El punto de inflexión de Netflix y el denominador común de sus cancelaciones
La compañía ha enfadado a los seguidores de 'Día a día' por las explicaciones dadas para su cancelación.
17 marzo, 2019 14:06Los seguidores de Día a día no perdonan a Netflix la cancelación de la serie protagonizada por Rita Moreno y Justina Machado. Y no lo hacen sobre todo por haber dicho que “es decepcionante que más gente no descubriera la serie”.
Unas palabras que obligaron a la compañía a tener que matizar su explicación. “No os toméis esto como una indicación de que vuestra historia no es importante”, decían en un comunicado a los medios.
No obstante, lo más llamativo era que, teniendo en cuenta la estrategia de Netflix de crear percepción de éxito de sus series gracias a no hacer públicos sus datos de audiencia, la plataforma de streaming reconociera explícitamente que una de sus ficciones no estaba siendo tan seguido como se esperaba.
Un movimiento poco habitual que viene a confirmar que la compañía no es ninguna ONG de series por mucho que hayan rescatado series que murieron en el abierto, y que funciona como cualquier otra compañía del sector audiovisual. Una ficción no se puede mantener solo por prestigio o críticas si los números no salen.
Pero, además, hay que tener en cuenta otro factor para entender esta cancelación. Y es que, al igual que las últimas series canceladas por la plataforma como Daredevil, Jessica Jones o The Punisher, Día a día es de propiedad externa.
Día a día es propiedad de Sony Pictures, todas las series de Marvel como Jessica Jones, Daredevil, The Punisher o Luke Cage son de ABC Studios, Orange is the new black es de Lionsgate, American Vandal de CBS… Y de esta forma, lograr la rentabilidad ya no es tan sencillo.
Por ello desde Netflix se ha preferido limitar este tipo de producciones y fomentar la de proyectos de la compañía para así controlar todo el proceso de producción pero, sobre todo, ahorrar en los costes.
Talento en exclusividad
De ahí que la plataforma haya decidido, por ejemplo, invertir en la creación de una sede de producción en Madrid para la oferta de contenido original en castellano de los próximos años, incluyendo títulos ya existentes y otros nuevos producidos por Netflix, así como series y películas producidas por asociados.
Pero, además, la compañía está fichando talento en exclusiva y de ahí sus acuerdos con grandes de la ficción como Shonda Rhimes (Scandal, Anatomía de Grey), Ryan Murphy (Glee, American Horror Story), Álex Pina (La casa de papel, El Embarcadero) o los creadores de Dark, Jantje Friese y Baran bo Odar.
En este sentido no hay que olvidar la fuerte competencia que se le viene a la compañía de streaming, que verá como a sus ya rivales HBO, Amazon o Hulu, se le une ahora la llegada de nuevas plataformas de Apple, Warner o Disney.
Esta última, por ejemplo, ha mostrado su interés en continuar las historias de las series de Marvel que Netflix ha cancelado ahora que tras la compra de FOX, ha pasado a adquirir los derechos de las historias de los súperheroes.