking con una caída de 1.803 personas (-0,4%), y se queda en 453.295. Valladolid le sigue muy de cerca con un descenso de 1.731 (-0,3%). Ahora mismo en la provincia vallisoletana hay censados 517.360 habitantes, la que más.
Por su parte, el descenso en Salamanca fue de 1.363 personas con lo que se quedan en 326.464. Mientras que en Burgos se perdieron 610 (353.687). Para Segovia y Soria la caída fue de 147 y 379 personas, respectivamente, y se mantienen con una población de 153.909 y 89.041.
En Burgos el descenso fue de 610 personas (353.687); en Salamanca de 1.363 (326.464); en Segovia de 147 (153.909) y en Soria de 379 (89.041).
El saldo migratorio
Otra cosa diferente es el caso migratorio, es decir, la diferencia entre personas que se van de la Comunidad y que vienen. Es a lo que, por ejemplo, se agarran desde la Junta de Castilla y León para no comprobar la sangría. En este apartado, Castilla y León registra el cuarto mayor saldo migratorio positivo entre comunidades durante el primer semestre de 2021 con 2.217, por detrás de Comunidad Valenciana (6.023), Andalucía (4.071) y Castilla-La Mancha (3.625). "Se confirma una buena tendencia, que es un balance migratorio positivo, pues para nosotros es muy importante que venga más gente a la comunidad de la que se va", se felicitó el vicepresidente y portavoz de la Junta, Francisco Igea.
El INE cifra el salgo migratorio exterior en 755 personas menos, quinto mayor descenso del país, mientras que el salgo migratorio interior es positivo y suma 2.217, cuarta mejor evolución en este caso.
¿Cuánto somos en España?
Pues según el INE, ya somos 47.326.687 habitantes, es decir que la población residente en España disminuyó en 72.007 personas, en la que es la primera vez que se reduce desde 2016. Este decrecimiento fue debido a un saldo vegetativo negativo de 70.736 personas y un saldo migratorio prácticamente nulo.