Joaquín Goyache, rector de la UCM, y Begoña Gómez en un acto.

Joaquín Goyache, rector de la UCM, y Begoña Gómez en un acto. UCM

España CASO BEGOÑA

El rector Goyache ocultó su cita con Begoña Gómez en Moncloa a los órganos de gobierno de la UCM

Malestar en la Universidad Complutense tras enterarse por la prensa de la cita en la residencia del presidente del Gobierno. 

10 julio, 2024 02:21
Jorge Calabrés Arturo Criado Sara S. Bas Ismael Monzón

Joaquín Goyache no informó a ninguno de los órganos de gobierno de la Universidad Complutense de Madrid (UCM) de la reunión que mantuvo con Begoña Gómez en Moncloa. El encuentro, según el propio rector, sirvió para preparar una cátedra extraordinaria sobre Transformación Social Competitiva y el máster que la esposa de Pedro Sánchez acabaría codirigiendo.

Según han confirmado a EL ESPAÑOL miembros del Consejo de Gobierno y del Consejo Social de la Complutense, el rector de la UCM nunca mencionó a la universidad este encuentro con Begoña Gómez, que tuvo lugar en junio de 2020 y del que no se conocía nada hasta la semana pasada.

Tres meses después de aquella cita, que Goyache había ocultado hasta su declaración el pasado viernes en los juzgados de Plaza de Castilla, la UCM creó la cátedra extraordinaria con el patrocinio de Reale Seguros y de Fundación La Caixa. Durante la reunión, Begoña Gómez explicó a Goyache que ya tenía la financiación necesaria para poner en marcha el proyecto. 

Miembros de los órganos de gobierno de la Complutense han mostrado su "sorpresa" e "indignación" a este periódico. En concreto, las fuentes critican que se enteraron de esta reunión entre Goyache y Begoña Gómez "por la prensa el pasado viernes". 

El rector declaró ante el juez Juan Carlos Peinado en calidad de testigo, y como tal estaba obligado a decir la verdad. En su declaración, Goyache especificó que no vio a Pedro Sánchez y que acudió tras una llamada de la secretaria de Begoña Gómez convocándole a Moncloa.  

No obstante, las explicaciones dadas por el rector ante en el Juzgado de Instrucción nº41 de Madrid se contradicen con las que había dado hasta entonces a la comunidad universitaria. De hecho, su vicerrector en aquel momento, Juan Carlos Doadrio, dijo a El Mundo que había sido Goyache quien había ordenado "ofrecer una cátedra extraordinaria a Begoña Gómez". 

Esta declaración se contradice con las palabras del propio Goyache, quien dijo a los órganos de gobierno de la UCM que él no había conocido a la mujer de Pedro Sánchez y omitió en todo momento que se había visto con ella en Moncloa.  

Según él, fue Begoña Gómez durante la vista en Moncloa, quien se ofreció para dirigir la cátedra y crear un nuevo máster. Antes de verse, ella ya se había reunido tanto con Reale Seguros como con la Fundación La Caixa para conseguir el dinero necesario. 

La próxima semana, los días 16 y 19 de julio, Goyache tendrá que seguir dando explicaciones ante la comunidad universitaria: el martes ante el Consejo de Gobierno y el viernes ante el Consejo Social. El caso Begoña no está en el orden del día de ninguna de las dos reuniones, pero es probable que se mencione; en concreto, para que el rector explicó por qué ocultó la reunión en Moncloa.

"Ha mentido"

La situación de Goyache, dicen desde la UCM, es muy débil. En los órganos de gobierno universitarios no entienden su actitud en este proceso, creen que "ha faltado transparencia" y que el rector "ha mentido" cuando se le pidieron explicaciones. 

Este martes se ha conocido que el empresario Carlos Barrabés -a quien Gómez recomendó para que resultara adjudicatario de contratos públicos- ha recibido el alta hospitalaria y que, gracias a ella, Begoña Gómez ya no estará obligada a acudir a su declaración el próximo lunes 15 de julio. 

El interrogatorio a la esposa de Pedro Sánchez, en el cual tendrá que contestar a las preguntas sobre la creación de la cátedra en la UCM y de su relación profesional con Barrabés entre otros asuntos, se mantiene para el viernes 19.

La pasada semana, el mismo viernes que declaró Goyache, el juez Peinado suspendió la declaración de Begoña Gómez. El argumento de su abogado, Antonio Camacho, es que no había recibido una copia de la querella de la asociación Hazte Oír y que, por tanto, su clienta no conocía los hechos por los que se le estaba investigando.

