Ya no vende juguetes eróticos: Chiqui de ‘Gran Hermano’ explica a qué profesión se dedica ahora

Almudena Martínez, más conocida como Chiqui, fue un personaje importante del universo de Telecinco durante años. La conocimos en Gran Hermano 8, y más tarde concursó en Supervivientes, fue reportera de Sálvame y hasta se casó ante las cámaras en Las bodas de Sálvame. Incluso la vimos en Solos, y en la Sálvame Snow Week. En los últimos años, sin embargo, su peso en la pequeña pantalla es algo muy anecdótico, y, generalmente, concede entrevistas en las que habla de su actual situación, alejada de los platós.

Este fin de semana, Chiqui ha reparecido en Socialité. Lo último que supimos de ella es que soñaba con montar una tintorería industrial. “He realizado un curso sobre tintorería, productos químicos, lavado... Todo lo que se necesita saber para abrir ese tipo de negocios”, explicó a la revista Pronto, en julio de 2023. Su fuente de ingresos en aquellos momentos procedía de su trabajo como vendedora de productos eróticos. Un oficio del que ya habló en Viernes Deluxe en mayo de ese año. “Mi jefe me ofreció vender juguetes eróticos y ser la chica que llevase la maleta sexy”, explicó entonces, provocando cierta confusión entre los tertulianos.

Sin embargo, la etapa de Chiqui como vendedora de este tipo de juguetes ya es historia. Este fin de semana, Almudena ha reaparecido en Socialité, y ha explicado que trabaja en un concesionario. “Ahora estoy aquí, vendiendo coches”, señalaba a las cámaras del programa que ahora produce Fénix Media. La popularidad que tuvo en el pasado le permite desempeñar bien sus funciones, y cree que lo que mejor le sirve para vender es “ser yo misma, supersimpática”.

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Para Telecinco, Chiqui también ha hablado de su complicada situación familiar, que le impide hacer televisión. “He estado cuidando de mis padres y luego entre casa, niños y trabajo no podía. Ahora no puedo volver a la televisión, pero la echo de menos. Sé que al público le encanto”, asegura.

Hay que destacar que Chiqui siempre demostró tener una conexión especial con la cámara, y su desparpajo le llevó incluso a probar suerte como vedette hace unos años, tal como contó en Sábado Deluxe. Los que fueron sus compañeros de Sálvame solo han tenido palabras buenas hacia ella, y solían destacar cómo nunca se quejaba y se esforzaba en hacerlo bien.