Nadie duda de la belleza y el encanto de los pueblos españoles. La variada naturaleza, y la rica historia ha provocado que nuestro país tenga pueblecitos de todos los estilos, costeros, de montaña, medievales… Muchos aprovechan las escapadas de fin de semana para ir a uno de estos lugares tan encantadores; como la oferta es muy amplia, la lista de ‘los pueblos más bonitos de España’ ayuda a decidir por dónde empezar.
Tras las vacaciones de agosto, con estancias más o menos largas en playa o montaña, llegan las escapadas de septiembre. Nos resistimos a volver a la rutina, y los planes de fin de semana son un gran aliado para mantener vivo el espíritu de veraneo. Ir descubriendo poco a poco los pueblos de España es toda una aventura con la que crear recuerdos inolvidables.
La provincia con más pueblos en la lista de ‘los pueblos más bonitos de España’ es Teruel, y uno de los más destacados, no solo a nivel nacional sino a nivel mundial es Cantavieja. La localidad ha sido recientemente recomendada por la Organización Mundial de Turismo.
La Organización Mundial del Turismo (OMT) es, desde 2003, un organismo especializado de las Naciones Unidas y representa la principal institución internacional en el campo del turismo. Está formado por 154 Estados miembros, y elabora una lista muy especial de los mejores pueblos del mundo. En la última edición España aparece hasta en tres ocasiones, con Cantavieja en primer lugar, y con Oñate (País Vasco) y Sigüenza (Castilla-La Mancha) ).
La iniciativa ‘Mejores Pueblos Turísticos de la OMT’ comenzó en 2021, forma parte del ‘Programa de Turismo para el Desarrollo Rural de la OMT’, un programa que busca fomentar el desarrollo y la inclusión en las zonas rurales, combatir la despoblación, promover la innovación y la integración de las cadenas de valor a través del turismo.
Cantavieja, el mejor pueblo del mundo
Cantavieja, capital de la comarca del Maestrazgo, está situada sobre un peñón calizo a 1300 metros de altitud, los que teman las alturas se pensaran dos veces si asomarse al acantilado, realmente parece que estás al borde del precipicio. Actualmente cuenta con 700 habitantes y es la localidad más poblada de la comarca.
Su trazado medieval, sus miradores, monumentos arquitectónicos y la relevancia de su pasado histórico permitieron que esta localidad fuera declarada Conjunto Histórico Artístico en 1981. Pero su importancia no se estancó ahí. Posteriormente se incluyó en la lista de los “Pueblos más Bonitos de España”, obtuvo el sello 'Best Tourism Village' -Mejor Pueblo Turístico, y ahora ha sido reconocido como el pueblo más encantador del mundo, según la Organización Mundial de Turismo (OMT).
A lo largo de su historia, por Cantavieja han pasado numerosos grupos de relevancia histórica: Templarios, Sanjuanistas y Carlistas. Todos han dejado su sello en la localidad en forma de arquitectura, historia, recuerdos y leyendas que aún conservan su encanto.
Qué visitar en Cantavieja
Principalmente el centro histórico. El conjunto arquitectónico del interior de la villa es ciertamente espectacular. Destaca especialmente la Plaza Porticada, una de las más bellas de Aragón. Está presidida por la Casa del Concejo, de origen gótico, y por la espectacular Iglesia de la Asunción, de estilo barroco, que sigue el modelo de la Basílica del Pilar de Zaragoza.
Otro de los tesoros de Cantavieja es la iglesia de San Miguel. De origen gótico y ubicada junto a la muralla y el antiguo hospital, merece la pena visitarlo a través de las visitas guiadas para poder conocer y entender la belleza y su historia. En la cabecera de este templo se puede encontrar el ejemplo más notable de enterramiento con decoración escultórica del periodo gótico en Teruel.
Otra visita interesante de la localidad es a la ermita de Loreto. Las ermitas dedicadas a la Virgen del Loreto son bastante comunes en la serranía de Gúdar y en el Maestrazgo. En su mayor parte se levantaron en el siglo XVII.
La de Cantavieja presenta la distribución característica de las ermitas con esta advocación. Tiene planta rectangular con un atrio delantero de cuatro columnas que sostienen un alero de madera labrada. Tenía un altar que desapareció en la Guerra Civil, momento en el que al parecer se utilizó para otros usos y se encendió fuego en su interior. En la actualidad hay algunos frescos obra de Benigno Rabaza y su padre, pintores de la localidad, y hace unos años se limpiaron y restauraron las pinturas de la cúpula.
Además del pintoresco núcleo urbano, existen diversas masías diseminadas por el extenso término de Cantavieja. Ubicadas entre montes y barrancos, fueron la mejor forma de explotar al máximo los recursos agrícolas y ganaderos, así como de mantener la montaña poblada. Históricamente, se han dividido en cuatro partidas: La Vega, El Barranco, Las Umbrías y La Solana, cada una de ellas con sus tradiciones, su ermita y su patrón.
Qué comer en Cantavieja
La gastronomía aragonesa destaca por su autenticidad y sabor. Embutidos, quesos, carne y buen vino son algunos de los productos más apreciados en la Comunidad. Los restaurantes del Maestrazgo han sabido adaptarse al mercado, aprovechando en sus platos las materias primas de la zona y poniendo en valor antiguas recetas. Pero, a la vez, han incorporado nuevos productos y métodos de la cocina de vanguardia para que vivas una experiencia gastronómica completa.
El queso y el vino son los productos más consumidos del maestrazgo, pero en Cantavieja es obligado pedir migas y ternasco, dos platos típicos aragoneses que harán que la experiencia sea completa.
Los principales lugares para pegarte un buen homenaje en Cantavieja es el Hotel Spa Balfagón, la Posada, el restaurante 4 vientos, o el bar Tapavieja. En todos ellos se puede disfrutar de los ingredientes y platos típicos de la zona, un regalo para el paladar y una profunda inmersión de la experiencia de un pueblo aragonés auténtico.