Revuelta en la UCM

El artículo 19.3 del Reglamento de creación de cátedras extraordinarias y otras formas de colaboración entre la Universidad Complutense y las empresas establece que "el vicerrectorado competente elaborará un informe anual sobre todas las colaboraciones de patrocinio y mecenazgo" que se "presentará al Consejo de Gobierno". En el caso de la cátedra de Begoña Gómez no fue así. 

Fuentes de la Universidad señalan que el rector "actuó de espaldas a todos, sin contar con nadie", provocando "un gran malestar generalizado". No obstante, esta fuente cree que hay algo todavía más grave: "El daño reputacional provocado por una única persona, que se hace muy difícil de subsanar". 

Diferentes representantes de los órganos de control de la Complutense confirman que este asunto no se trató a nivel interno. "Nunca ha estado entre los puntos del día, siempre se habló de ello de manera informal y, por tanto, no tenemos información detallada al respecto", señala otro responsable que pide no ser identificado.

Todas las personas consultadas coinciden en que las cátedras extraordinarias, como el Máster de Transformación Social Competitiva, siguen unos cauces distintos al de otros estudios vinculados a la Universidad, ya que estos "se organizan generalmente con empresas y personas de relevancia para ganar influencia o reputación".

Sin embargo, "en este caso se ha generado mucha inquietud", ya que los responsables del órgano de gobierno de la UCM desconocen "su funcionamiento o la financiación que reciben". 

En la reunión del claustro, el órgano de representación de la comunidad universitaria que fiscaliza las cuentas y debe aprobar los presupuestos, el pasado 31 de mayo le preguntaron al rector quién pagó el software de la cátedra de Begoña Gómez, ante las informaciones de que Indra, Telefónica y Google se habrían ofrecido en un primer momento a hacerlo gratis. 

"No se hizo con dinero de la Universidad Complutense, se hizo con el dinero de la cátedra que tuviera que pagar el que sea, que yo no lo sé ni me importa", respondió Goyache. Más tarde se disculpó, alegando que se encontraba "cansado" y que las declaraciones se habían "sacado de contexto".

"Es un comentario que puede valer para la barra del bar, pero en las circunstancias en las que estamos, con un acuerdo muy reprobable desde un punto de vista ético y moral, no parecen lo más adecuado", indica una de las fuentes. 

En el último Consejo de Gobierno, del pasado 25 de junio, hubo varias preguntas acerca de las presuntas irregularidades de este máster y la reacción del rector siempre fue que todo se acabaría aclarando. Además, insistió en que le "importa poco" su reputación, que según él "permanece intacta", porque lo importante es "la imagen de la universidad". 

Presión por Moncloa

Esas aclaraciones a las que se refería Goyache pueden estar relacionadas con su declaración ante el juez Juan Carlos Peinado de la semana pasada, en las que aclaró que en julio de 2020 recibió una llamada de la mujer del presidente del Gobierno pidiéndole que fuera a Moncloa antes de formalizar la cátedra. 

El máster se comenzó a impartir en noviembre de ese mismo año, con financiación privada de Reale Seguros y la Fundación La Caixa, pero con unos cuantos parches que subsanar.

"La esposa del presidente no cumplía con los requisitos, porque ni siquiera está licenciada, y es la única cátedra de toda la Universidad que tiene un codirector porque la persona responsable puede tener mucha influencia pero no tiene la preparación suficiente", subraya una de las fuentes mencionadas. 

El rector "se vio presionado", justifica otra persona con representación en los órganos de gestión de la Universidad. “Cuando te llaman desde Moncloa lo hace el presidente del Gobierno", agrega esta fuente. 

Lo peor, coinciden todos, es el "daño reputacional que está sufriendo la Universidad". "El rector tenía que haber informado de todo esto de forma clara, pero si no es así o lo hace con medias verdades, todo se convierte en sospechoso", insiste otra persona más con alto nivel de responsabilidad. 

"Creo que es una buena persona, pero su gestión es muy caótica. Ya hemos visto en otras ocasiones que su forma de actuar suele carecer de transparencia", señala este responsable.

Se refiere al nombramiento en 2022 de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, como "alumna ilustre" de la Universidad. En ese caso acusaron al rector de haber impulsado esta decisión sin trasladarla a sus órganos de gobierno.