Cifras y Letras regresa a RTVE este lunes, 15 de enero, como la nueva apuesta diaria de La 2. El concurso, referente internacional, llegará con una renovada y ambiciosa apuesta, que encabezará el presentador Aitor Albizua. El plató será innovador y original: según apuntan, se ha apostado por las nuevas tecnologías. Ya no habrá diccionarios, sino tablets: un signo de los tiempos. Y el presentador tendrá la colaboración de Elena Herráiz y David Calle, expertos en cada una de las ramas del formato.
El programa, producido por RTVE en colaboración con Atomis Media-Prime Time Media AIE, comenzará a las 21:30, por lo que competirá en su primer tramo contra los informativos de las diferentes cadenas y en su tramo final contra el programa más visto de la televisión, El Hormiguero. Este horario es otra de las novedades del mítico espacio.
De esta forma, Cifras y Letras vuelve a la pequeña pantalla tras 10 años desde el final de su última etapa. El concurso diario se estrenó en Televisión Española en 1991 y fue uno de los más seguidos durante la década de los 90. Cancelado en 1996, volvió en 2002 en cadenas autonómicas como Canal Sur, Telemadrid o Televisión Canaria. La última vez que se emitió fue en Galicia en 2013.
Nuevos presentadores y colaboradores
Las novedades también llegan a los conductores y colaboradores. Cifras y Letras deja atrás a Elisenda Roca, rostro clásico del programa, y a los colaboradores que revisaban cada respuesta. Entre ellos estaba Antonio Elegido, todo un tótem de la lengua. Encarnaba a un "profesor" de aspecto bohemio que analizaba esas palabras compuestas por los concursantes.
Elegido escrutaba los tomos de la RAE y pronunciaba el significado de esos términos, en ocasiones de dudosa veracidad. El maestro del lenguaje era un erudito de larga melena blanca y aires quijotescos. Cifras y Letras le dio la fama, que luego extendió más allá de los platós: en 2008 publicó un libro titulado Mi madre dice que hablo como un alien sobre la brecha generacional en la forma de comunicarse.
Una publicación en la que volcaba sus inquietudes sobre el idioma y defendía el "humanismo universalista". Definido como "viajero impenitente" y celoso de su intimidad por la editorial, el "profesor" tuvo otro momento de ruido mediático después de un fallo jurídico: años después del final del programa, en febrero de 2023, el Tribunal Supremo zanjó una controversia laboral que enfrentaba a Elegido con la entidad de gestión de derechos de propiedad intelectual AISGE.
Según decía, este profesional no podía ser considerado como un actor y, por tanto, no tenía derecho a cobrar una remuneración de esa entidad como él solicitaba. Tal y como explicaban, Elegido se afilió a Artistas, Intérpretes, Entidad de Gestión de Derechos de Propiedad Intelectual (AISGE) cuando terminó el programa y reclamó la remuneración que entendía que le correspondía por haber "actuado" durante 10 años y en base a lo que recoge la normativa de propiedad intelectual.
AISGE se negó al entender que durante todos esos años no había actuado, sino que realmente había ejercido como experto en letras aunque siguiendo un guion cerrado. El caso llegó a los tribunales y, en un primer momento, un juzgado de lo mercantil dio la razón a Elegido. Defendían que su trabajo en el programa debía ser asimilable al de un actor, ya que seguía instrucciones de la dirección del programa, no había espacio para la improvisación y en su contrato figuraba la concesión de sus derechos de imagen.
Fue la Audiencia de Madrid la que dio la razón a AISGE y entendió que el "profesor" de Cifras y Letras no era ningún actor y, por consiguiente, no podía cobrar esa remuneración que solicitaba. La decisión confirmada por el Tribunal Supremo dio firmeza a aquella resolución y volvió a poner en la picota a Elegido. Después de eso, poco más se sabe: abrió un canal de YouTube donde colgaba cada episodio de 'El viaje a ninguna parte', un programa donde entrevistaba a personajes conocidos, visitaba lugares curiosos o filosofaba sobre temas como la muerte. El "profesor" dejó aquel decorado, pero no las montañas de libros.