Teresa Viejo.

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Cultura LIBRO

Teresa Viejo, la mayor experta en curiosidad de España, en Elche: "Nuestra sociedad la ha esquivado"

Perodista, conferenciante y formadora, presenta este jueves su último ensayo: 'La niña que todo lo quería saber'. 

9 junio, 2022 02:04
Elche

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Cuenta Teresa Viejo (Madrid, 1963) que la curiosidad es un concepto con mala y poca prensa en España. Periodista todoterreno desde que se iniciara en la radio musical, diera el salto a 'Saber vivir' (TVE) o se convirtiera en la primera mujer al frente del matinal 'Más que palabras' (Radio España) o, más tarde en 2002, o en la primera -y única- directora de Interviú, con el tiempo, se ha ido especializando en la formación.  

Esa inquietud le ha llevado hasta su cuarto ensayo: 'La niña que todo lo quería saber' (Harper Collins Iberica) que vio la luz hace tres semanas, que ya va por la segunda edición, y que tendrá en Las Clarisas de Elche este jueves a las 20 horas su primera presentación oficial en el país previo encuentro en el Aula de la Mujer del Rotary Club, en el Casino de Alicante, con mujeres empresarias. 

Considerada como la mayor experta en curiosidad de España, confiesa que ha llegado a profundizar en ella "tras muchos años trabajando el desarrollo personal, al principio como proceso de autoconocimiento y luego con charlas porque te das cuenta de que puedes aportar cosas a las personas".

La portada de su último libro.

La portada de su último libro.

Era precisamente en las charlas donde le preguntaban dónde podían encontrar más información de la curiosidad. Para su sorpresa, los únicos libros interesantes provenían del mundo anglosajón; en español no había prácticamente nada, obviando puntos de vista filosóficos o históricos. Así que decidió dar el salto. El resultado 317 páginas y 10 capítulos cuyas iniciales forman la palabra en sí: Corazón, Universo, Renacer, Incertidumbre, Observar, Salud, Intuición, Descubrir, Aprender y Despertar espiritual.

Consciente de que este ensayo llega en un momento social de especial inquietud, Viejo defiende que "la curiosidad es la única vacuna contra la incertidumbre y que para aflorarla, "porque todas y todos la llevamos dentro", solo hay que "entrenarla y potenciarla" con sencillas prácticas que aporta el libro. 

Embajadora de buena voluntad de UNICEF, asume que "su misión" con las charlas y conferencias que ofrece, y ahora con el libro, es la de "despertar a las personas" en la considerada "la primera fortaleza humana", porque si se logra explotar la curiosidad, y ella defiende que como "cambio de hábito" es posible, "seremos más felices y completos"

Obviando, a su vez, "el hecho" de que se trate de una competencia "que empieza a ser muy demandada en las entrevistas de trabajo de los países anglosajones", también es buena para la salud, al ser "un factor predictivo del deterioros cognitivo de los mayores". 

Al respecto, recuerda que este martes, en la Feria del Libro de Zaragoza, firmó el libro de un señor, "que ya tenía sus años", por lo que cuando le dijo que se lo iba a regalar a su madre, Teresa Viejo se asombró y le preguntó que cuántos años tenía: 97 años.

Se trata pues, añade, de un libro pensado para todas las edades, siendo la base de la que se parte la de "recuperar la mirada del asombro" que todos llevamos en nuestro niño o niña interior.

España, por detrás 

El libro parte de la necesidad antes mencionada de cubrir un vacío: "La nuestra es una sociedad especialmente esquiva con la curiosidad frente a la cultura anglosajona o la germánica donde se premia una actitud curiosa que permite encajar el fracaso como parte del aprendizaje", asevera.  

¿Por qué se ha producido esta situación? Responde que porque la educación en España durante buena parte del siglo XX "se penalizaba hacer preguntas y predominaba un criterio propio", algo que a su juicio también se está dando con "la dictadura de las redes sociales", con las que abunda "el pensamiento único y eso no nos ayuda a acercarnos a lo que es diferente". 

Sin educación emocional ni en las aulas ni en casa, considera, sin embargo, que poco a poco esa España enconada "se va abriendo" y va abriendo la mente.

Y es que, como formadora en comunicación no violenta, sabe que el propio refranero "refuerza creencias" muchas veces falsas. Así, por ejemplo, la frase originaria 'la curiosidad mató el gato', cuenta, proviene de coetáneo de Shakespeare Ben Jonson, dramaturgo que introdujo con éxito otra bien distinta: 'la precaución mató al gato', siendo popular hasta que, con el tiempo, se quedó como está en la actualidad, no favoreciendo la opinión de que la curiosidad no solo es positiva, sino necesaria.