No hay hueco o abertura que no encuentre una mosca para colarse en casa. Algo que ocurre con mayor frecuencia cuando llega la época estival y se abren puertas o ventanas en las horas más frescas para aprovechar esa brisa que alivia los días más calurosos. El zumbido y la presencia de estos insectos inofensivos resultan, sin embargo, bastante molestos. Además, son poco higiénicos, porque en sus patas transportan numerosos virus y bacterias.
Acuden a las viviendas atraídas por el olor de algunos alimentos que les resultan sabrosos. Pero, sobre todo, por la suciedad. Les atrae todo resto orgánico que pueda estar descomponiéndose o el olor a vinagre, a la fruta pasada e, incluso, el olor de las heces. Y es que, con estos alimentos, las moscas pueden criar y alimentar a sus crías para que puedan crecer desde que ponen los huevos.
Son muchos los trucos que pueden encontrarse en internet para echar a las moscas. Las normas que todos deberíamos conocer para evitar la presencia de este molesto insecto es, precisamente, mantener nuestros alimentos en buen estado y si hay algo que se estropea, deshacernos de él lo más rápido posible. Dejar sin aclarar el culo de un botellín de cerveza o de una botella de vino puede suponer que ese líquido restante fermente y produzca vinagre, lo que las atraerá.
[El mejor remedio casero para eliminar la mosca negra]
No obstante, hay un truco para evitar que entren en nuestras viviendas. Se ha vuelto viral en los últimos días después de que lo publicara la tiktoker Alexandra Solera. En su cuenta compartió un vídeo en el que explica cómo preparar un espanta moscas casero, una opción para echarlas de nuestra casa sin necesidad de acabar con ellas. Y lo mejor es que funciona: con su truco se puede conseguir mantenerlas lejos del hogar.
En el vídeo comienza cogiendo una bolsa transparente de plástico. Puede ser la que se utiliza para guardar el bocadillo o los congelados. Después, se llena de agua hasta la mitad y se introducen un par de monedas. Pueden ser de dos o de cinco céntimos. Después, se le ata una cuerda a la parte superior de la bolsa, de modo que sirva tanto para cerrarla como para colgarla de alguna puerta o ventana de la casa donde dé el sol.
Y os preguntaréis: ¿cómo puede esto espantar a una mosca? Pues bien, según explica en su vídeo Soler, lo que ocurre es que en el momento en el que los rayos del sol penetran en la bolsa se producen unos destellos que son muy incómodos para las moscas. La razón es que estos insectos gozan de una visión muy buena y son más sensibles a este tipo de situaciones. A toda costa tratarán de evitarlo.
Cómo echarlas cuando ya han entrado
Ahora bien, si llegas tarde para evitar que entren, hay formas de echarlas de casa si quieres evitar el insecticida o agitar los brazos hasta reconducirlas hacia una ventana o puerta abierta. Por ejemplo, se les puede colocar una trampa de vinagre. ¿Cómo? Es tan sencillo como preparar un cuenco y llenarlo 3/4 con el líquido. Después, puedes tapar el bol con un filme de plástico en el que se harán varios agujeros.
Enseguida las moscas se sentirán atraídas por el olor, pero no podrán salir porque con la superficie transparente no sabrán identificar dónde está el orificio. Una vez fuera de casa, se las podrá liberar. No obstante, también hay trucos como el siguiente: cortar una botella por la mitad, colocar agua con azúcar en la base y colocar la parte cortada sobre esa base, pero del revés. De esta forma, se creará un embudo por el que se colarán las moscas atraídas por el olor del agua cuando haya comenzado a fermentar.