El Ayuntamiento de Villaquilambre traslada "tranquilidad" a los vecinos ante la apertura del centro de Migrantes: "Estarán integrados"
El alcalde, Jorge Pérez, ha asegurado que el pueblo leonés "acoge a quien venga": "Nosotros también hemos tenido épocas en las que hemos tenido que migrar"
17 junio, 2024 14:53Noticias relacionadas
El alcalde del municipio leonés de Villaquilambre, Jorge Pérez, lanzó hoy un mensaje de “tranquilidad” a los vecinos respecto al Centro de Atención a Personas Migrantes que San Juan de Dios pondrá en marcha en el edificio conocido como Chalet del Pozo de León y aseguró que este funcionará “totalmente”, así como que los hasta 180 usuarios del mismo, provenientes de Mali y Senegal, “estarán integrados”.
Así lo apuntó hoy tras mantener una reunión de trabajo con representantes de San Juan de Dios y de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado para “coordinar las diferentes facetas de la acogida que se llevará a cabo”.
Una cita en la que los representantes de la organización San Juan de Dios explicaron el programa que tienen contratado con el Ministerio hasta el 31 de agosto para el acogimiento temporal de hasta 180 personas provenientes de Malí y de Senegal. Por su parte, las fuerzas de seguridad recibieron información de cómo se llevará a cabo la burocracia respecto al papeleo, para darle los papeles la carta de asilados políticos y que puedan ya comenzar a trabajar.
Además, en el Centro se desarrollarán las actividades de enseñanza de idiomas y de integración, de la majo de unas 35 personas que trabajarán para San Juan de Dios y que serán trabajadores sociales, de integración, formación y orientación en el empleo e idiomas por supuesto.
“Tenemos que pensar en que el pueblo leonés es un pueblo que acoge a quien venga, que nosotros también hemos tenido épocas en las que hemos tenido que migrar. Ahora nos toca ayudar a quienes vienen a pedirnos ayuda a nosotros y quitar la sensación que ha quedado de que Villaquilambre es un municipio racista”, apuntó el regidor, quien abogó por “luchar contra la xenofobia y contra los partidos políticos que han querido promoverla xenofobia entre los vecinos”.
En este sentido, hizo un llamamiento a “trabajar para la integración” y para que, en el tiempo que los refugiados estén en el Centro “se sientan acogidos y protegidos por un pueblo que es hospitalario y que durante los próximos dos meses y medio va para que no haya ningún problema”, así como para que “queden en evidencia que las posturas xenófobas y racistas de algunos partidos políticos no son el sentir de los vecinos y vecinas”.