“Después de este instante, nada será igual. Estaremos frente a las treinta canciones que nos cambiarán la vida. Al menos, durante un tiempo. Algunas las amaremos. Otras no nos gustarán. Habrá una que recordaremos para siempre. Luego estará la que, sin quererlo, aprenderemos de memoria. Y la que cantaremos con fuerza en un concierto. De alguna u otra forma, formarán parte de nuestros días. Y no podremos vivir sin ellas”. Con estas palabras, el cantante transalpino Marco Mengoni abrió el Festival de Sanremo, resumiendo la esencia de por qué, en Italia, Sanremo è Sanremo. 

Uniendo los podios provisionales de las primeras tres noches de Sanremo, donde todos los artistas han cantado sus temas ya dos veces y han podido perfeccionar sus actuaciones, se confirman como favoritos Annalisa, Mahmood y Angelina Mango. Tres artistas que están concursando con un tema rítmico, cuando en las últimas dos ediciones, sin embargo, las canciones ganadoras han sido de corte melódico. 

Annalisa, con su tema Sinceramente, es una de las grandes favoritas. El tema, a pie de calle, está siendo recordado por los italianos por su “quando, quando, quando” que evoca, de forma seductora, la célebre canción de Tony Renis de los años cincuenta. Un verso pegadizo, pero no banal, a disposición de una pieza que podría esconder una mezcla potente y equilibrada de la actual fuerza radiofónica y la calidad vocal de Annalisa.

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La artista italiana del momento es la sexta vez que se exhibe en el Teatro Ariston y donde Sinceramente es un tema muy distinto respecto a la épica sonora de Il Mondo Prima Di Te (2018) y Dieci (2021); que unían de forma simbiótica la melodía de Annalisa y la tradición de Sanremo. Pero lo cierto es que dicha combinación, hasta hoy, ha dejado a la artista ligur con la miel en los labios. Por eso Annalisa, esta vez, vuelve pero con un cambio de registro; donde Sinceramente resulta tan atractiva en pantalla, cuanto rítmica al encender la radio. 

Mahmood y su Tuta Gold, también está liderando los podios provisionales del Festival de Sanremo. El tema pertenece plenamente al estilo que lo caracteriza desde hace un lustro, con matices que mezclan sus raíces italianas y egipcias. Lo único que Mahmood podría tener, objetivamente, en contra, es que ya ha ganado en dos ocasiones el Festival de Sanremo: con la canción Soldi (2019) y con Brividi (2022) junto a Blanco.

Angelina Mango, aun siendo la primera vez que participa en Sanremo, es otra de las favoritas de cara a la final. Su tema La Noia apuesta por influencias de la cumbia y por una coreografía llamativa.  

No hay que perder de vista las piezas melódicas, que podrían reservar alguna que otra sorpresa. Sobre todo si se trata de Irama y su Tu No, pasional, heróica e infinita, es decir, la quintaesencia de Sanremo. Irama, en su trayectoria artística reciente, con este tema confirma sus dos estilos bien diferenciados, fuera y dentro del Teatro Ariston. Si por un lado el pasado verano protagonizó las listas de éxitos transalpinas con Hollywood, de gran gancho estival; con Tu No defiende su registro más profundo, de voz corpulenta, para la balada sin duda más intensa de su carrera. 

No hay una canción perfecta para Sanremo. Pero Diodato probablemente rozó dicha idea tocando el cielo del Teatro Ariston con Fai Rumore (2020). Tan sólo dos semanas después de su victoria arrancó el coronavirus en Italia y, en pleno confinamiento, su tema se convirtió en el himno de la pandemia. Quedará para la historia de la música y televisión italiana la noche en la que Diodato cantó solo en medio de la Arena de Verona para la final de Eurovisión de hace cuatro años. En esta edición, Diodato vuelve por primera vez desde su victoria en Sanremo con la canción Ti Muovi. Un tema íntimo, que arranca lentamente, para luego lucirse en un estribillo tierno y atemporal. 

De Il Volo a Nek

Una propuesta interesante es la que representa el dúo de los Santi Francesi y su tema L’Amore In Bocca. Una canción que describe la amargura del amor, sin renunciar a la vez a aspectos sensuales y carnales. La aportación erótica del título ha sido fruto de un juego de palabras en italiano –al principio el título era “L’Amaro In Bocca”, pero el dúo ha explicado que hubo una afortunada errata–. L’Amore In Bocca se presenta con ecos épicos, sonidos electrónicos, crepusculares. De cara a la pantalla, las cualidades interpretativas del cantante del dúo italiano están siendo clave para una canción que, igualmente, tendrá recorrido en las principales cadenas radiofónicas del país. 

Emma y Alessandra Amoroso, grandes figuras de la música italiana, defienden su estilo, respectivamente, en los temas Apnea y Fino A Qui. Nek y Francesco Renga, veteranos de Sanremo pero por primera vez en dúo, en Pazzo Di Te están contando el amor puro. Il Volo con Capolavoro han ido a más entre la primera actuación y la segunda, sintiéndose cómodos en el escenario del célebre Teatro Ariston. Una escucha aparte merece la veterana cantautora Fiorella Mannoia y su Mariposa en honor a las mujeres.

Mr.Rain, quien ya participó el año pasado, se mantiene fiel a su carácter musical en la pieza Due Altalene. Dentro de la variada lista de las treinta canciones de esta edición de Sanremo, cabe destacar el napolitano cantado por Geolier en I P’ Me, Tu P’ Te, el optimismo y la frescura de Alfa en Vai! y el estilo doble de Rose Villain con su Click Boom!, mezclando en paralelo lo melódico de gran parte de la canción y un estribillo de sonido urbano.

La música, en la localidad de Liguria, estos días no se está limitando sólo a los concursantes. Tanto Marco Mengoni como Giorgia, ambos ganadores de Sanremo y presentadores junto a Amadeus –único director artístico del Festival en cinco ediciones consecutivas– de la primera y segunda noche de esta edición, respectivamente; han liderado dos vibrantes medley en los que han compartido, frente a millones de italianos, sus grandes éxitos.

El deejay francés Bob Sinclair protagonizó un dj set, conectado en directo desde un crucero colocado frente a la costa de Sanremo. Este miércoles, el coro de la Fundación Arena de Verona cantó el aria Va Pensiero de Giuseppe Verdi. En ocasión de las cuatro décadas desde su victoria en Sanremo, Eros Ramazzotti interpretó el jueves por la noche el tema Terra Promessa que lo lanzó definitivamente a la fama en 1984.

Una de las sorpresas musicales, dentro del ámbito de los invitados, ha sido el actor neozelandés Russel Crowe quien, junto a su banda The Gentleman Barbers y mezclando blues, rock y jazz; cantó la canción Let Your Light Shine. Anoche fue la noche de las cover, donde los 30 artistas en competición invitaron a otros 30 intérpretes, entre ellos la española Aitana, en la velada más colorida de todo el Festival. Por algo será, que Sanremo è Sanremo.