Giuseppe di Bella, el italiano que recaló en España para representarnos en Eurovisión
Giuseppe di Bella llegó a España como estudiante de Erasmus llegado directamente de su Sicilia natal hace ocho años. Lo hacía como estudiante de derecho en la Universidad Complutense de Madrid. Pero terminó quedándose. Para ganarse la vida comenzó a dar clases de baile y hace cinco años fue llamado a las filas de Operación triunfo junto a Myriam Benedited. Comenzó una carrera en el mundo del entretenimiento que da un paso más este sábado, como acompañante de Edurne en el Festival de Eurovisión.
"A Eurovisión llegué tan de casualidad como a este mundo. Escuché la canción con Miryam tamién, porque sabíamos que estaba Edurne. Gestmusic nos dijo que de momento no iba a haber movimiento. Después lllegó la semana, entró Miryam y me propusieron que fuera yo el chico que acompañase a Edurne y aquí estamos", comenta a Bluper el bailarín en Viena.
Entre ensayo y ensayo, el italiano se mueve como pez en el agua por el centro de prensa y por las redes sociales. Su presencia en el Festival ha revolucionado las carpetas de muchas (y de muchos). Pero también su vida. "Es verdad que piensas que se va a hablar un poco por la coña de que salgo sin camiseta y la tipología del festival que es. El hecho de que sólo yo acompaño a Edurne en el escenario también ha ayudado. Algo sabía que se hablaría, pero me ha sorprendido que haya sido tanto".
Mientras aparecía en programas como Tu cara me suena o ¡Mira quien baila! su nombre comenzó a ser conocido y su rostro reconocible. Pero jamás abandonó su carrera como abogado y las noches de estudio ocupaban sus huecos libres. "Lo que estoy haciendo es intentar tener una visión de futuro. Me especialicé en derecho de entretenimiento para intentar quedarme detrás de las cámaras. Si me preguntan si me quedo con lo legal o lo creativo, provablemente me quede con lo creativo, pero no necesariamente desde un punto de vista coreográfico, también desde los contenidos. Me apetecería ponerme a trabajar desde abajo en el mundo de la tele y aprender".
- P: ¿Qué crees que se puede hacer en la televisión?
- R: Hay medios económicos para hacer cosas muy buenas en el mundo del entretenimiento. Evidentemente, a veces las cosas no salen bien. Pero hay muchos factores que entran en eso. El entretenimiento, a pesar de ser productos fast food, te permite crear cosas muy bonitas.
- P: ¿Te apetece evolucionar y probarte en nuevas facetas delante de la cámara?
- R: Si debo evolucionar de bailarín a otra cosa no sería a actor. Si hago un castin y les gusto, pues genial. Pero pienso que como italiano simpre va a haber un español que hable mejor que yo. Y como italiano ya no tengo tanto acento como para ser el italiano gracioso".
Giuseppe di Bella no es nuevo en eso de levantar a Edurne por los aires. La conoció en 2010, cuando la cantante participaba en ¡Más que baile! en Telecinco. "¿Un quickstep?", se pregunta a sí mismo. Ya le cuesta hacer memoria. Después se volvió a encontrar con ella en Tu cara me suena, donde conjugaron algunas de las coregrafías más difíciles del programa. "Edurne es trabajadora y currante. Muy currante. Es muy buena a la hora de concentrarse. Se sube al escenario y se crece, es otra persona", contesta cuando se le pide describir a su compañera de viaje.
- P: ¿Con qué país te quedas este año si quitamos a España de la lista?
- R: Por tener medio corazón italiano me tendré que quedar con la canción de Il Volo de Italia. Espero con todo mi corazón que gane España, evidentemente. Pero si esto no pudiera ser y ganara Italia estaría muy contento. La canción está muy bien. También me gusta el Golden Boy de Israel pero porque se me ha quedado metido en la cabeza. La de Suecia me gusta mucho pero es que ya he visto esta actuación 342 veces, entonces no me genera ninguna expectación ver la sorpresa porque ya sé que va a hacerlo perfectamente.
- P: ¿Ha habido problemas con la realización de la televisión austriaca?
- R: No es que haya habido problemas. Al fin y al cabo son artistas en cierta medida y tienen su ego y su manera de hacer las cosas. Aquí hay una forma austriaca de ver las cosas que te puede gustar más o te puede gustar menos. Que te puede encajar más o te puede encajar menos. Nosotros hemos pedido al detalle lo que queríamos. He visto libros plano a plano, luz a luz. Todo está medido por parte de Gestmusic al milímetro. Mañana es la final y lo que salga en pantalla es lo que se va a ver. Si tengo que dar mi punto de vista como bailarín, añadiría dos planos más de la parte de coreografía. En el momento que entra la coreografía la realización no es tan dinámica como lo es el baile. Desde la ignorancia, yo y Gestmusic añadiríamos dos o tres planitos.