Qué es la sisifemia y por qué es posible que estés pasando por ello
Un trastorno que hasta ahora no tenía nombre pero que lleva existiendo durante toda la historia.
19 septiembre, 2023 18:13El entorno laboral supone muchas cosas en la vida cotidiana de las personas: trabajo en exceso, ansiedad, cansancio acumulado, estrés y, en muchos casos, hasta depresión. Trastornos a los que no se les empezó a hacer caso hasta que recibieron un nombre.
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Antes, la autoexigencia, obsesión y perfeccionismo en el entorno laboral, no tenía ningún diagnóstico más allá de "necesitas vacaciones". Ahora, la necesidad de tener que hacerlo todo perfecto, incluso cuando no estás en el trabajo, se llama sisifemia y puede derivar en graves problemas de salud.
Las personas que padecen sisifemia no pueden alejarse del entorno laboral, ni siquiera en sus días de descanso. El trabajo vive en su cabeza hasta por la noche, sin parar de pensar en las tareas que tienen pendientes o en las que ya ha hecho, pero que quizás podría haber hecho mejor.
Ha sido José Manuel Vicente, director de la Cátedra de Medicina Evaluadora Pericial de la Universidad Católica San Antonio de Murcia (UCAM) quien identificó este trastorno basándose en la característica usual que acarreaban muchos de sus pacientes.
El término viene de mito griego de Sísifo, quien fue condenado por los dioses a subir una roca hasta la cima de una montaña desde donde volvería a caer por su propio peso. Sísifo tenía que repetir su tarea una y otra vez para volver a ver como caía, sin recompensa ni alivio.
La sisifemia deriva del agotamiento tanto físico como psíquico de un empleado que se ve obligado a alcanzar unos objetivos impuestos, así como vivió Sísifo, y que son imposibles de conseguir.
Unos objetivos que el empleado lucha constantemente por lograr, a base de horas y esfuerzo excesivo. Ambos se ven entrometidos en un mismo círculo: la búsqueda de una recompensa o alivio que nunca llega.
Este sentimiento afecta a la vida cotidiana y le hace reflexionar sobre todo lo que ha hecho durante su jornada laboral: ha llegado unos minutos tarde, ha respondido mal a su jefe, no ha dicho adiós a su compañero…
Circunstancias que le acompañan todo el tiempo y que le hacen reducir su ocio y círculo social para mejorar, alargando horas de trabajo y viviendo con un estrés que cada día afecta más a su rendimiento por la noche y a su energía por el día.
Ese nivel de responsabilidad, perfeccionismo y autoexigencia es lo que diferencia a la sisifemia de otros trastornos en el entorno laboral y aunque este haya sido desconocido hasta ahora, puede provocar otros que llevan existiendo décadas.
Qué supone la sisifemia
Si los comportamientos no desaparecen con el tiempo y se ven intensificados, puede aparecer ansiedad, angustia, estrés y hasta cuadros depresivos. También puede evidenciarse de forma física con subidas de tensión e incluso infartos.
Así como problemas graves en la salud, también aparecen otros que se tienden a ignorar porque se sienten diariamente y "no tienen importancia", tales como cansancio, dolores físicos, jaquecas o lumbago.
Muchas personas padecen la sisifemia sin darse cuenta y lo aplican a su vida como comportamientos normales, que sufren todas las personas que trabajan. Pero la realidad es otra totalmente diferente.
Son muchas las personas que afirman que se han presionado a ellos mismos para alcanzar unos objetivos. Aunque pueden ser impuestos por su jefe, también puede padecer este trastorno quien se ve obligado a cumplir sus propios objetivos.
La autoexigencia puede acarrear muchas consecuencias en uno mismo, pensar que no estamos haciendo suficiente y nos obligamos a dar hasta aquello que no tenemos. La salud mental es muy importante y debe tenerse en cuenta, en nosotros y en las personas que nos acompañan.