Es una de las imágenes habituales ligadas al drama migratorio, el de personal voluntario de Cruz Roja atendiendo a las personas que llegan en embarcaciones endebles tipo pateras a las costas españolas, donde el Ministerio del Interior ha transferido a esta ONG el protocolo de actuación. 

Sin embargo, desde Cruz Roja Alicante confiesan que les está costando encontrar con profesionales sanitarios que quieran ayudar de manera altruista en el puerto de Alicante, convertido en puerto único, ya que allí llegan las pateras interceptadas por Guardia Civil, Policía Nacional y Salvamento Marítimo.

"Enfermeras y enfermeros y, sobre todo, médicas y médicos, es lo que más nos cuesta encontrar, y es que cuanta más formación especializada tienen, más complicado porque disponen de menos tiempo", explica a este medio Marta Marín Muñoz. 

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Ella es, desde 2019, la responsable del proyecto de ayuda a inmigrantes de Cruz Roja Alicante, entidad que, a raíz de la pandemia, firmó un convenio con el Grupo de Cooperación al Desarrollo del Colegio de Enfermería de la provincia en busca de enfermeros y enfermeras. 

Gracias a este acuerdo, Cruz Roja actualmente dispone de "entre 5 a 7 enfermeras que aportan colaboraciones esporádicas", relata Marín Muñoz. "Tiene que darse la casualidad de que, cuando llegue la patera, puedan venir hasta el puerto y, si no pueden, tenemos a otras que nos dan apoyo telefónico también nos ayuda mucho", añade. 

En cambio, no hay médicos o médicas voluntarias. "De momento, no tenemos ninguno, hace cuatro años tuvimos uno, pero tuvo que abandonar el proyecto por cuestiones personales, y luego hemos tenido a un estudiante de Medicina", dice esta empleada. 

El equipo de intervención de Cruz Roja Alicante se compone de 7 a 8 voluntarios, "dependiendo del número de personas que llega en patera, que normalmente es de 12 a 15", agrega. Y es que, hay que tener en cuenta que esta organización no gubernamental busca diferentes perfiles, no solo sanitarios.

Desde personas que simplemente quieran participar distribuyendo suministros de elementos tipo abrigo e higiene básicos, así como alimentos y bebidas calientes, a voluntarios más formados como socorristas o técnicos en emergencias sanitarias.

De hombres a familias

De momento, Cruz Roja Alicante está detectando un "comportamiento similar" de las pateras que llegan a la provincia con respecto a 2022, "pero los meses fuertes empiezan ahora". Este año han atendido a migrantes de 6 pateras con 112 personas a bordo, de las que 91 eran hombres mayores de edad, 7 menores hombre, 12 mujeres mayores de edad y 2 menores mujeres.

En 2022 llegaron a la provincia alicantina 46 pateras: 410 personas de los que 342 eran hombres y 16 mujeres, 52 menores en total. "El 99% de los casos que atendemos son de nacionalidad argelina, lo contrario es raro", sostiene.

Sin embargo, se ha visto un cambio en los perfiles de personas que se juegan la vida para llegar a Europa por mar a través de Alicante. "Nos hemos encontrado con personas con diversidad funcional, otros que iban en sillas de rueda o con miembros amputados, también con enfermedades neurodegenerativa, incluso bebés muy pequeños, que cada vez vienen más y familias al completo". 

"Nos toca la fibra"

Y, ¿cómo afronta psicológicamente el personal voluntario el drama migratorio? "Sí, aunque estemos preparados, luego hay intervenciones que nos marcan como los víctimas de naufragio cuando te cuentan que eran 12 y llegan 5", apunta esta profesional. "El equipo tiene que estar ahí para servirles a estas personas de desahogo emocional y si hace falta del equipo psicológico", añade. 

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Personalmente, Marta Muñoz sabe que "cada intervención marca", si bien hay algún caso más impactante, como cuando el año pasado llegó una patera muy numerosa llena de sirios con bebés y mujeres embarazadas. "Fue muy duro pero también muy bonito porque tuvimos muchos gestos de cariño", rememora. 

Con todo y, "por suerte", Cruz Roja Alicante cuenta con "voluntarios muy comprometidos con este tema, tanto de otros países como españoles que vienen al puerto de Alicante cuando recibimos un aviso de patera desde Torrevieja, Denia, Altea o Alcoy, siempre con muchas ganas de ayudar", concluye.