Iberdrola puja por ganar fuerza en Australia con la compra de las renovables del gigante francés Neoen
- La multinacional española está en la fase final para adquirir varios activos de energía fotovoltaica, eólica y baterías de 600 MW.
- Más información: Iberdrola gana músculo financiero en EEUU con la venta de una planta fotovoltaica por 200 millones
Iberdrola tiene claro que el futuro renovable pasa por Australia. Tras lograr una aprobación clave para su primer megaparque eólico marino y reforzar su apuesta por el negocio de las baterías en el país, la multinacional española está pujando por los activos renovables del gigante energético Neoen en el estado de Victoria.
En concreto, la eléctrica se encuentra en la fase final de la subasta de seis proyectos operativos de energía fotovoltaica, eólica y almacenamiento de más de 600 megavatios (MW) de potencia, según informó Australian Financial Review. Fuentes de Iberdrola han declinado hacer comentarios al respecto.
La venta de estas plantas responde a la condición impuesta por la Comisión Australiana de Competencia y Consumo a la compra de Neoen por parte de Brookfield. Este requisito consiste en la desinversión de sus activos en Victoria para evitar una posible competencia desleal con otros promotores.
Y es que Brookfield, junto a su filial de energías renovables Brookfield Renewable y el grupo estatal de Singapur Temasek, hizo este año una oferta para adquirir la francesa Neoen por 6.100 millones de euros.
En Victoria, la gala Neoen opera la gran batería Victoria Big Battery de 300 MW, el parque solar Numurkah de 128 MW, así como el complejo eólico y de baterías Bulgana de 214 MW. En total, Neoen posee unos 1.800 MW en plantas renovables en Australia y desarrolla 48 proyectos adicionales.
Foco en Australia
Australia es un mercado prioritario en la estrategia de Iberdrola. La firma capitaneada por Ignacio Galán desembarcó en este país en 2020, cuando completó la oferta pública de adquisición (opa) lanzada sobre la empresa australiana de energías renovables Infigen Energy, que luego rebautizó como Iberdrola Australia.
Su presencia en el país se vio reforzada con la compra del gran parque eólico Mount James, de 1.000 MW de capacidad, y con la adquisición de Autonomous Energy, uno de los principales proveedores en este país de soluciones inteligentes y tecnología detrás del contador.
Iberdrola se ha marcado el objetivo de invertir más de 2.000 millones de euros en Australia entre 2024 y 2026 para alcanzar los 4.000 MW de capacidad instalada en los próximos años. En la actualidad, cuenta con más de 1.452 MW.
El pasado mes de mayo obtuvo la autorización preliminar para desarrollar su primer parque eólico marino en Australia, Aurora Green, frente a la costa de Gippsland (Victoria). La instalación podrá llegar a alcanzar los 3.000 MW de energía limpia y supondrá una inversión de más de 6.000 millones de euros.
En septiembre comenzó la construcción de Broadsound Solar and Battery, una planta fotovoltaica contará con 376 MW con una batería tendrá 180 MW. Iberdrola cuenta con tres baterías a escala comercial en Australia: de Wallgrove (75 MW), Lake Bonney (25 MW) y Smithfield (65 MW).
Su apuesta en la región también abarca proyectos de hidrógeno verde. A finales de 2022, se alió con el desarrollador de hidrógeno ABEL Energy para construir una planta de producción de hidrógeno verde y metanol verde en Bell Bay, en el norte de Tasmania.