La provincia de Alicante cuenta con una gran oferta gastronómica repartida por sus ocho comarcas y que habitualmente se ubica en los mayores municipios de cada una de ellas. No obstante, son muchos los restaurantes rurales que ofrecen una comida de 'kilómetro cero' basada en la tradición y los productos de cercanía.

A falta de grandes campañas de marketing, el "boca a boca" ha sido el mejor aliado para la permanencia y desarrollo de este tipo de locales que tienen en "la venta" (según la Real Academia Española: "casa establecida en los caminos o despoblados para hospedaje de los pasajeros"), su más arraigado exponente.

Por eso en este ránking no pueden faltar dos de sus mejores y más conocidos exponentes que se sitúan en las comarcas del Alto Vinalopó y L'Alcoià-Comtat. Son la Venta El Borrego en Banyeres y Venta Nadal en Cocentaina.

1 | Venta El Borrego (Banyeres)

En el kilómetro 18 de la carretera Villena- Ontiniente, en el término municipal de Banyeres de Mariola, se erige una de las ventas más conocidas del sureste español. Una casona con más de 120 años de historia en el mundo gastronómico que también se ha especializado en eventos y banquetes para todo tipo de celebraciones.

Cuenta con servicio de hotel y grandes jardines, pero su mayor riqueza está en el menú. Comida tradicional, bien elaborada y variada al estilo de cualquier bar de carretera español que, sin embargo, se moderniza para los eventos. Con arroces y carnes a la brasa a precios muy competitivos.

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2 | Venta Nadal (Cocentaina)

En El Comtat, en el Cami de Penella, 15 (la carretera que va desde Alcoy a Benilloba), se sitúa la Venta Nadal, un local que en fin de semana hay que ir con reserva previa ya que generalmente tiene mucha afluencia de público de la comarca y visitantes, entre otros, ciclistas y motociclistas que disfrutan de las carreteras de la zona.

Destaca por sus embutidos de montaña caseros (que se pueden adquirir también allí), platos tan de la zona como la pericana o el «aiguasal», setas de temporada, y sobre todo, sus carnes a la brasa.

3 | Venta de Benifato (Benifato)

Con más de 100 años de historia, la Venta de Benifato se sitúa en la carretera de Alcoy-Benidorm, 28. Sus instalaciones fueron acondicionadas a la modernidad del tráfico rodado en los años 70, ya que antes funcionaba como un servicio para transportistas en carruaje. Actualmente lo regenta la cuarta generación de hosteleros.

Entre sus platos estrella está la olleta de blat o blat picat, un puchero de trigo lavado con legumbres y diferentes carnes de cerdo típico de la montaña alicantina (tocino, costillas, etc.). También se pueden degustar y comprar productos de temporada, entre otros, setas de la zona.

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4 | Casa Sanchiz (La Romana)

Situado en la partida Cases Roges (Cases de Sanchis) entre La Romana y Monóvar, se trata de uno de los restaurantes típicos del Medio Vinalopó por antonomasia. Los visitantes pueden degustar un menú de proximidad que comienza con las famosas "gachamigas" de la comarca, pulpo a la brasa y sus arroces y gazpachos manchegos.

Un deleite para los sentidos en un entorno rural único rodeado de almendros que en época de floración resultan todo un espectáculo. Un restaurante que aúna tradición con innovación a precios muy asequibles para cualquier familia y que como el resto de este listado, comienza promocionarse en redes sociales.

5 | Puerta del Agua (Petrer)

En la misma comarca se sitúa La Puerta del Agua, un alojamiento rural que recibe comensales por previa petición en la partida Caprala 49 de Petrer. Se trata de uno, quizás el más conocido de los muchos restaurantes en las faldas de la Sierra del Cid que ha evolucionado con el tiempo.

En su web afirman que "nuestro referente culinario se basa en "La cultura Mediterránea" ("desde Algeciras a Estambul."). Gracias a este talante gastronómico ofrecemos una oferta variada, autóctona y actualizada, moderna, cosmopolita y con algún toque exótico y oriental, respetando siempre la temporada original del producto y la oferta del mercado".

En esa zona, sin embargo, lo más típico es pedir una "rustidera" de cordero lechal o gazpachos o arroces al gusto de la montaña.

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6 | Mesón El Viscayo (Castalla)

A la entrada del municipio de Castalla, en plena colina, se alza uno de los locales más pintorescos de la provincia, no sólo por la comida, sino también por el servicio a precio cerrado: embutidos, carnes a la brasa, gazpachos manchegos servidos sobre su torta y aderezados con miel como postre.

Su propietario, José Antonio Cerdá, es conocido en toda la provincia por los comentarios picantes y los juegos de magia que hace los comensales. También, por su infusión de hierbas de la zona a la que ha dado el nombre de Chichiriwiki, asegurando que tiene poderes afrodisiacos.

7 | Pensió Mariola (Agres)

También en la montaña pero un poco más alejado del litoral se encuentra un coqueto alojamiento rural cuya cocina ha alcanzado fama en toda la provincia. Se trata de la Pensió Mariola, en Agres (calle San Antonio 4).

En él se pueden degustar todo tipo de platos típicos de las comarcas del interior de Alicante, desde los gazpachos, a los que tiene un carácter más local como la borreta, las bajoques farcides o la olleta, propios de l'Alcoià.

8 | Cachito (Elche)

El campo de Elche cuenta con una innumerable oferta gastronómica de nivel, desde la aclamada la Finca de Susi Díaz a locales de renombre en toda España como la Masía de Chencho. 

Cachito Restaurant, en la carretera Casas del Leon kilómetro 4,5, (partida de Pusol) sin embargo, es una de las mejores opciones calidad-precio en el ámbito de los restaurantes rurales para comer platos tan de la tierra como el arroz con costra ilicitano. De hecho, presumen en su web de hacer la "mejor paella del mundo" después de lograr el título en el World Paella Day celebrado en la Marina de Valencia en septiembre de 2021.

Las hermanas Noelia y Lidia Pascual elaboran una carta de productos de proximidad que combinan la modernidad con la tradición (el restaurante va por la cuarta generación de hosteleros) donde no faltan platos autóctonos como el aspencat o todo tipo de arroces.

9 | Rafel (Pego)

Como en los casos anteriores son muchos los restaurantes ruarles de la Marina Alta que merecerían un lugar en este ranking. Uno de los más conocidos en la que dice ser una de las cunas del arroz con costra (compitiendo con Orihuela y Elche), es el restaurante Rafel, especializado en arroces. Lo hay hasta de pato y castañas.

Como explican en su web, su especialidad arroz "elaborado con carnes de pollo y cerdo, garbanzos, morcillas, huevos y... Arroz Bomba de Pego Reserve", arroz con costra (o crosta, como se prefiera).

10 | Los Quinceños (Daya Vieja)

Elegir un restaurante de los pequeños municipios de la Vega Baja también es una apuesta arriesgada por el gran número de ellos. Los Quinceños, en Daya Vieja, es sin duda uno de los más conocidos entre el público de la provincia.

Se trata de un restaurante típico de la zona, donde la comida es abundante, de proximidad, calidad y buen precio. En él se pueden degustar todo tipo de platos de la Vega (la carta es igual de abundante que los platos), pero la estrella en este caso es el cocido con relleno o pelota, como lo demostraron en la última edición de Alicante Gastronómica en IFA. Y de postre, una almonjábena. Más típico no puede ser.