Las discusiones, la rutina y la falta de sexo, los principales motivos que llevan a las parejas a terapia, y en consecuencia, a generar relaciones tóxicas que terminan resultando dañinas para ambos. Entre estos motivos, las discusiones suelen venir por una mala comunicación. Para solucionar esto, tendrás que aprender a escuchar a tu pareja.
Son muchas las conversaciones que mantienes con tu pareja diario. Sin embargo, ¿realmente le escuchas? Es probable que no estés prestando atención realmente o que no estés escuchando activamente. Si quieres conseguir mejorar la comunicación en pareja, tendrás que seguir una serie de consejos básicos que proponen la mayoría de los psicólogos.
Las mejores claves para aprender a escuchar a tu pareja
¿No sabes comunicarte con tu pareja? Hay una serie de estrategias y consejos básicos que puedes seguir para aprender a escuchar activamente a tu pareja y así conseguir mantener una conservación fructífera que os haga crecer en muchos aspectos vitales e importantes.
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Recuerda que es muy importante mantener conservaciones incómodas con tu pareja. De hecho, son tantos los temas y cuestiones trascendentales que tendréis que tratar que tendréis que poneros de acuerdo para tener una conservación que resulte sencilla.
- Escucha y no hables. Ten una escucha activa a la hora de comunicarte con los demás. Se debe realizar de esta forma para conseguir empatizar, debiendo mantenerse siempre abierto a escuchar las palabras de los demás, evitando hacer juicios y siendo paciente. Además, a la hora de comunicarse hay que tener un objetivo a tratar y respetar siempre el turno de palabra. Si tienes claro lo que quieres decir, podrás evitar dar rodeos que no llevan a ningún lugar y también repetir información.
- Establece un momento para hablar. Si no sabes cuándo hablar con tu pareja o cuándo es el momento adecuado, estableced un momento que resulte bueno para ambos. Así los dos estaréis preparados para tener una conservación.
- Expresa lo que piensas y sientes. No te guardes pensamientos o sentimientos por miedo a lo que pensará la otra persona. Esto supondrá un lastre que iréis arrastrando con el paso del tiempo.
- Comunicación consciente. Es importante que no digas lo primero que se te pase por la cabeza. Por ello, primero piensa y plantea conscientemente todo aquello que quieres transmitir.
- Respiración. La respiración es importante para evitar llegar a un enfado extremo. De hecho, tomando conciencia de tu respiración verás cómo las conversaciones mejoran.
- Si estás enfadado o molesto, deja enfriar la situación. Hay momentos en los que una conversación se nos puede ir fuera de nuestro control, pero podemos percatarnos de que algo no va bien y que no va a acabar de la mejor manera. Si nos sentimos que estamos cerca de estallar, es el momento de pedir una pausa o dárnosla nosotros mismos. A esta técnica los psicólogos les llaman enfriamiento emocional.
- Ten una actitud empática. Más que la comunicación, también es importante la empatía y la asertividad para poder entender lo que siente la otra persona.
- Haz preguntas. Si quieres tener una buena conversación con tu pareja, tendrás que mostrar interés en los asuntos que tu pareja te está contando. De esta forma, haz preguntas.
- Evita las distracciones durante la conversación. En consecuencia, no mires el móvil, puesto que esto supondrá una falta de interés en lo que te dice tu pareja.
- Busca ayuda. Si crees que todo esto no funciona, tendrás que pedir ayuda profesional. Acudir a un psicólogo y hacer terapia de pareja puede ser una solución muy efectiva.