Más de un 20% de los hombres de entre 25 y 70 años sufre disfunción eréctil sin estar diagnosticada o tratada, según la Asociación Española de Andrología, Medicina Sexual y Reproductiva (ASESA). Esto significa que en muchos casos podríamos estar sufriendo esta dolencia sin siquiera darnos cuenta. Y los expertos a los que ha tenido acceso VIVIR coinciden en que el riesgo aumenta con la edad.

“En el caso de los hombres por encima de los 70 años, uno de cada tres va a tener disfunción”, explicó el urólogo Miguel Sánchez Encinas, responsable de Urología en el Centro Médico Paseo de la Habana (Madrid) y jefe de servicio en el Hospital Universitario Rey Juan Carlos. Esto se debe a que a medida que nuestra edad avanza, corremos un mayor riesgo de que aparezcan patologías que deriven disfunción eréctil. 

Pero en el caso de hombres de 50 años, “la prevalencia está en torno a un 18-20% y sus causas son diferentes, menos frecuentes, pero existen”, añade. Para averiguar si se está sufriendo disfunción eréctil, lo mejor es acudir a un especialista que pueda identificar los síntomas y diagnosticar la disfunción sexual. Y esto se debe hacer cuando se detecten anomalías en el funcionamiento del aparato reproductor.

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El urólogo Ignacio Moncada, jefe de servicio de Urología de la Clínica La Zarzuela (Madrid) y presidente de la Asociación Española de Andrología (ASESA), ha podido compartir con VIVIR cuándo podemos empezar a sospechar que la disfunción eréctil está haciendo mella en nuestra vida. 

¿Cómo tener una erección?

El especialista de urología aclara que la erección "no es más que la acumulación de sangre en las arterias del pene". Es precisamente eso "lo que permite que crezca de tamaño y aumente de dureza y rigidez", explica.

Para poder llegar a una erección, el pene necesita una entrada suficiente de sangre, una reducción de la salida sangre, un buen funcionamiento de los nervios, una cantidad adecuada de hormonas masculinas -fundamentalmente la testosterona- y, lo más importante, el estímulo sexual suficiente.

Los problemas de erección se presentan en hombres mayores porque con los años van sufriendo un deterioro en la salud y, más concretamente, en la cardiovascular. "La hipertensión, la diabetes, tener colesterol alto o el tabaquismo son factores de riesgo", aclara el doctor Moncada.

Pero tan importante como el proceso fisiológico, es el detonante de la erección: el estímulo psicológico. "Los problemas psicológicos, la ansiedad, el miedo también tienen una influencia muy grande", explica. 

El factor psicológico

Hay casos en los que la disfunción eréctil afecta a personas jóvenes. En este tipo de perfiles, "el factor psicológico es muy importante", explica Moncada. 

Y, el consumo excesivo de pornografía, al que se tiene acceso desde edades muy tempranas, ¿cómo se relaciona con la disfunción eréctil? El doctor Moncada señala que en los países donde hay un amplio acceso a la pornografía, "los consumidores necesitan ver cosas más excitantes".

Estas personas, "muchas veces llegan a la relación sexual y simplemente no tienen suficiente temperatura de excitación para llegar a la erección".

Fuga venosa

Una patología causante de la disfunción eréctil es lo que el doctor Moncada y otros profesionales médicos denominan fuga venosa o fallo del mecanismo corporo-veno-oclusivo. "La sangre va llenando el pene, pero si hay un pinchazo, no se termina produciendo la erección", explica Moncada.

Estos problemas se asocian a personas jóvenes. Y afectaría a los que presentan disfunción eréctil primaria, que "es una condición congénita muy poco frecuente", aclara Moncada.