La organización "Som Mediterrània" se ha manifestado este sábado en Madrid para reclamar medidas de protección de las playas de la costa del Mediterráneo que permitan su recuperación y han mostrado su oposición a la actual Ley de Costas, que califican de "destructora y confiscatoria".
La protesta ha partido a mediodía de la Puerta de Sol, para recorrer la carrera de San Jerónimo y finalizar frente a las puertas del Congreso de los Diputados, con lemas como "Sin playas no hay futuro", "Nuestras costas tienen solución, no más destrucción" o "Ley de Costas para la gente y el ambiente".
Este movimiento agrupa a 42 asociaciones de vecinos de municipios costeros de las provincias de Castellón, Valencia, Alicante y Murcia, que reclaman al Gobierno de España que "priorice" la dotación de fondos a informes, estudios y proyectos para la regeneración costera, con medidas de ingeniería "suficientes, integrales e integradoras" del entorno y sus habitantes, que respeten la sostenibilidad medioambiental.
En un manifiesto conjunto, con el lema "Som Mediterrània", defienden que es "un mandato de nuestra Constitución convertir en sostenibles las actividades de los puertos y embalses".
Reclaman asimismo una nueva planificación para regenerar las playas, adoptando medidas para liberar los sedimentos que retienen estas infraestructuras, depositarlos en la costa e implantar medidas que garanticen la estabilidad y sostenibilidad de los arenales.
Para ello proponen recuperar el Dominio Público Terrestre que había antes de la retención de sedimentos y donde no sea viable aplicar la Ley de Expropiación Forzosa, compensando con un precio "justo".
Piden también una planificación "sostenible" de los sedimentos coordinada con las confederaciones hidrográficas, entidades portuarias y la Demarcación de Costas, solicitando "de manera inmediata" todos los datos disponibles sobre materiales acumulados en sus cuencas o instalaciones para implantar medidas de movilización o compensación.
La organización rechaza por último el nuevo Reglamento de Costas, por lo que solicita su suspensión y retirada, así como una reforma de la Ley de Costas, actualizándola a las nuevas sensibilidades de los territorios e identidad, alineada con la normativa internacional.
A la protesta se han sumado asociaciones vecinales y cívicas de toda la costa de la Comunitat Valenciana, ayuntamientos afectados y partidos políticos.
Ataque a una manera de vida
El alcalde del Perelló, Juan Botella, presente en la protesta junto a la concejala Nati Aguado, ha advertido de que "estamos ante un problema que ataca a una manera de vida y a la economía de miles de familias" por lo que ha reclamado al Gobierno de España "sensibilidad" y que "se ponga a trabajar para revertir una legislación que atenta contra las personas".
También han acudido representantes del PSPV de Castellón, como el secretario general de esta formación, Samuel Falomir, la alcaldesa de Cabanes, Virginia Martí, la teniente de alcaldía de Oropesa, María Jiménez y concejales de las localidades de Nules, Burriana y Almassora.
Falomir ha valorado positivamente la existencia de una hoja de ruta para salvaguardar el litoral castellonense, pero exige "mecanismos para deshacer la telaraña que supone la burocracia para acelerar la solución definitiva a la pérdida de la costa", muy deteriorada por las consecuencias de los fuertes temporales que periódicamente golpean las playas.
Por su parte, el senador del Partido Popular por Castellón, Vicente Martínez, que ha asistido a la protesta junto a Elena Albalat, vicesecretaria de Ecología y Desarrollo del PPCV, ha lamentado que "en pleno siglo XXI nuestro litoral asiste a daños gravísimos sin que haya políticas que inviertan en su recuperación y protección".
Junto a ambos dirigentes, han acudido a la protesta alcaldes y concejales del PP de la provincia de Castellón, de municipios como Moncofa, Almassora, Nules, Cabanes y Oropesa, informa el PP.