La Universidad Pontificia de Salamanca (UPSA) ha inaugurado este martes el trigésimo curso del Programa Interuniversitario de la Experiencia de Castilla y León, que tendrá 700 alumnos y alrededor de 70 profesores. En el acto, que ha estado presidido por el rector de la UPSA, Santiago García-Jalón de la Lama, se han entregado los premios y los diplomas del 22º Certamen de Relatos Cortos.
El Aula Magna de la UPSA ha sido testigo esta tarde la inauguración del Programa Interuniversitario de la Experiencia de Castilla y León, que llega ya a su 30º curso con un considerable incremento de alumnos, llegando casi a los 700. Este año serán impartidas seis materias obligatorias y siete itinerarios, siendo uno más que el curso pasado por el mayor número de alumnos matriculados. El programa se completará con una oferta de variadas actividades complementarias.
El acto ha estado presidido por el rector de la UPSA, Santiago García-Jalón de la Lama, y ha contado con la presencia de la gerente territorial de Servicios Sociales de la Junta de Castilla y León, Isabel Fernández Cambón; la concejala de mayores del Ayuntamiento de Salamanca, Isabel Macías Tello; el gerente de la Fundación Vargas-Zúñiga y Pérez-Lucas, Juan Vargas-Zúñiga; la directora del Programa Interuniversitario de la Experiencia en la UPSA, Mª Teresa Ramos Bernal; el director del mismo programa en la Universidad de Salamanca, Francisco Javier Rubio Muñoz; y el decano de Teología, Francisco García Martínez, que ha sido el encargado de pronunciar la conferencia inaugural.
Intervención del rector
En su intervención, el rector ha agradecido su colaboración a la Junta de Castilla y León, a través de la Gerencia de Servicios Sociales de la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades, por el esfuerzo que realiza apostando por los mayores y su voluntad de financiar más horas; al Ayuntamiento de Salamanca, que mantiene su apoyo a través de la Concejalía de Mayores; a los profesores, más de 70, y el personal de administración y servicios, que con su trabajo y dedicación mejoran cada año el servicio que prestan; a la directora y "alma" del Programa en la UPSA, María Teresa Ramos; y, por supuesto, a los estudiantes, "que representan la sinergia entre la pasión por el aprendizaje y el bagaje de los años vividos. Su ilusión y ganas de aprender son un ejemplo no solo para quienes formamos parte de esta familia universitaria, sino para toda la sociedad".
"Nos encontramos en un espacio donde el tiempo no es un límite, la curiosidad es nuestra guía y el conocimiento y el aprendizaje son el destino. Les deseo un buen viaje académico, en el que compartan, aprendan, dialoguen y se enriquezcan mutuamente. Abracen este viaje juntos y háganlo memorable", ha concluido el rector.
Un recuerdo para Adoración Holgado
La concejala de Mayores, Isabel Macías Tello, ha tenido un recuerdo para la promotora de la Universidad de la Experiencia, la profesora Adoración Holgado, "que supo ver la necesidad de las personas de seguir aprendiendo a lo largo de su vida e inició una gran labor que ha llegado a límites insospechados". Macías Tello también ha destacado la importancia de los intercambios de experiencia que brinda este programa, "intercambios, en ocasiones intergeneracionales, que son muy beneficiosos tanto para los mayores como para los jóvenes".
Fomentar nuevas relaciones
Por su parte, la gerente territorial de Servicios Sociales, Isabel Fernández Cambón, ha subrayado el importante papel de las universidades salmantinas por su apuesta por un programa dirigido a un sector tan mayoritario. Fernández Cambón ha puesto el acento en dos grandes beneficios del Programa Interuniversitario de la Experiencia: "el fomento de nuevas relaciones entre los participantes y la lucha contra la soledad no deseada". Por ello, ha invitado a los asistentes a disfrutar "no solo de la posada, sino también del camino".
Conferencia inaugural
El profesor de Teología Francisco García Martínez, decano de la Facultad, ha sido el encargado de pronunciar la conferencia inaugural, titulada '¿Es necesario que el burro sea grande? Reflexiones sobre lo grande y lo pequeño. En su exposición, el profesor Francisco García ha explicado que "la idea de lo grande y, sobre todo, de grandeza es una ilusión que creamos para defendernos de la pequeñez constitutiva con la que la vida nos marca". "Todas las formas de grandeza (el reconocimiento a través de la riqueza, el poder, el conocimiento, el dominio de sí...) se resumen en el intento de hacer presente nuestra vida frente a los demás para así generar la ilusión de que tenemos consistencia, porque la grandeza que percibimos en los otros se nos manifiesta como un signo de su control y fuerza sobre la incertidumbre y debilidad de la vida", ha añadido.
A modo de conclusión, el decano de Teología ha destacado que "lo verdaderamente importante es aprender a vivir la pequeñez como un encuentro con el regalo de la vida en su concreción, como un lugar de empatía y conocimiento de la necesidad del otro, y aprender a darle la forma de servicio pues es en él donde se hace fecunda". Y ha terminado con la presentación de Dios como el Bajísimo (Christian Bobin), "como aquél que siendo el único grande, consistente en sí, elige la pequeñez para acercarse a nosotros y engrandecernos, dando así valor definitivo a la pequeñez como camino de vida".
Certamen de Relatos Cortos
Por otra parte, el acto ha acogido la entrega de diplomas y premios del 22º Certamen de Relatos Cortos, correspondiente al año 2023, cuyo primer premio, dotado con 1.500 €, ha correspondido a Bernardo Martín Sagrado, alumno diplomado de la sede de Salamanca de la UPSA, por el relato titulado El chavo.
El gerente de la Fundación Vargas-Zúñiga y Pérez-Lucas, Juan Vargas-Zúñiga, ha sido el encargado de entregar los premios, junto con los directores del Programa en la UPSA, María Teresa Ramos, y en la USAL, Francisco Javier Rubio. Juan Vargas-Zúñiga ha mostrado la felicidad y satisfacción que le reporta "reconocer cada año el ingenio de los participantes a través de la escritura".
Los galardonados en el 22º Certamen de Relatos Cortos han sido:
Primer Premio, dotado con 1.500 euros:
D. Bernardo Martín Sagrado, alumno diplomado de la sede de Salamanca de la UPSA, por El chavo.
Segundo Premio, dotado con 1.000 euros:
Dña. Miriam Raquel García Sánchez, alumna de 1º de la sede Ávila. Universidad de Salamanca, por El caso del escritor y su carta de suicidio.
Tercer Premio, dotado con 500 euros:
Dña. Mª del Carmen Garzón Cuadrado, alumna de tercer curso de la sede de Salamanca. Universidad Pontificia, por Haid el sirio
Primera Mención de Honor, dotada con 300 euros:
D. Miguel Ángel Mendoza Nava, alumno diplomado de la sede de León. Universidad de León, por El efímero teatro de la vida.
Segunda Mención de Honor, dotada con 250 euros:
D. Carlos García García, alumno de 2º curso de la sede de Zamora. Universidad de Salamanca, por Sueños.
Tercera Mención de Honor, dotada con 250 euros:
D. Dionisio Pérez Gallardo, alumno de 2º curso de la Sede de Valladolid. Universidad de Valladolid, por El vendedor de sueños.