Alicante

La derrota en Gijón y la imagen del equipo, completamente superado por su rival, ha dejado herido de muerte el proyecto de Sebastián Beccacece en el Elche. El conjunto ilicitano, que viene de un descenso traumático como colista, está, tras nueve jornadas de campeonato, al borde de los puestos de descenso y a una distancia sideral de la zona de ascenso, su único objetivo del presente curso.

El técnico argentino es consciente de la deriva peligrosa del proyecto, por lo que tras la derrota en El Molinón puso fecha de caducidad a su presencia en el banquillo si el equipo sigue sin alzar el vuelo. El Andorra, conjunto que preside el exfutbolista Gerard Piqué, puede ser el verdugo de Beccacece o, por el contrario, marcar la resurrección de un proyecto que parece en caída libre.

"Veremos el partido del lunes y en el caso de no conseguir la victoria seguramente no tenga sentido seguir forzando algo", comentó el preparador rosarino en caliente desde la sala de prensa del estadio asturiano.

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Beccacece, que asumió "toda la responsabilidad" de la derrota en Gijón, expresó su intención de hablar en las próximas horas con Sergio Mantecón, miembro de la comisión deportiva, y con el propietario del Elche, el también argentino Christian Bragarnik, para analizar su futuro y el del equipo.

Ya no se trata sólo de una cuestión de resultados, sino también de imagen. El equipo es frágil de mente y varios jugadores importantes se han diluido con el paso del campeonato.

"Veremos qué es lo más conveniente. Hay que ser honesto. La gente ha tenido paciencia y tolerancia. Lo hemos intentado, pero no es suficiente. Esto es concreción y afuera no somos fuertes", reflexionó el entrenador, quien insistió en que la situación del Elche "merece una revisión".

El preparador argentino, pese a la dinámica negativa del Elche, aseguró estar convencido de su proyecto deportivo y sentirse con fuerzas para seguir al frente, si bien no ocultó que en el fútbol "mandan los resultados".

"Uno tiene que responder más allá del cariño con los jugadores, la institución y Christian. El fútbol son resultados y si uno no consigue resultados, qué va a hacer", se preguntó el rosarino.

El entrenador argentino, desaminado desde que se le desmanteló su ataque al final del mercado, ha citado a sus jugadores este jueves por la tarde, a partir de las 18:00 horas, para un nuevo entrenamiento.

Salvo sorpresa, el técnico se sentará en el banquillo el lunes ante el Andorra, aunque tampoco se puede descartar una solución drástica por parte de Bragarnik, amigo personal y representante del entrenador.