La 5ª temporada de 'RuPaul: Reinas del Drag' llega a TEN este lunes, 19 de septiembre
Bajo el nombre de RuPaul: Reinas del Drag, llega a TEN el reality show más rompedor de la televisión estadounidense.El canal gestionado por el grupo Secuoya estrenará, por primera vez doblado al castellano, el programa en el que una serie de drag queens compiten entre ellas para ser nombrar la mejor transformista de los Estados Unidos.
Este lunes, 19 de septiembre, la cadena emitirá, desde su quinta temporada, este talent en el que la extravagancia y el glam son protagonistas.
Así es el talent show que ha logrado enloquecer a internet
RuPaul intentará buscar a su sucesora entre todas aquellas drag queens que vayan sobradas de carisma, singularidad, descaro y talento. El vehículo que usa para ello es un grandioso espectáculo de variedades con música, moda, belleza, interpretación, pruebas físicas y, sobre todo, mucho humor.
Estas competirán en TEN para alzarse con el título de Superstar Drag del año. Serán juzgadas por el mismísimo RuPaul Charles, quien tendrá una presencia protagonista en su programa en sus múltiples versiones: vestido de drag o sin transformarse: en su más pura vis cómica y ejerciendo su derecho a veto; convocando a sus amigos más famosos e interactuando con todas y cada una de los postulantes.
En cada programa se propone una miniprueba que determinará la ventaja para el gran examen, que consiste en retos tan variopintos como hacerse un propio traje drag o grabar un anuncio. Un desfile es la traca final, en el que RuPaul hace de acompañante en un panel de jueces formado por famosos rostros y celebrities del mundo del espectáculo mundial que ayudarán a decidir qué concursantes se salvan, quién gana el premio semanal y cuáles serán los elegidos para el gran duelo.
Cantar en playback, desfilar con soltura subidos a plataformas imposibles, ejercer la provocación sin caer en la vulgaridad, conocer sus límites y superarlos si es necesario... El camino hacia el trono es un arduo camino para los concursantes que, por el contrario, se transforma en un espectáculo brillante para el espectador.