El Ibex 35 ha vuelto a niveles de junio de 2017 al superar los 10.900 puntos. El selectivo de la Bolsa española ha subido un 3,26% esta semana, la tercera al alza de forma consecutiva, gracias a las expectativas de que la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) y el Banco Central Europeo (BCE) bajarán pronto los tipos de interés.

Sólo este viernes, el Ibex 35 ha repuntado un 0,7%, alcanzado los 10.943,2 puntos. Acciona (+2,68%), Solaria (+2,67%) y Endesa (+2,65%) han encabezado las subidas del índice en la jornada, mientras que Grifols (-6,03%), Fluidra (-1,44%) e IAG (-1,39%) han protagonizado las mayores caídas.

La compañía de hemoderivados ha pasado de liderar las subidas, a primera hora del día, a encabezar los descensos pocos minutos después. De esta forma, Grifols ha recogido con caídas el informe publicado, el jueves al cierre de la sesión, por la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

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El regulador del mercado español no ha encontrado “errores significativos”, ni “evidencias” de que las cuentas de Grifols no se correspondan con la realidad, pero sí ha hallado “deficiencias relevantes”.

En cualquier caso, el Ibex 35 ha optado por los avances en una jornada que las principales bolsas europeas han cerrado con tendencia mixta. Los principales índices de Wall Street retrocedían tras haber enlazado cuatro sesiones consecutivas revalidando máximos históricos.

Optimismo en torno a los tipos

De esta forma, los principales parqués del mundo consolidaban los avances logrados -en líneas generales superiores al 2%- en una semana que ha sido positiva gracias al optimismo en torno a la senda de bajadas de los tipos de interés.

En ello ha tenido mucho que ver la reunión que el miércoles mantuvo la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed). Tal y como se esperaba, la institución presidida por Jerome Powell mantuvo los tipos de interés, por quinta reunión consecutiva, en la horquilla del 5,25% y el 5,5%, y reiteró su previsión de tres posibles recortes de aquí a finales de año.

Según esa previsión, que no tiene por qué cumplirse, los tipos se situarán en 2024 en el 4,6%, -el equivalente a un rango del 4,5% al 4,75%-, para recortarse al 3,9 en 2025 y llegar 3,1% en 2026. El pronóstico para los dos próximos años es tres y dos décimas de punto superior, respectivamente, a lo avanzado en diciembre.

Con todo, las posibilidades que el mercado da a que la Fed baje los tipos de interés en junio se han elevado al 72%, prácticamente las mismas que da a que el BCE haga el mismo movimiento en el mencionado mes.

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En el caso del guardián del euro, ha sido su presidenta, Christine Lagarde, la que ha vuelto a señalar que junio es la fecha clave para que el BCE valore la posibilidad de ejecutar la primera bajada de los tipos de interés de este ciclo.

Por ahora, y a pesar de los avances significativos en los tres criterios del marco manejado por el también supervisor bancario -perspectivas de inflación, inflación subyacente y transmisión de la política monetaria-, el BCE aún "no está suficientemente seguro" de que la eurozona se encuentre en una senda sostenible hacia el objetivo de inflación, subrayó el pasado miércoles.

Un gran banco central ya ha iniciado la revisión del ciclo de restricción monetaria. Es el Banco Nacional de Suiza, que este jueves decidió reducir el tipo de interés oficial 25 puntos básicos, hasta el 1,5%. Se trató de la primera rebaja del precio del dinero en el país helvético desde 2014.

Además, el Banco de Inglaterra mantuvo esta semana los tipos de interés en el 5,25%, pero abrió la puerta a un primer recorte. Por el contrario, el Banco de Noruega, que los dejó en el 4,5%, anticipó que seguirán en ese nivel “hasta otoño”.

Petróleo, oro y bitcoin

Este viernes los inversores también tenían puestos los ojos en las Naciones Unidas (ONU). Finalmente, Rusia y China han vetado un boceto de resolución presentado por Estados Unidos ante el organismo, que pedía un cese el fuego inmediato en Gaza vinculado a la liberación de los rehenes en poder de Hamás. 

Pendiente de la evolución del conflicto, el precio del petróleo Brent, la variante de referencia en Europa, cedía un 0,23%, hasta los 85,6 dólares por barril. En la semana repuntaba un ligero 0,3%.

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El otro foco de incertidumbre para el mercado energético es la guerra entre Rusia y Ucrania. Moscú lanzó durante la última semana 49 ataques de represalia contra el Ejército ucraniano por las incursiones ucranianas en las regiones fronterizas de Bélgorod y Kursk, según informa Efe.

El oro retrocedía desde máximos históricos alcanzados por encima de los 2.200 dólares por onza. El bitcoin acumulaba dos semanas consecutivas de caídas y se situaba en torno a los 63.500 dólares. El euro retrocedía frente al dólar y se cambia a 1,08 ‘billetes verdes’.