La vida útil de una prenda actualmente está en un año, dos años si la cuidamos muy bien. La “culpa” de estas cifras, la tiene en gran parte la forma en la que acostumbramos a lavar nuestra ropa. Es importante conocer bien nuestro electrodoméstico para hacer una limpieza eficaz y sostenible.
[Descubre el sencillo truco con el que tu ropa durará más tiempo y, además, ahorrarás agua]
Existe un botón en la lavadora que muy poca gente conoce y que es de vital importancia, no solo porque conseguirá que la ropa parezca como recién comprada, sino que también ahorrar dinero y evita que se derroche energía innecesariamente.
Muchas veces nuestra ropa no dura todo lo que quisiéramos, porque el cajón de la lavadora está sucio. Los residuos de detergente y suavizante se acumulan en su interior y acaban obstaculizando la acción del aparato.
Como el paso de los lavados, el cajón del detergente, especialmente el hueco destinado al suavizante, termina mostrando desagradables manchas de color marrón e incluso acaba amarilleando y desprendiendo un olor a moho muy desagradable.
Para evitar esto último es recomendable realizar una limpieza regular del cajón de la lavadora antes de que sea demasiado tarde, y poner en práctica una serie de trucos para que se ensucie tanto.
Seguramente ya sepas de la importancia que tiene lavar el tambor muy a menudo. Sin embargo, es posible que lo lleves haciendo de manera errónea toda la vida. De hecho, si no se saca, no se puede limpiar completamente.
Si abrimos la bandeja de la lavadora, veremos una palanca de color. Este es el botón fantasma que impide sacarlo completamente y limpiarlo con sumo cuidado. Levántalo y podrás sacar el cajón. Una vez hecho esto, limpia cuidadosamente todos los compartimentos y elimina todos los restos de detergente y suavizante y las bacterias acumuladas en su interior.
Los mejores productos para limpiar el cajón
El detergente no siempre es la mejor opción para limpiar el cajón. Recurrir a remedios naturales como el ácido cítrico puede ser una buena opción y muy útil en otros casos, como cuando quieres lavar la lavadora al vacío. Este es un paso que deberíamos realizar todos los meses si queremos asegurarnos de que nuestra lavadora tenga una larga vida y que funcione eficazmente.
El bicarbonato hay que evitarlo de todas las maneras, ya que no higieniza. Tampoco se recomienda el vinagre, que a la larga podría dañar las piezas metálicas de la lavadora. En definitiva, no todos los remedios de la abuela sirven para el mantenimiento de la lavadora.
Por último, es importante comprobar si nuestra lavadora está bien equilibrada. Si está inclinada hacia delante, por ejemplo, será más complicado que la lavadora pueda arrastrar el detergente hasta el tambor.
Lo ideal es que la lavadora esté perfectamente estable y plana, e incluso ligeramente inclinada hacia atrás, para que por la acción de la gravedad el detergente y el suavizante desciendan más fácilmente y en su totalidad, sin dejar restos.