El precio del aceite ha aumentado este 2023 el 69,3% de media en los supermercados de España, según un informe de Facua. Los productores de la provincia de Alicante ya han tenido que aplicar esta temporada medidas de seguridad inéditas para evitar el robo de aceitunas en los campos. Y como explica Rafa Montava de Asaja, este año "no hay expectativas de que bajen los precios".
"Se ha pasado de ser un cultivo no rentable, o muy poco, a uno en que cubres los gastos", razona Montava. El también presidente de la Cooperativa Agrícola Católica de Cocentaina señala este factor como "un problema general de la agricultura" que ahora ha tenido que asumir una nueva amenaza, la desaparición de las cosechas.
"El precio del aceite ha llegado a unos niveles que es mucho más alto y eso alienta robos en los campos", razona. Por ello pidieron una reunión con la subdelegación del Gobierno y el grupo Roca de la Guardia Civil, que tiene su sede en Ibi, ya que son los responsables de estos temas de seguridad en las comarcas del interior.
A partir de ahí se decidió aplicar las medidas que ya se utilizan en otro tipo de cultivos y que hasta ahora no habían sido necesarias. "Nos explicaron las formas de ir con precaución, cómo denunciarlo y qué operativo se iba a desplegar", recuerda Montava. Entre ellas, que con una aplicación móvil "podíamos comunicar cualquier problema que tengamos" además de batidas por las zonas productoras de L'Alcoià y El Comtat.
Esta nueva forma de protegerse ha implicado un nuevo modo de organizarse en unas comarcas que no estaban habituadas a un mayor control. "Aquí el cultivo es más familiar y todos recogen la aceituna", apunta. Si antes se dejaba junto a la carretera el conjunto de cajas y demás útiles, "para evitar que sea llamativo, se recoge antes". Así no se ven desde la carretera, "que es lo que se ha hecho toda la vida y no pasaba nada, pero hoy día no es igual".
Entre los consejos de la Guardia Civil para su mayor seguridad también está el que cuando se va a recolectar ahora hay que llevar una serie de documentos para mostrar en los controles que se han hecho, especialmente en el caso de que no sea el propietario de las aceitunas quien las descarga. Con ello han tenido que razonar también que esto "no se hace para recaudar, sino como un plan de prevención".
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Todas estas formas de proteger los campos de cultivo del fenómeno del robo de aceitunas son consecuencia del alza de precios. Y ahí Montava razona que no hay un único motivo que explique esa subida. Eso sí, entre las causas de ello destaca la sequía.
"En la principal zona productora, que es Andalucía, no hay campaña por la climatología", indica sobre la dura sequía que se padece. "Si lleva dos años, el primero sale el aceite, pero de las reservas de cooperativas. Si el año siguiente seguimos sin cosecha, estamos con menos reservas y el mercado especula, el precio sube", desgrana. De hecho, apunta casos de restricciones a la exportación que se han dado el pasado 2023 en Grecia y Turquía.
Hay otro factor a tener en cuenta, el calor a destiempo: "En nuestro territorio ha habido lluvias justas, eso ha hecho que los cultivos sean mejores que el año pasado. Así y todo no es un cultivo abundante porque florecen cuando no toca y se secan. Aquí necesitamos agua y frío, porque se necesitan semanas de temperaturas bajas de un invierno de toda la vida".
El aceite que sale de Alicante viene de "una agricultura de montaña, minifundista, que se pasa de padres a hijos y por amor a la tierra". Que esta se mantenga cree que es una responsabilidad de todos. Por eso pide que el debate no se centre solo en el precio porque "ahora se están cubriendo los gastos" y "en la cesta de la compra el consumo del aceite no llega ni el 1 %".