La confesión del monstruo de Llíria tras 50 años de abusos: tomó por pareja a su nuera y violó a su nieta

Entre ellas se encuentran su hermana, que fue la primera de sus víctimas en los años 70, cuando solo tenía 7 años. También abusó entonces de una amiga de esta. Una cuñada fue otra de las mujeres que sufrió los abusos entre los 14 y 17 años. Y, más recientemente, la hija de unos amigos, de solo 8 años.

El caso que ha provocado que todo salga a la luz es tanto o más sangrante. Se trata de la violación de una nieta con discapacidad, que es a su vez la hija de su pareja, ya que tomó por compañera sentimental a quien fue previamente su nuera.

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La Guardia Civil confirmó este miércoles a EL ESPAÑOL los hechos que reveló en exclusiva Levante-EMV. El agresor confeso, de 69 años, relató con detalle los abusos ante los agentes. Y lo hizo empujado, precisamente, por su pareja.

Cometió durante años con impunidad sus agresiones sexuales a las menores. Pero su nieta, una persona con diversidad funcional, sordera y dificultades de expresión ya mayor de edad, ha decidido de pronto contarle a su madre lo que le ocurrió en el pasado.

El agresor la obligó a guardar silencio cuando fue ella la víctima. Corría el año 2012. Tenía 11 años. Él, según ha confesado ahora, le introducía dedos en la vagina cuando la madre marchaba a trabajar. Atenazada, calló entonces. Pero ha decidido revelar ahora las agresiones sexuales ante el peligro de que le ocurra lo mismo a su hijo.

De ningún modo estaba dispuesta a que el bisabuelo de la criatura le hiciera pasar a su vástago por aquello que le truncó la infancia. Se negó a que tuvieran contacto alguno, y ello provocó un enorme conflicto familiar con la abuela del pequeño.

Todo se precipitó hace una semana, cuando esta última, emparejada con quien fuera en su día su suegro, amenazó a su hija con solicitar sus derechos como abuela para ver al pequeño.

Fue entonces cuando la nieta abusada, alarmada, decidió delatar, tras años de silencio, a su abuelo y padrastro violador. La revelación causó un auténtico cataclismo en la familia. La pareja del agresor se mostró incrédula en un primer momento. Pero le pusieron sobre la mesa todas las agresiones cometidas.

La mujer departió con la hermana agredida y con la madre de la niña, que habría sido su última víctima. Fue tan contundente el señalamiento que terminó por confesar, primero en el ámbito familiar.

Versiones dispares

Existen versiones dispares sobre las razones que le llevaron a detallar los hechos también ante la Guardia Civil. La pareja del agresor le habría puesto entre la espada y la pared. "Si has tenido huevos para hacer algo así, ten valor también para confesarlo", le habría dicho, según cita textualmente Levante.

Esta asegura no haber tenido constancia hasta la semana pasada, pero algunas de las víctimas dudan de este desconocimiento, y sostienen que el agresor decidió entregarse porque su nieta, en ese preciso momento, se encontraba denunciando los hechos.

En efecto, la nieta ha denunciado, como también lo han hecho otras víctimas preguntadas al respecto por la Benemérita. Al cotejar el relato ofrecido por el agresor confeso con el de las mujeres, la Guardia Civil procedió a su detención.

Según informó este miércoles el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV), el titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 7 de Llíria, en funciones de guardia, decretó este mismo martes el ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza del detenido por, presuntamente, "haber agredido sexualmente a menores de edad de su entorno familiar durante años".

La Delegada del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Pilar Bernabé, se pronunció este miércoles al respecto. "Se está produciendo la toma de manifestación de todas las víctimas que ha indicado esta persona. Parece que todas guardan una relación familiar con el hombre. La Guardia Civil ha tomado manifestación a varias de las víctimas, no a todas todavía, y parece que algunas de ellas han hecho distintas declaraciones al respecto", dijo.

"Vamos a dejar que la investigación siga su curso y termine. Efectivamente, parece que las agresiones se inician en los años 70. Algunas de ellas, en consecuencia, ya son mayores de edad. Me van a permitir que, por cuestiones obvias, por mantener la confidencialidad, no ofrezcamos más información", agregó.

La última de las agresiones sexuales habría tenido lugar en verano de 2021. Se trata de la hija de unos amigos, a la que habría agredido al aprovechar un momento a solas con la víctima. Se trata del mismo modus operandi con el que habría cometido, años atrás, las agresiones a sus propias familiares, en instantes en los que él se quedaba al cuidado de las menores.