El consejero de Sanidad, Alejandro Vázquez

El consejero de Sanidad, Alejandro Vázquez ICAL

Región

Sanidad remata su “ambicioso” plan de infraestructuras: casi 900 millones para acabar con la obsolescencia tecnológica y grandes hospitales

Una cuantía programada para inversiones hasta el año 2030

29 julio, 2023 14:01

El nuevo Plan de de Infraestructuras Sanitarias y Equipamiento será “ambicioso” y permitirá rematar grandes obras, iniciar algunas previstas y también acabar con la obsolescencia tecnológica de los centros y sumar al sistema sanitario tecnologías de última generación e inteligencia artificial. Así lo avanzó en ‘Los desayunos de Ical’ el consejero de Sanidad, Alejandro Vázquez, quien asegura que está casi rematado y estima una presupuesto de entre 800 y 900 millones de euros en el período 2023 y 2030, para, con las “mejores” infraestructuras garantizar la “mejor” asistencia de calidad a la población.

“Es una inversión ambiciosa, porque hay que dar respuesta” a las necesidades y “dejar completada en estos años la red de hospitales, que creo que está bastante bien en Castilla y León, pero todavía tenemos algunas lagunas”. “Es una inversión no solo en ladrillos” e incidirá mucho en tecnología.

De hecho, permitirá ampliar la red de cirugía robótica con hasta siete nuevos Da Vinci que llegarán a aquellos hospitales que carecen de ellos, como es el caso del Hospital Clínico Universitario de Valladolid, donde es “una asignatura pendiente”. También, se sumará uno al Hospital de El Bierzo, y el resto se distribuirá en hospitales de nivel 2 y 3, que son aquellos que exigen esta tecnología por las características de su cartera de servicios. En principio, los comarcales quedarán fuera.

En el caso del Clínico, que cuenta con un robot quirúrgico traumatológico, en estos momentos carece de un Da Vinci, cuando se trata de un gran hospital, con grandes profesionales destacados en campos muy avanzados, que “se lo merecen”.

En estos momentos disponen de uno los hospitales de Burgos, Salamanca, León y el Universitario Río Hortega, pero hay que extenderlos “a otras áreas, también”, porque además, se convierten en un atractivo para fidelizar profesionales. “Si queremos que los especialistas se queden en ciertos hospitales es necesario ponerles herramientas para que pueda resultar atractivo”, incide el consejero.

Nuevos aceleradores lineales

El Plan de de Infraestructuras Sanitarias y Equipamiento implicará, de partida, adquirir tres nuevos aceleradores lineales este año. Además del de Ávila, se comprará uno nuevo para Salamanca, con lo que contará con cuatro, y uno más en León, que sumará tres. También, prevé otras necesidades en este sentido, como la de renovar en breve los dos de Burgos, que ya “llegan a su obsolescencia”.

Entre sus objetivos figuran rematar el mapa de las unidades satélites de radioterapia , que empiezan ya a desarrollarse, aunque avanzan a ritmo dispar. Es decir las de Ávila, El Bierzo, Palencia, Segovia y Soria.

En el caso concreto de la de Ávila, el objetivo es que se ponga en marcha en el Hospital Nuestra Señora de Sonsoles en el tercer trimestre de 2023, después de la llegada del acelerador el 15 de junio. Mientras, la de Segovia tendrá que esperar a que vea la luz su nueva infraestructura sanitaria, el Complejo Asistencial y Educativo de Segovia, cuyas obras de urbanización ya se han licitado y que se ‘colarán’ en el nuevo plan. En este caso, Vázquez “está mas tranquilo” porque existe un concierto que permite dar tratamiento radioterápico a los pacientes, sin necesidad de que tenga que desplazarse.

En Palencia ya se han iniciado las obras de acondicionamiento del terreno donde se ubicará la nueva unidad satélite, cuya edificación empezará en paralelo con el bloque técnico. En Soria, se está construyendo el búnker dentro de las obras de ampliación del Hospital Santa Bárbara, con el objetivo de que esté todo listo para que sea una realidad en 2025. Por último, en El Bierzo se trabaja en la licitación para la zona de rehabilitación, de modo que pueda sacarse y se utilice este espacio para el búnker. “El ritmo de la construcción es muy poco armónico, es decir, muy poco simétrico”, pero “avanza”.

El plan incluye obras como el bloque de consultas del Complejo Asistencial de Salamanca, con un presupuesto de 51 millones de euros, y el bloque técnico del Hospital Río Carrión de Palencia, cuya adjudicación se eleva a 67 millones. También, está previsto acabar con la reforma del Hospital Clínico Universitario de Valladolid, una obra “faraónica”, y el Hospital Santiago Apóstol de Miranda de Ebro (Burgos), cuyas obras podrían comenzar este otoño y cuyo importe supera los 100 millones de euros.

Financiación público-privada, abierta

Por lo que respecta a la financiación, el consejero recordó que se han aprovechado los fondos de Europa para renovar tecnología, como ha ocurrido con varias resonancias magnéticas, pero “todavía hay que renovar más” y el sistema de financiación “castiga duramente a Castilla y León”. En este escenario, ve “una posibilidad” la colaboración público/privada para sufragar unas infraestructuras, bajo la sombra de los nuevos tratamientos farmacológicos, “muy caros” pero que hay que asumir por sus claros beneficios para el paciente.

“Es una posibilidad. Los ciudadanos lo que quieren son buenas infraestructuras, quieren buena sanidad y realmente una de las formas, y en Burgos creo que está ahí, es el hospital que hay, es la colaboración”. “Yo vuelvo a decir lo mismo. Realmente, si se analiza, por qué ahora mismo tenemos un hospital nuevo en Salamanca y un hospital nuevo en Burgos… Cómo se hubieran hecho los hospitales mediante el sistema habitual, con los desembolsos económicos que hay que hacer, que hacen imposible llevar dos obras a ese nivel a la vez. Porque no hay... las obras públicas no dan para más”.

