Ayer, jueves 11 de mayo, tuvo lugar en la Plaza de Toros de Las Ventas el descubrimiento de un azulejo en reconocimiento de la figura del maestro de la Tauromaquia, Andrés Hernando, con motivo del sesenta aniversario de su alternativa.
No hace mucho, en la plaza de toros de Ávila, también se le homenajeó por este mismo motivo, de una alternativa que tuvo lugar en la plaza de Segovia el 1 de julio de 1962, actuando como padrino Victoriano Valencia y “El Viti” como testigo, siendo su primer toro como matador de la ganadería de Arranz y de nombre “Generoso”, cortándole una oreja, mientras al segundo de Vicente Charro, le cortó las dos orejas y el rabo.
Así pues, la salud y la entereza de Andrés Hernando está prodigando estos reconocimientos tan merecidos.
Su trayectoria profesional es de sobra conocida por todos los aficionados con triunfos sonados en las plazas más importantes como Madrid, Sevilla y Barcelona, en las que realizó memorables faenas como en muchas otras plazas.
Su toreo profundo y auténtico a la vez que variado y artístico, llenó de calidad muchas tardes de toros a partir de la citada alternativa hasta su retirada oficial, que no de verdad, en 1973.
Y digo que no fue una retirada de verdad puesto que Andrés siguió toreando festivales y por supuesto en las plazas de campo y puedo dar fe de ello ya que, precisamente, en 1983, siendo yo alcalde de Ciudad Rodrigo y con motivo de un festival benéfico que organicé en la plaza propiedad del Maestro Pedro Martínez “Pedrés”, llamé a Andrés para que toreara dicho festival junto con el propio “Pedrés”, Curro Romero, Santiago Martín “El Viti”, Jaime Ostos y José Luís Ramos. Fue el 20 de agosto de aquel año y Andrés estuvo impecable con un novillo de José Matías Bernardos, “Raboso”.
Después, siempre que he coincidido con Andrés, hemos recordado aquella gran tarde en la que no sólo se puso el cartel de “no hay billetes” si no que hubo hasta reventa de entradas, algo insólito en aquella plaza. Y Andrés, como siempre, simpático, alegre y sobre todo sincero se extiende en detalles de su larga y dilatada trayectoria profesional. ¡Qué tiempos aquéllos!
Mi amistad con Andrés y con su esposa, también gran aficionada y parlamentaria de Madrid, Sonsoles Aboín, se ha ido consolidando estos últimos años, a través de nuestra Asociación Taurina Parlamentaria, de la que Sonsoles es vicepresidenta y, Andrés, nuestro asesor taurino.
La última vez que vi a Andrés torear fue precisamente el 17 de junio de 2011, en la Finca Medianillos de Victoriano de Río, en Guadalix de la Sierra, donde nuestra Asociación celebró una jornada campera. Allí, alternó con el malogrado Víctor Barrio y los parlamentarios Pío García Escudero y Juan Manuel Albendea, dos grandes políticos comprometidos con la Fiesta, y Andrés dio un recital de toreo clásico a la vez que brillante.
Después, intervinimos juntos en una conferencia – coloquio en Sepúlveda, el 14 de enero de 2012, donde Andrés, alternando de nuevo con Víctor Barrio y los que le acompañábamos en la mesa, destacó por su gran conocimiento de la tauromaquia, su evolución y los problemas que la afectan, que no son pocos.
Sin embargo, con personas como Andrés, enamorados de la Fiesta, pero sin ceguera alguna, es posible afrontar con rigor y con seriedad un futuro que más que incierto se presenta complicado, todo ello acrecentado por una crisis que está repercutiendo muy negativamente, como el propio Andrés explica con gran claridad.
Pero, en fin, no es el momento de las cavilaciones sino de disfrutar este gran acontecimiento del 60 aniversario de Andrés Hernando como matador y que va a celebrar en plenitud y con una familia de la que se siente orgulloso, en la que también su hijo Gonzalo, que, aunque quiso ser torero, no pudo seguir por un gravísimo percance, pero que triunfa ahora en los hipódromos con sus caballos de carreras, pertenecientes a una yeguada que lleva el histórico nombre de “Hernando – Aboín”. Dos apellidos ilustres unidos para siempre.
Pero volviendo al acto de ayer, al que asistió el Consejero de Presidencia, Justicia e Interior de la Comunidad de Madrid, Enrique López, y que pronunció unas palabras de merecido elogio al maestro Hernando, pero también de reflexión sobre la situación de la Fiesta, en el sentido de que el segmento de edad que mas la frecuenta son precisamente los jóvenes, lo que sin duda augura un buen futuro.
Así pues, deseamos Andrés que disfrute con los suyos y con todos los que te admiramos y queremos, esta entrañable e histórica efeméride de tu aniversario.