Sálvame ha vuelto a dejar claro este martes que el programa termina el 23 de junio, a pesar de que algunos rumores (o comentarios por lo bajo, como uno de Antonio Montero de ayer) hagan pensar lo contrario. Sin embargo, continuando con su sentido del humor, hoy han querido fantasear con una protección por parte del Ministerio de Cultura para su protección, y por ello, han arrancado una firma para ser declarado Bien de Interés Cultural.
Según María Patiño y Terelu Campos, las conductoras del espacio hoy, sobran las razones para que se les conceda tal distinción. “Muchos extranjeros han aprendido a hablar español gracias a este programa”, interrumpía Belén Esteban, para dar la razón a sus compañeras. Con las presentadoras, en el plató, estaba el abogado Jorge Albertini, quien redactaría la petición, y puso como ejemplo que el México el programa El chavo del ocho ha iniciado una campaña similar.
A continuación, en un vídeo, se explicó cómo Sálvame ha generado su propio lenguaje, con palabras como “pulpillo”, “cúpula” o “chuminero”, algo que no había sucedido con ningún otro programa de televisión. “No hay español que no hable con frases del Sálvame, incluso la política se ha contagiado del meme”, narraba el redactor Germán González.
Entre otros datos se destacó que Sálvame inauguró una plaza de un pueblo, tuvo su propia revista de cotilleos y otra de pasatiempos, y hasta un complejo vitamínico. “Este programa que está a punto de palmarla ha apoyado la cultura sana al comer frutas, bien de limón, naranja, banana, sandía, tomate, cereza, lemon tea”, decían, en referencia a todos los subtítulos del formato según su tramo horario y contenido. En referencia a los disfraces que han llevado sus colaboradores, indicaban que “Sálvame apoyo la cultura desde sus inicios, incentivó el arte homenajeo artistas pictóricos”, que “creó el Sálvame Okupa para apoyar el movimiento okupa, y el Mediafest para apoyar la música”, así como la Fashion Week para promulgar la moda española.
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“Este programa ha divulgado feminismo, hemos cuidado a los animales, hemos ayudado a gente sin recursos públicos (en referencia a Aramís Fuster desorientada en los pasillos) y todos los pueblos del país venían a Sálvame de visita cultural”. Además, hubo cabida para Karmele Merchante y su intento de ir a Eurovisión, y recordaron que tienen un Premio Iris y que Jorge Javier Vázquez ganó el Ondas.
“Nos estamos flipando, nos estamos viniendo arriba, alegaremos que Sálvame es una pieza única y el Ministerio nos pondrá los pies en el suelo diciéndonos una pieza única o una mierda del chino”, terminaba diciendo el vídeo. Ya de nuevo en el plató, el abogado aseguró que tienen muchas papeletas para lograrlo, que la cultura no es más que la acreditación y la demostración de la etnografía, de la cultura popular. Y la ley nos obliga a que el Bien de Interés Cultural tenga un interés, agarrar abundancia antropológica social, cosa que afirman que también tendrían.
Al acabar de exponer las razones, Jorge Bertini y Rafa Mora salieron a la plaza Felipe II de Madrid para recoger firmas y que se pueda declarar a Sálvame como Bien de Interés Cultural, y de forma digital se puede hacer a través de la web de La Fábrica de la Tele.