El rechazo es algo que afecta a todas las personas en cualquier etapa de su vida. Por lo general, es una situación que, si no se gestiona bien, puede poner en riesgo nuestra salud mental, autoestima y estado anímico. Hay que tener en cuenta que a pesar de que duela se trata de una situación esporádica. Es decir, no se prolongará mucho en el tiempo. Como consecuencia, la emoción que ese rechazo ha provocado desaparecerá antes de lo que se piensa.
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En muchas ocasiones, dejamos de hacer cosas por miedo al rechazo. Intentamos evitarlo a toda costa. El problema se genera, cuando por evadir una emoción negativa dejamos de intentar conseguir aquellas cosas que queremos. Esto puede llevar a pensar demasiado e imaginar situaciones y escenarios que pocas veces ocurrirán en la realidad.
De esta manera, coartamos nuestra propia libertad y nuestros sueños por miedo al rechazo. Por ende, nunca conseguiremos lo que deseamos. Esto se puede ver trasladado a situaciones de la vida cotidiana, tales como un rechazo amoroso, una ruptura, no superar una entrevista de trabajo o que no nos acepten en la universidad en la que queremos matricularnos.
En el caso en el que haya sido un conocido el que nos haya rechazado, podemos intentar solucionarlo comunicándonos con esa persona. Esto evitará posibles situaciones incómodas, además de reducir nuestro malestar e impedir que se prolongue en el tiempo.
Si el rechazo te produce un temor hasta el punto de dejar de intentar cosas por ello, estas claves pueden ayudarte a superarlo.
Aprender a superar el rechazo
A pesar de que resulta prácticamente imposible evitar las situaciones de rechazo, podemos trabajar en nuestra autoestima y en el manejo de emociones para aprender a lidiar con esto.
El trabajador social clínico y especialista en resolución y gestión de conflictos Bob Taibbi afirma en Psychology Today que una de las formas de evitar que el rechazo nos afecte en gran medida, es aceptando que no podemos caerle bien a todas las personas. Y en muchas ocasiones, se trata de una simple cuestión de compatibilidad. A veces, nuestras cualidades y nuestra personalidad no atrae a los demás. Sin embargo, esto no es malo.
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Tenemos que aprender que no es posible congeniar con todo el mundo. Al ser nosotros mismos, a pesar de los posibles rechazos a los que nos enfrentemos, seremos capaces de establecer relaciones más profundas con los demás.
Al mismo tiempo, explica que es posible tomarlo como una lección. Aplicar lo aprendido a futuras situaciones puede hacer del rechazo un nuevo aprendizaje que nos lleve a alcanzar lo que deseamos. Estas son algunas claves para sobrellevar el rechazo.
1. Aceptar nuestras emociones
Es necesario reconocer ante nosotros mismos cómo nos sentimos. Es imprescindible saber que no pasa nada por sentir ciertas emociones negativas: lo importante es aprender a sobrellevar estas emociones y actuar.
Una de las formas clave para superar el rechazo es hablar con alguien de confianza sobre lo ocurrido. No solo alivia contar cómo nos sentimos, sino que podremos obtener una segunda opinión que nos aporte soluciones en las que no habíamos pensado.
2. Ser realistas
Es natural que lo primero que se nos venga a la cabeza tras una experiencia de este tipo sea negativa. En algunas ocasiones nos derrumbamos y creemos que todo en nuestra vida es y será un desastre. Sin embargo, es muy importante saber dejar de lado esos pensamientos. Es la única forma de superar lo ocurrido.
Al mismo tiempo, no debemos centrarnos en el rechazo en sí, sino en las posibles razones por las que ha ocurrido. Intentar comprender que no todo lo que ocurre es por nuestra culpa ayuda a superarlo. Es decir, no podemos permitir que afecte a nuestra autoestima.