La noche del cazador dirigida por Charles Laughton convirtió en leyenda a Robert Mitchum interpretando el personaje de Harry Powell, un aterrador y falso predicador de rostro duro y anguloso que llenaba la pantalla. No ganó el Oscar por esta magnífica película, pero nos ganó a todos.
En Retorno al pasado, Cara de Ángel, Yakuza y Vientos de guerra retrató su rostro de tipo cínico, escéptico, duro, rebelde y atormentado. Paseó su punto de chulería en otros clásicos como El Cabo del miedo, El día más largo, La hija de Ryan o La Batalla de Midway, Mitchum en sus innumerables personajes supo mostrar la maldad y la nobleza con ese rostro impenetrable y esa mirada infinita.
Su personalidad física, violenta y su humor irónico crearon su personaje. Era un nuevo estilo de actor, quizás el primer antihéroe moderno. Su vida estuvo llena de excesos, repleta de drogas, alcohol y varios escándalos, uno de ellos relacionado con las drogas. Se codeó con los personajes más importantes de su época: Marilyn Monroe, Shirley MacLaine, Frank Sinatra, John Wayne...
En 1992 se le otorgó el premio Cecil B. De Mille a toda su carrera y en 1993 el premio Donostia en San Sebastián. Sus últimos años los dedicó a componer música y escribir poesía. Mitchum nació un seis de Agosto de 1917 en Carolina del Sur.
"¡La batalla,muchacho! ¡La batalla entre dos rivales!
¡La mano derecha y la mano izquierda!
¡El odio y el amor! ¡El bien y el mal! Pero espera. ¡Bravo!
El viejo Diablo se rinde... ¡Está fuera de combate,muchacho!".
Davis Grubb, autor de La noche del cazador.