La política de los contenidos descargables posteriores a los lanzamientos de los videojuegos es uno de los asuntos más controvertidos de la industria en los tiempos modernos. Los denominados DLC, de las siglas inglesa que conforman el término “contenido descargable”, se han convertido en una constante para los videojuegos que se lanzan en las consolas de actual generación, suponiendo un gasto adicional al coste del juego base para obtener más contenidos y nuevas formas de juego.
La mayoría de los lanzamientos de la actualidad contienen este tipo de aditivos, hasta el punto de que títulos como Dark Souls 3, Star Wars: Battlefront, The Division y un largo etcétera, llegan a contener un pase de temporada con todos los DLC incluidos por valor de 40 euros. Esto significa que el precio del videojuego al completo se dispara muy por encima de la media, algo que no está gustando a los jugadores y que lleva años causando una gran revuelo entre la comunidad. Nadie niega la calidad de algunos de estos contenidos, como es el caso de Left Behind, correspondiente a The Last of Us y considerado como uno de los mejores contenidos adicionales de la época moderna, pero realizar un esfuerzo económico extra no cala especialmente hondo en el bolsillo de los usuarios.
Es por ello que Electronic Arts ha decidido seguir un modelo mucho más beneficioso para los jugadores y que está recibiendo el favor de los mismos ante una medida que ya han tomado otros títulos como Overwatch, de Blizzard. En este caso, Titanfall 2 regalará todos sus DLC a aquellos usuarios que decidan hacerse con cualquiera de las versiones del juego que se encuentran en el mercado.
Desde la compañía norteamericana aseguran que “piensas de forma distinta acerca de este negocio cuando se trata de una franquicia como FIFA o Madden. Y eso significa que buscamos formas de no fragmentar al jugador tan rápido, sino que deseamos mantenerlos a todos unidos tanto como sea posible de cara a construir esa franquicia”, en palabras de Andrew Wilson, CEO de Electronic Arts.
De este modo, Electronic Arts puede estar iniciando un nuevo camino gracias a las opiniones de los jugadores, que reclamaban este tipo de acciones desde hace mucho tiempo. Parece poco probable que sea una táctica que vaya a sentar cátedra en el mundo de los videojuegos con los futuros lanzamientos que están por llegar, dado que la gran mayoría de títulos incluyen este tipo de contenidos adicionales post-lanzamiento para ampliar la experiencia del juego y su vida útil, algo que también requiere una inversión por su parte.
No obstante, juegos como The Witcher 3 (aunque posteriormente contó con dos expansiones), Overwatch, y ahora Titanfall se están uniendo a esta ola que piensa en la inversión que tienen que realizar los jugadores para adquirir su producto al completo, permitiendo que disfruten de todas sus prestaciones sin ningún coste adicional. Tal vez de este modo puedan evitar quejas y memes de los usuarios como estos que se han ido produciendo a lo largo del tiempo, algunos dirigidos de manera expresa hacia la propia Electronic Arts.