Atención Primaria

Dentro de capítulo de Atención Primaria, el plan marcará una priorización de obras de nueva construcción o de reforma y ampliación de centros de salud y consultorios locales en cada una de las áreas de salud, donde se mejorará también la equipación.

Además, se completará con la partida de 33,7 millones del acuerdo para la mejora de infraestructuras, ampliación y renovación del equipamiento clínico de los centros de salud de Atención Primaria, del acuerdo del plan nacional, que implicó la distribución de 579,1 millones de euros entre las comunidades autónomas para los 13.000 centros de salud de Atención Primaria y casi 39 para salud mental.

“Lo vamos a utilizar sobre todo para obras de climatización de los centros de atención primaria, para obras de mejora de la eficiencia energética de los centros, renovar carpintería, cubiertas de envoltura de los centros y también una parte la vamos a destinar a dotación. Se va a repartir entre todas las áreas de salud”.

Inteligencia artificial

Otra de las bazas del plan pasa por explotar las posibilidades de la inteligencia artificial, para ayudar a los profesionales de Sacyl en los diagnósticos. De hecho se trabaja en un nuevo anillo digital de anatomía patológica, que reforzará al actual, ya que más allá de compartir informes y protocolos, soportará imagen. Contará con nodos en las nueve provincias para el trabajo colaborativo de los profesionales, y la previsión es que el contrato inicial, cuya licitación está prevista para este año, ronde los cuatro millones de euros. De momento ya se ha liberado uno para equipar 140 puestos de trabajo de soporte de imagen y de informes diagnósticos.

El proyecto se enmarca en la mejora de la capacidad diagnóstica y terapéutica de los centros por medio del uso de las TIC. El sistema utilizará software basado en tecnología de inteligencia artificial de ayuda al diagnóstico, lo que requiere de equipos con gran capacidad de proceso y al menos un monitor diagnóstico de alta resolución certificado por cada uno de los 140 puestos fijados de los Servicios de Anatomía Patológica de los Hospitales de la Gerencia Regional Salud.

El pacto por la Sanidad

“Participación, diálogo, consenso y acuerdo”. Con estos mimbres se presentó el consejero de Sanidad, Alejandro Vázquez, al inicio de la legislatura para garantizar la salud y alcanzar un pacto por la sanidad; un pacto que no llega y no por falta de voluntad del Gobierno, sino porque “la principal fuerza de la oposición se niega”. Lo sentencia en ‘Los desayunos de Ical’, donde explica que el primer paso es un pacto político, para poder sumar, después, a los profesionales, colegios profesionales, organizaciones sindicales y sociedades científicas y usuarios. “Todo lo contrario de lo que hemos vivido aquí en los últimos meses”, donde el PSOE ha puesto unas líneas rojas “no para pactar, sino para sentarse a pactar”.

“Eso no es un pacto, eso se llama chantaje” y deja “bien a las claras lo que le importa la mejora del sistema sanitario, que es poco o nada”. “ Yo tengo muy claro, y así lo he dicho en la Cortes reiteradas veces y lo vuelvo a decir aquí, que el Partido Socialista utiliza la sanidad como herramienta partidista. Y mientras sigamos así es imposible”, lamenta.

El consejero reconoce que confía más en un acuerdo nacional, una vez que acabe la resaca de los procesos electorales, donde “hay un ambiente un poco más favorable”, porque, explica: “O llegamos a un pacto, y vamos a lo que dicen ciertas organizaciones como las sociedades científicas y los colegios que nos han sabido posicionar en esto” y se saca a la sanidad del partidismo, o no se va a solucionar el problema.

Entiende que cada fuerza política tiene sus ideas sobre la sanidad, un modelo constituido, pero hay cosas que son comunes. “Y de hecho queda muy de manifiesto cuando nos reunimos en el post Consejo Interterritorial los consejeros de diferentes fuerzas políticas, socialistas, populares, nacionalistas… Los problemas son los mismos en todos los territorios, los mismos”, por lo que aboga por un acuerdo entre los grupos nacionales, que después se complete a nivel autonómico.

Mareas blancas

El pacto y el blindaje de la sanidad lo reclaman sobre todo los ciudadanos y los trabajadores, que en el último año han protagonizado mareas blancas y movilizaciones, incluso una convocatoria de huelga que hacía años no se producían. El consejero reconoce cierto “descontento”, “mareas” con un matiz, el de blancas “porque van con la bata blanca los profesionales” que hasta el donde ha podido ver “no han salido mucho en esas manifestaciones”, y una convocatoria de huelga que respeta, pero sobre la que “hay que reflexionar”. “Sin haberse dado una serie de cambios en las relaciones laborales sustanciales en los últimos meses, cómo se convoca una huelga a las puertas de un periodo electoral, que es una cosa bastante significativa.”

Considera que los profesionales, más que descontentos, padecen un “hartazgo importante” a raíz de la pandemia. “La pandemia ha condicionado mucho la manera de enfocar el trabajo y la vida en el mundo sanitario, y hay que pelear por volver otra vez a una situación de normalidad absoluta. Y eso va a costar, porque el ánimo de los trabajadores sanitarios está bajo”.

Mientras, los ciudadanos, “en este momento están viviendo la última ola de la pandemia, que es la ola del cúmulo de los atrasos de la asistencia sanitaria, que aunque se está trabajando por mejorar y algunos logros hemos tenido, todavía no hemos llegado a la situación prepandémica”.