En ocasiones, la puesta en escena de Sálvame es muy criticada entre los televidentes. La forma en la que abordan los temas habituales de la crónica social es casi siempre desde una perspectiva sensacionalista, pero las críticas hacia el programa de Telecinco llegan cuando tratan de la misma forma temas más serios.
El caso más reciente ha sido la muerte de Bernardo Pantoja, hermano de Isabel Pantoja y padre de Anabel, que fallecía el pasado viernes 25 de noviembre. El programa vespertino de Mediaset cubrió durante horas todo lo que sucedía a las puertas del tanatorio, grabando a todas las personas que entraban. Incluso los propios reporteros acompañaban a los allegados hasta la sala donde se encontraban los restos mortales de Bernardo.
Tanto es así, que no dudaron en grabar y reproducir en varias ocasiones el desmayo en pleno directo que sufría la tía del fallecido, Magdalena Clavero, después de protagonizar una discusión con Anabel Pantoja y su madre, Merchi, donde la llamaban "sinvergüenza".
Una forma de abordar una triste noticia que rápidamente fue muy criticada en redes, pidiendo "respeto" para toda la familia y pidiendo que "no se puede hacer un show de una muerte".
Esta no ha sido la única vez en la que el formato de La Fábrica de la tele ha tirado de amarillismo para cubrir una noticia delicada. Hace un año, un equipo del programa se trasladaba hasta Málaga para realizar una conexión en directo desde el punto exacto del asesinato de Rocío Wanninkhof. Exprimiendo así el tirón de la docuserie que se estrenó en aquel momento (Dolores: La verdad sobre el caso Wanninkhof), y montando una tertulia durante buena parte de su escaleta para debatir sobre el asesinato.
Pero el formato de Telecinco fue más allá y organizó varias conexiones en directo para abordar el asunto. Raúl Triguero se desplazaba hasta Jaén, lugar en el que reside Alicia Hornos, mientras que José Antonio León conectaba desde Mijas, el pueblo malagueño donde se produjo el asesinato de Rocío.
De hecho, León realizó el recorrido que debió hacer Rocío Wanninkhof en la noche de su muerte, un acto un tanto polémico y cuestionable. "Estoy justo en el punto donde ese 9 de octubre de 1999 ocurrió todo en este descampado", relataba el reportero antes de explicar dónde pudo asaltar Tony King a Rocío y cuál fue su camino de huida.
Una conexión muy criticada en su momento por algunos espectadores que criticaban el excesivo sensacionalismo con el que el programa de Telecinco ha abordado el asunto.
Otros momentos muy criticados
El caso Alcàsser ha sido uno de los crímenes más sobrecogedores de la historia de nuestro país, y como no pudo ser de otra forma, fue uno de los temas que más horas de televisión obtuvo a lo largo de la década de los 90.
El 13 de noviembre de 1992 comenzaba el calvario para los familiares de Miriam, Toñi y Desirée, las tres jóvenes desaparecidas y finalmente asesinadas en el municipio valenciano. En concreto, fueron Paco Lobatón y Nieves Herrero los profesionales más criticados por su trato a este suceso en sus respectivos programas, Quién sabe dónde y De tú a tú.
[¿Por qué se ha crucificado a Nieves Herrero y no a Paco Lobatón? El caso Alcàsser]
Las conexiones en directo desde el municipio, las entrevistas a los familiares o la emisión de las imágenes de una de las madres rota de dolor tras el descubrimiento de los cuerpos fueron los detonantes de la indignación. "Hemos captado el momento, vamos a compartir ese dolor". Para, acto seguido, conectar con el interior de la casa de una de las madres, donde las cámaras de televisión grabaron cada una de las lágrimas que corrían por aquel pasillo.
Pero si hay una entrevista que incluso, hizo desaparecer a un programa de televisión, fue el encuentro de la madre de Francisco Javier García Martín, más conocido como 'El Cuco', el presunto asesino de la joven, en La Noria.
Lo que indignó a la mayoría de la sociedad fue el conocimiento de que la cadena habría pagado 10.000 euros para realizar dicha entrevista. Rosalía García se sentaba en el plató y era entrevistada por Jordi González el 29 de octubre de 2011.
Una noche que marcaría un antes y un después en la cadena, ya que compañías como Nestlé, Panrico, Bayer o Puleva retiraban sus anuncios, iniciando un movimiento que acabó arrastrando prácticamente a todas las marcas con presencia en los espacios publicitarios de La Noria, sentenciando al programa.
Corría el 22 de septiembre del año 2013 cuando se hallaba el cuerpo sin vida de Asunta Basterra, una niña de 12 años en Galicia. Los magacines informativos se volcaron con la noticia. De hecho, El programa de Ana Rosa registraba sus mejores datos de los últimos años, superando durante varios días el 20% de cuota de pantalla. Algo similar sucedió con Espejo Público, que llegaba al medio millón de espectadores.
Era en la tarde del 25 de septiembre cuando se detiene al padre de Asunta y, a partir de ese momento, los expertos, los rumores, las entrevistas, las hipótesis y las opiniones de los colaboradores empiezan a monopolizar los programas televisivos, rellenando cientos de horas.
Reportajes cargados de sensacionalismo, de testigos "importantes" o pruebas "exclusivas" que generaron cientos de beneficios a raíz del hallazgo del un cadáver de una niña.