Una dotación de la Policía Local de Elche acudió el pasado 30 de noviembre a la calle Conrado del Campo tras ser advertidos por varias llamadas de ciudadanos sobre la presencia de un hombre que estaba arrancando una rejilla de alcantarillado con un garfio. El hombre había conseguido hacerse con dos rejillas antes de marcharse del lugar con su vehículo tras ser descubierto. Las rejillas tenían un valor de 400 euros aproximadamente y su ausencia de la calzada suponía un potencial riesgo para la circulación.

Según informa la Policía en un comunicado, uno de los ciudadanos que llamó a la Policía pudo grabar al autor de los hechos y el resto de testigos pudo dar una detallada descripción de él. Después de eso, trasladaron la información al resto de patrullas que comenzaron las gestiones de búsqueda en distintos centros de recuperación de residuos.

En uno de ellos, les llegó la confirmación que un hombre había acudido a vender dos rejillas a bordo del vehículo que coincidía con la descripción.

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Además, Aigües d’Elx cotejó la relación de rejillas robadas en el último año y estas coincidían con los momentos de venta por parte del hombre a los centros de recuperación. Finalmente, la patrulla consiguió dar con el paradero del autor de los hechos tras vigilar en distintos domicilios habituales.

El hombre, de 43 años, fue detenido por un presunto delito continuado relacionado con la sustracción de casi un centenar de rejillas de alcantarillado, valoradas en varios miles de euros.

Robo de película

Por otra parte, el pasado 15 de diciembre, un hombre ha sido detenido en Elche por amenazar con una catana y un cuchillo de cocina y robar a un joven el pasado 26 de noviembre. La operación comenzó con el desplazamiento de una patrulla de la Policía Local a la calle Diagonal de la ciudad debido a la presencia de una persona "muy nerviosa y agitada".

Como informa el cuerpo policial, en primer lugar tranquilizaron al afectado para que pudiera contarles lo sucedido. Así, el joven contó que había sido amenazado y le habían robado el teléfono móvil y el dinero que llevaba encima. La víctima aseguró a los agentes que durante la madrugada estaba en un parque de la zona con varios conocidos consumiendo sustancias estupefacientes cuando le invitaron a una nave industrial abandonada para seguir consumiendo.

Una vez allí, cuando llevaban varias horas en el lugar, el joven comunicó que uno de ellos le intimidó "con un cuchillo de cocina pidiéndole todo el dinero que llevaba encima. Al negarse, el joven que le amenazaba se puso más agresivo, sacando una catana y poniéndosela en el pecho, momento en el que le dio el dinero y el teléfono móvil", informa la Policía Local.