El abandono de Tamara de la duodécima temporada de MasterChef ha generado una polémica demasiado grande para RTVE. Con la ministra de Sanidad en contra del talent culinario y un revuelo que ha llegado hasta el Congreso, la Corporación retiró de su plataforma y redes la quinta gala del concurso. Tal ha sido la controversia, que la propia productora ha decidido pronunciarse.
Con la cadena pública en el foco de las críticas, ha sido Shine Iberia la que ahora ha optado por dar su versión de lo sucedido y recalcando cómo el talent culinario siempre vela por el bienestar de sus participantes. “El respeto y el bienestar emocional de todas las personas que participan en MasterChef es nuestra absoluta prioridad”, señala la productora a BLUPER.
“Garantizamos la grabación en un entorno seguro, y por ello un equipo psicológico está a disposición de todos los concursantes antes, durante y después de la emisión del programa, entre otras medidas”, prosigue, para después recalcar cómo en esta duodécima se ha reforzado el apartado bienestar mental para cada uno de los 16 participantes.
“En esta edición, MasterChef ha reforzado su compromiso total con la salud mental visibilizando la historia de David, un concursante que afirmó haber tenido problemas de esta índole en su pasado. Tanto él como Tamara y el resto de concursantes del programa, son monitorizados 24 horas al día por este equipo de psicólogos”, expresa la compañía.
En lo referente a Tamara, Shine Iberia señala su postura sobre lo sucedido con la consultora de finanzas. “Tamara expresó en varias ocasiones, en programas anteriores, que no quería dedicarse a la gastronomía. Este fue el motivo de su abandono. Para sus compañeros y jurado fue un momento duro, dada su pasión personal hacia el mundo de la gastronomía y su absoluta dedicación, y les costó entender esta decisión, como verbalizaron”, comunica la productora.
No obstante, Shine Iberia reconoce que tienen en cuenta las quejas que se han producido a raíz de la polémica. “En cualquier caso, toda situación es un aprendizaje del que tomamos nota. Además, agradecemos el debate surgido, ya que nos enriquece como sociedad y nos permite seguir avanzando”, concluyen. De esta forma, se busca dar por zanjada una polémica surgida a raíz de fragmentos de la gala que no han sido tampoco contextualizados.
El revuelo ha sido tal, que el partido político Sumar registró cuatro preguntas para la presidenta interina de RTVE, Concepción Cascajosa, sobre la ética del programa y su continuidad en el Congreso de los Diputados. A pesar de que la duodécima edición del talent está siendo la menos vista de todas las temporadas que ha tenido el formato en término de media de espectadores (no así en lo referente a share), lo cierto es que su cuota de pantalla supera a la que tiene La 1 y es uno de los pocos formatos que le está funcionando a la Corporación en el prime time.
Jordi Cruz y Tamara aclaran la polémica
Tal ha sido el revuelo causado, que tanto el chef como la aspirante han protagonizado un vídeo en redes sociales con el que buscan poner punto y final a la polémica. Antes de mostrar que ambos iban a preparar una "carrot cake 2.0" han querido aclarar los malentendidos. "Creo que el tema de la salud mental es algo muy delicado. Y yo estoy fantástica", comenzó comentando Tamara. "Me pongo muy intenso y en tensión, es verdad. Pero también suelo decirle cosas con carácter a personas que también lo tiene. Y creo que tú, Tamara, eres de mente fuerte", explicaba Cruz.
Con la consultora financiera dándole la razón al chef catalán, Tamara señalaba que se ha ido del talent show sólo porque sentía que no encajaba, desmintiendo que fuese por temas de salud mental. "Es como cuando comienzas una carrera y ves cosas que no te gustan y la dejas", aclaraba. Cruz añadía después que MasterChef es tanto un programa sobre cocina como un formato de espectáculo y entretenimiento.
"En MasterChef, hablamos de superación, de velocidad, de evolución, de actitudes, de querer mejorar, de querer superarte. No estamos ahí para herir ni para atacar a nadie. También, estamos haciendo televisión. No sé si alguien se ha dado cuenta", explicaba el cocinero. "Queremos que descubráis el mundo de la cocina, pero también es un programa de televisión. Cuando no grabamos, creo que todos nos llevamos bastante bien. Nos hemos reído mucho. Pero cuando enchufamos las cámaras, pues toca ponerse más serio", añadía Cruz.