Alicante

La actriz cinematográfica Elvira Mínguez (Valladolid, 1965) ha sido la protagonista de este viernes de Las Veladas Literarias de El Maestral que organiza Vectalia en Alicante, donde ha presentado la que es su primera novela, 'La sombra de la tierra', una historia sobre dos importantes mujeres que protagonizan una lucha de poder en un municipio de Zamora a finales del siglo XIX

La escritora se hizo con el Goya a mejor actriz de reparto por 'Tapas' en el año 2005, y ha sido nominada en otras tres ocasiones por Días contados (1994), Cobardes (2008) y El desconocido (2015). Entre sus trabajos recientes, destaca su papel de Flora en la adaptación de La Trilogía del Baztán, de Dolores Redondo, así como su interpretación en la serie El tiempo entre costuras, la adaptación de la novelda de María Dueñas.

A sus 58 años, descubre su pasión por la literatura y su talento para escribir. Mínguez describe a EL ESPAÑOL de Alicante la emoción que siente por este trabajo, y añade que esta no será su única novela, ya que está pensando en nuevas ideas para la siguiente, que también tendrá a una gran mujer del pasado y a su historia como protagonistas.

[Manuel Vilas en Alicante: "El gran desafío para un escritor es entrar en el alma de una mujer"]

Pregunta (P): ¿Cómo ha sido para usted que lleva tantos años dedicándose al mundo del cine dar el paso para convertirse en escritora con La sombra de la tierra?

Respuesta(R): Ha sido un proceso muy natural, ya que yo durante años había estado trabajando de alguna manera en estos personajes femeninos. Pero no fue hasta después de la pandemia cuando adquirí el hábito de escribir como algo mecánico, de levantarme todos los días a las seis de la mañana para trabajar en ello. Entonces me di cuenta de que tenía bastante material para darle forma a mi novela.

P: Atilana y Garibalda son las dos protagonistas de la novela, dos mujeres hechas a sí mismas que aunque están en un estrato social diferente luchan entre ellas por el poder del municipio de Villaveza del Agua en Zamora. ¿Por qué has elegido a dos mujeres para desempeñar este papel de cacique?

R: La razón es sencilla. De alguna manera he descrito a los personajes que a mi me hubiera gustado que me hubieran dado en el mundo de la interpretación. Las dos protagonistas tienen características de personajes masculinos, que normalmente están más habituados a la manipulación o el egoísmo.

A mi me interesaba poner como protagonistas a estas dos mujeres para cambiar un poco los roles. En esta historia, los hombres tienen características que normalmente asociamos a las mujeres. Todo esto se basa en responder a una premisa, si la existencia se basa en un pilar como el odio, ¿qué ocurre cuando el objeto odiado desaparece?

P: Atilana, Garibalda, Indalecio, Bela, Juventina, Tránsito, Demetrio, son los nombres de los personajes que aparecen en tu novela, la mayoría poco frecuentes en la sociedad. ¿Son nombres reales de la época?

R: La mayoría son nombres de familiares. Atilana, por ejemplo, era el nombre de mi bisabuela; Teobaldo, era un primo de ella; Tránsito, su hermana.. He ido recopilando y documentando diferentes nombres para adaptarlos y llevarlos a la novela.

P: En La sombra de la tierra se tocan diferentes temas como la venganza, la lucha entre mujeres o los conflictos familiares. El más duro de ellos es el tema de los abusos y el maltrato intrafamiliar. Este es un tema tabú, pero que quizá antes se ocultaba todavía más por el miedo a las apariencias.

R: Quería poner el foco en esa parte oscura, un problema que no suele verse, pero que sin embargo está ahí; escondido, debajo de la alfombra. Vivimos en una sociedad en la que la familia es uno de los pilares fundamentales. Por lo que hablar de abusos sexuales dentro de la propia familia es como darle una patada a ese pilar fundamental. Pero me parece necesario hablar de todas estas cosas que como sociedad tendemos a esconder. Por mucho que nos neguemos esas cosas suceden, y los números en cuanto a víctimas y menores abusados son espeluznantes.

P: ¿Qué ha significado para usted escribir La sombra de la tierra?



R: A mis 58 años me he dado cuenta de que me encanta escribir. He encontrado algo que me gusta tanto como una actividad nueva. Esto no quiere decir que vaya a dejar lo mío, pero voy a seguir escribiendo. Ha sido algo muy estimulante en todos los sentidos. Llevo un año con todo este proceso y es como recibir una noticia buena tras otra. Estoy tan feliz que ya estoy en el proceso de documentación para la próxima.

P: Dice que ya está trabajando en algo nuevo. ¿Se parecerá en algo la nueva novela a La sombra de la tierra?



R: No, será diferente. Pero me he dado cuenta que siento gran curiosidad por la historia de estas mujeres del pasado, que tanto tienen que ver con las de ahora. Es parte de nuestra historia. Entonces seguro que sigo en esa línea, pero dando un salto en el tiempo. Seguro habrá una gran mujer con una historia interesante detrás. Pero no te puedo dar más detalles porque de momento ni yo misma lo sé.