La impresionante finca de un conde valenciano en la que organizar una boda al más puro estilo 'Bridgerton'
La masión pertenece a la familia Puigmoltó, cuyo linaje se remonta al siglo XIX. Según los historiadores, el III conde fue amante de la reina Isabel II.
5 mayo, 2024 15:04Existe un lugar en la provincia de Valencia en el que es posible viajar al pasado e imaginar cómo era la sociedad en el siglo XIX. Es la finca del conde de Torrefiel, un inmueble construido en 1600 que cuenta todavía con elementos históricos de gran valor y unos jardines a la altura de la aristocracia de la época.
Está situada en el municipio de Fontanars dels Alforins, a una hora aproximadamente de Valencia, en la zona conocida como "Toscana valenciana", por su valle lleno de viñedos, caseríos y masías.
El actual titular es Vicente Puigmoltó y Prat, VI conde de Torrefiel. La historia de este linaje se remonta al siglo XIX, cuando el segundo conde de Torrefiel, Rafael Puigmoltó, defendió la causa carlista como noble y alcalde de Ontinyent durante la guerra civil.
Su hijo fue Enrique Puigmoltó y Mayans (1827-1900), III conde de Torrefiel, I vizconde de Miranda, favorito y, según apuntan los historiadores, amante de la reina Isabel II de España.
De hecho, a este oficial valenciano llegó a atribuírsele la paternidad del rey Alfonso XII, aunque otras investigaciones apuntan a otros hombres.
En la actualidad, esta impresionante mansión organiza bodas y banquetes. Además de los espectaculares jardines, cuenta con un comedor tallado en ébano, cuadros y mosaicos históricos y artísticos de gran valor. También destaca su vestíbulo, su biblioteca con suelo de mosaico y su salón con chimenea.
Todo ello al más puro estilo Bridgerton, la famosa serie de época de Netflix que narra la vida de una familia de la alta sociedad de Londres durante el período de la Regencia.
"Con su rica historia que se remonta al siglo XIX, la finca se ha mantenido fiel a sus raíces", descatan desde la empresa de eventos de Torrefiel, quienes subrayan que el lugar "combina la belleza histórica con la elegancia moderna".
Con una capacidad de hasta 255 personas en el interior, "ofrece un ambiente romántico y exclusivo que te transportará a otra época".
"La finca Torrefiel es un lugar con mucha historia y personalidad, lo que la convierte en un espacio único para la realización de proyectos creativos y artísticos. Además, su ubicación en plena naturaleza, rodeada de olivos y viñedos, convierte cualquier actividad en una experiencia mágica e inolvidable", afirman fuentes de Torrefiel.
El Grupo NAC es el encargado de la cocina. "Su cocina es un juego de texturas, sabor y buen producto. Su fuerte son los arroces y no cabe duda, que ya son un referente en la Comunidad Valenciana y concretamente, en La Vall D'Albaida", destacan.
Amante de la reina
Según la Real Academia de la Historia, Enrique Puigmoltó (1827-1900) fue militar, general de división procedente de Ingenieros.
Fue recompensado con la Cruz de San Fernando de Primera clase por su "valerosa actuación en la represión de los sucesos revolucionarios de Madrid, del 14 al 17 de julio de 1856".
Puigmoltó, según la institución histórica, estaba de guarida en el Palacio Real al mando de una compañía de zapadores cuando se produjo un levantamiento en Madrid del general O’Donnell.
"Ante el hostigamiento e intento de asalto del Palacio Real por unas compañías de milicianos, Puigmoltó ordenó cerrar todas sus puertas, situándose al frente de sus hombres ante la puerta principal. Posteriormente, aun encontrándose herido de cierta gravedad, logró dispersar a los milicianos que abandonaban sus posiciones. Por tales hechos, le fue concedida la citada cruz", según la academia.
Con su actuación, según algunos historiadores, se ganó el favor de la reina y se convirtió en su amante. Isabel II fue obligada a casarse a los 16 años con su primo, el infante Francisco de Asís de Borbón, cuya homosexualidad ha sido confirmado por diversos autores.
Al parecer, después del nacimiento de Alfonso XII, Enrique Puigmoltó fue enviado de nuevo a Ontinyent. Durante la III Guerra Carlista tomó parte en numerosas acciones, obteniendo varios ascensos por méritos de campaña.